2.4 | Los Bratton

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6:28am

Erika a pesar de que se encontraba en una litera acostada, no había podido pegar el ojo en toda la noche.

Flashback

— Sé... Sé que no es el lugar... Ni mucho menos el momento y no espero que me correspondas... Pero...—bajaba  su tono de voz, apenas audible—Es que simplemente ¡esto me estaba frustrando! —Susurró mientras ponía su mano en el pecho.

— Lo siento —Reprimió.

— Bien, ya, jamás pasó nada —Hace una amarga sonrisa— ¿Amigos? —Le tendió la mano esperando estrecharla.

— ¿Estas bien con esto? —Preguntó el muchacho con el ceño fruncido.

— Para nada, pero... Ya se me pasará —Dijo dudosa pero en el fondo quería convencerse.

La siguiente charla fue de cosas triviales, se conocieron más.

—Bueno, a partir de aquí, soy chico —Rió Erika.

Y estrecharon las manos riendo.

Fin del Flashback

— Oye, pss, Adrian—Llamó su atención un muchacho.

— ¿Si?... —Su voz estaba ronca, da una vuelta en la cama y ve al chico, usaba lentes.

— La directora te busca —Apunta a la puerta.

Ahí estaba la directora con un teléfono en la mano cerrando la puerta.

— Gracias —Mencionó si prestar tanta atención.

Vio a su alrededor y en una cama de a lado, estaba una chica entre las cobijas, estaba acostada con un chico. Se suponía que esa "casa" solo era para hombres.

Realmente no le sorprendió que hicieran eso, pues era de esperarse.

Solo se puso sus tenis y salió.

Traía puesta una sudadera gris con capucha, la cual no dudó en colocarse.

Estaba muy fresco, tal vez menos de 10°C.

No había neblina pero sí que estaba lloviznando un poco.

Se supone que a las 8:00am se reunirían todos con su pareja y acamparían.

Caminaba hacia la sala de maestros y entró.

— Muchacha anoche nos llamaron de parte de ¿Isabel? —Dijo tranquila pero con cierta tristeza en sus ojos.

Atrás de ella había una mesa con unos panes y una cafetera. Había algunos maestros que estaban sentados ahí.

Erika sólo dio una mirada, indicando que prosiguiera.

—Dijo que tu hermano, Ryan, estaba en el hospital —Mencionó haciendo unos ademanes raros y muy firme.

— ¿Qué? —Repite desconcertada.

Uno de los maestros que estaba en la mesa veía con curiosidad el aparato que la maestra siempre traía en su bolsillo, el aparato eléctrico.

Lies 24/7Donde viven las historias. Descúbrelo ahora