Capitulo 4, ¿Nos estas siguiendo?

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Termino el primer día de clases. Al salir del colegio empecé a buscar a la Cathalina con la mirada, no la vi en ninguna hora de descanso pero pensé que por esas casualidades de la vida la encontraría a la salida. Empecé a desilusionarme ya que no la encontraba. El Paolo y la Cathalina eran un par de flojos por no haber venido a clases. Ya me había aburrido de seguir buscando así que decidí ir a buscar al Juanpa y la Meli para irme con ellos. Camine mas allá de la salida del colegio y encontré a la Meli sentada en una banca de la placita de al frente.
-Meli, ¿Dónde está el Juanpa? - Le pregunte mientras me paraba al frente de ella.
-Me pidió que te dijera que fue a la casa de un amigo. Te estaba esperando para que nos fueranos.
-En ese caso ya vamos nos - Antes de ponerme a caminar espere a que la Meli lo hiciera primero y cuando ella ya iba adelante mío me puse a caminar. Llevábamos algunas cuadras caminando. Para mí no vivíamos tan lejos del colegio para la mayoría sí, eso será porque ellos viven más cerca del colegio. - ¿Cómo te fue hoy? - Aproveche de buscarle tema ya que no andaba con sus audífonos puestos.
-Bien, natural. Me gusto volver al colegio, eso si me da miedo volver a estresarme como el año pasado - Aun así me siguió sonriendo después de lo que me dijo - Y ¿A ti?
-Si, bien, bueno, más o menos en verdad - Me miro con cara de duda - Hoy no vinieron ni la Catha ni el Paolo - Puse una mirada triste - Pero... hoy hubo un pequeño detalle
-¿Qué? ¿Qué sucedió? - Empezó a mostrar interés en el tema.
-¿Recuerdas al chico con el que me puse a "pelear" en la mañana?
-Pues si... lo recuerdo, ¿Qué sucede con él?
-Este tipo va en mi clase, es un chico nuevo. Se llama Isaac. - Puso cara de asombro mientras yo solo bajaba un poco la mirada.
-Hablas en serio, no te lo puedo creer - Empezó a reír - Que mala pata tienes, eh.
-Bueno si, algo. La verdad hable un poco con él y no es tan mala persona como yo creí - Me empecé a sobar de nuevo la frente recordando lo que hizo.
-¿Cómo dices que se llama?
-Isaac, ¿Por qué? - La Meli se detuvo, dio una vuelta y grito.
-¡¡Hola Isaac!! - Mierda. Él estaba una calle atrás de nosotros... Y se estaba empezando a acercar.
-Todo este tiempo nos estuvo siguiendo... - Le susurre a la Meli antes de que se acercara más hacia nosotros.
-Note recién que venía detrás de nosotros - Me susurro de vuelta, dos pasos más y él ya estaba frente a nosotras.
-Hola Lucia - Me saludo algo tímido. Baje la mirada por el momento, de daba vergüenza en saludarlo, será porque la Meli estaba con nosotros - Hola - le sonrió a mi hermana.
-Hola - Lo saludo alegremente - Me llamo Melissa, tú obviamente debes ser Isaac. Mi hermana me conto de ti.
-Cállate - Le dije al instante. Qué vergüenza. -¿No estás siguiendo? - Fue lo único que se me ocurrió decirle.
-¿Qué? - Preguntaron al mismo tiempo, Isaac y la Meli.
-No yo las estoy siguiendo - Me respondió Isaac - Yo vivo hacia esta dirección - Lo mire con una mirada rival.
-Así, pues apuesto a que llevas calles persiguiéndonos - Me cruce de brazos.
-Te repito, vivo hacia esta misma dirección - Solo faltaba una calle para llegar a nuestra casa, ojala el pase de largo.
-Yo... me retiro saben, debo llegar a casa pronto - La Melissa se empezó a alejar de a poco, me dio igual si se iba o no pero tampoco me iba a quedar a solas con Isaac - Adiós Lucia - Me dijo - Adiós cuñado - ¡Le dijo a Isaac! Empezó a caminar más rápido.
-Mocosa - Susurre para que Isaac no me oyera. Le di la espalda a Isaac, me incomodaba el silencio incomodo que quedo entre nosotros.
-Lucia... - Deje de darle la espalda y lo mire.
-¿Qué quieres? - Trate de preguntarle de una manera dulce.
-No te quiero asustar para nada... - Me puso nerviosa el principio - Pero somos vecinos.
-¿Es una broma? - Le pregunte mostrando una sonrisa irónica.
-Para nada - Esto debe ser un juego, este chico de verdad es mi vecino.
Y como es que nunca te había visto antes - Trate de hacerlo perder.
-Por favor... llegue hace un par de meses nada mas, aparte tampoco vivo al frente tuyo, por suerte.
-Aja, me parece - Empecé a caminar. No puedo creerlo. ¿Así de mala es mi suerte este primer día? Isaac empezó a caminar detrás mío - No me sigas - Lo mire fulminantemente.
-Pero si vivimos en la misma dirección - Solo una risita.
-Da igual. Entonces.... No me hables, no hagas gestos que llamen mi atención, no me susurres y haz como si no estuvieras cerca de mí - Puso cara de impresión.
-Bueno, tranquila linda
-¡Y no me llames así!

Sonríe, se feliz conmigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora