You're So Cute (Jimin Y Tu)

Cap3 Humana.

Solo vengo a decirles que perdonen por las faltas de ortografía después iré revisándolas y las corregire.

POV JIMIN

11:00 am.

Sábado.

Despierto con la luz de el día molestando mis pupilas y los cálidos rayos de el sol impactando en mi rostro. Remuevo mi cuerpo dispuesto a estirarme y poder levantarme para poder ir a comprar un poco de comida para el pequeño gato. Algo se mueve a mi lado, pensando que es el pequeño ser de hace noche le miro y solo en ese instante me percató de que no es ningún maldito gato el que esta ahí.

Abro de golpe los ojos al encontrarme con una chica a mi lado.
Nadamas ver que abre los ojos me hace pegar un fuerte grito y caigo de la cama, mientras ella sufre el mismo accidente que yo, debido a mi grito.

A una velocidad impresionante me pongo de pie, con una almohada entre mis manos. La miro y... esta desnuda.

Oh, dios!

Inevitablemente mi mirada se dirige directo a sus pechos, su trasero y a otras partes de su cuerpo.
Mi rostro estaba completamente rojo y no solo eso si no que mi cuerpo había subido un poco de temperatura.

Trato de mirar a otro lado pero su rostro llama toda mi atención.

Sus pestañas son largas, su nariz pequeña al igual que sus labios rosados y delgados, su piel pálida, tan pálida que incluso llegan a ser notorias las venas de su cuerpo más de lo normal; su cabello totalmente negro llega hasta sus caderas y por supuesto sus grandes ojos azules me dejan perplejo. No podía negar que era mi tipo de chica.

-¿Quien eres?-

Hable serio saliendo de mi ensoñación.

-Genial ahora no sabes ni quien soy.

-Como no me digas pienso golpearte con...-

No me dejó terminar su cuerpo tembló y se alejo unos cuantos centímetros mientras llevaba sus manos a su rostro y lo cubría con miedo.

-S-soy tu gato, tu me salvaste y me trajiste aquí.-

Habló lo más veloz que pudo abriendo un poco sus dedos para mirarme.

-¿Mi gato?-

Comencé a reírme como idiota, si claro mi gato.

-Dejate de bromas ¿piensas que soy tan estúpido?

-Pero... ¿que dices? Mira mis orejas y mi cola.-

Toco las orejitas de su cabeza y con su mano me mostro lo que era su colita de gato.
Las cuales note apenas las mostró.

Mi corazón se detuvo. Diablos. No, esto era una broma.

Busque con la mirada a lo que según seria del gato pero no lo encontraba, pensé que pudo salir del cuarto y estar en cualquier parte de la casa.

Pero es que yo nunca abrí la puerta.

Note la herida en su pecho pero no parecía haber rastro de las otras, camine hasta ella dispuesto a inspecciónarle, y antes de dejarme tocarla pego su espalda a la pared deslizándose hasta el suelo y comenzando a suplicar que no le golpeara.

Observe sus orejas y desgraciadamente llevaba una herida en ellas, tome su pierna sin importarme sus imploraciones. También se encontraba la otra herida.
Me estaba alterando.

Calma, Jimin, calma.

Le mire perplejo sin creerme lo que veía, ella sollozo mirándome con sus ojos llorosos.