1 5 5

1.4K 54 6
                                    

Hailey.

—¡Eres un pedazo de mierda!— grité. Cerré mis ojos reprimiendo las lágrimas, no lloraría por un inútil.

—Hailey...— coloqué mi mano en sus labios, no escucharía una labia suya.

—Callate.— negué mientras colocaba una de mis manos en mis labios para reprimir un sollozo. — No hables.

Suspire, tome mi bolso junto con las llaves de mi auto, me lastimó de nuevo, otra vez cuando había depositado mi confianza en él.

—Hailey, dejame hablar.— habló en un tono más fuerte.

Reí con amargura.— Habla, tienes todo el permiso de hablar.

El suspiró.— Lo siento ¿si? No salí con ella porque quise, simplemente el padre de ella quería que compartiéramos un momento juntos, siempre he querido recuperarte y ahora que lo hice ¿Crees que te dejaría ir de nuevo? — reí, esto me causa mucha gracia.— No te rías Rhode, esto es muy serio, porque todavía sigo enamorado de ti.

—No digas estupideces, Drew.— suspire.— ¿Crees que me creeré tu estúpido cuento cuando ya has tenido varios enlaces con ella? ¡Vamos Justin, no me creas tonta ni mucho menos estúpida!— exclamé, apreté mis manos y golpeé su pecho.— Ustedes estuvieron coqueteando, muchas veces ligaron por Instagram, también te recuerdo que ibas a su maldita casa a no se qué, a lo mejor a follar y ahora me dices que saliste con ella sólo como amigos. Eso sólo te lo cree la más estúpida y dejame decirte que yo no soy esa estúpida. Estaba intentado arreglar todo, que volviéramos a tener una relación pero tu lo mandaste a la mierda una vez más.

—No te vayas.— susurró.

—No me iré.— me reí en su propia cara, se merecía toda la mierda que podría existir en este mundo.— Porque tú ya te fuiste, cariño.

El sólo suspiro, la había cagado y lo sabía. Pero sólo quisiera que esa noticia fuera irreal porque yo todavía quiero tener una relación con él.

—Nena, no digas esas cosas. Yo nunca me iría de tu lado.— Justin tomó mis mejillas y acerco mi rostro al suyo para dejar un suave beso en mis labios.

—Lo sé, Drew.— deje resbalar una lágrima.— Pero me duele que me veas la cara de estúpida.

—¡No te estoy viendo la maldita cara de estúpida Baldwin, pero también deja tus estúpidos celos de lado, esta bien quieres la verdad te la diré!— mi corazón se había roto.— ¡Folle con ella demasiadas veces, demasiadas, y fue tan sabroso porque supo cómo llevarme a las nubes cuando tú ni siquiera lo hacías!— se rió en mi propia cara, ¿A caso no ve que sus palabras me duelen?— ¡No puedo creer que una niña de diecisiete años pueda hacerme sentir de maravilla cuando una de diecinueve no lo puedo!

Me soltó, se alejó de mi para después dar un golpe a la puerta y largarse de nuestro departamento.

Jailey; JB HB [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora