Llantos prohibidos { EDITANDO }

Capítulo 4 ~ Oidos sordos, palabras mudas ~

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• Después del patio, las tres siguientes horas, a Ana se le pasaron volando, aunque a la vez tenía un poco de temor por lo que le había dicho Abril en la hora del patio. Ana no quería dejar de quedar con Alex, ya que le parecía un buen chico y a la vez un poco distinto a los demás. Al acabar las clases, Alex le dijo si quería ir con el asta sus casas, a ella, no le pareció mal, pero tampoco quería desobedecer las palabras de su nueva "amiga" Abril. Pero de todas formas ella asintió con la cabeza un si, y los dos sé fueron asta sus casas andando, por el camino, Ana le preguntó que le parecía Abril para que estuvieran saliendo juntos, Ana se puso un poco roja, cuando Alex la miró sorprendido por la pregunta, ya que Ana pensaba que Alex al decirle eso pensaría que le gusta...
Los dos acabaron hablando sobre ese tema asta casa, aún Alex, tenía que explicarle más cosas, a si que quedaron mañana ya que hoy miércoles tenían deberes que hacer.
Al ya oscurecer y Ana ya estar en la cama se mantuvo pensando si era buena idea quedar con el, por las palabras de Abril, pero ella siguió pensando que no se enteraría de la quedada.
A la mañana siguiente, ya era jueves. Pasaron las horas en la universidad, y parecía de que Abril no se había percatado de que Alex y Ana habían quedado ese día y se iban a ir juntos hacia sus casas, a si que Ana se mantuvo feliz, puesto que había quedado con su mejor amigo, ya que era con el que tenía muchísima más confianza.
Ya era por la tarde, aún faltaban 15 minutos para que Ana saliera de su casa para irse a dar un paseo junto a Alex, aunque Ana no paraba de pensar en el camino de la universidad hacía su casa, por el camino, Abril siguió a Alex y se enteró de que iban a ir hacía sus casas juntos, Abril como celosa que es la miró de forma mala y bruta hacía a ella. Le había dicho a Ana que mañana en la hora del patio la esperara en los lavabos, el cual allí Abril le quería decir una cosa.
Pero la parte buena, es que Abril no se había dado cuenta de que está tarde habían quedado Alex y Ana. Ana se mantuvo a pensar muchas cosas, como por ejemplo:
¿ Cómo le hubiera sentado a Abril si se hubiera enterado de que ella y Alex habían quedado ?
O;
¿ Mañana en la hora del patio que le dirá Abril ?....
Entre los pensamientos y supuestas hipótesis, ya se le pasaron los 15 minutos, así que Ana se dispuso a abrir la puerta y salir por ella. Ana y Alex, quedaron en el mismo parque de la ultima vez, pero esta vez Ana no tuvo que volver a esperar a Alex, esta vez el ya estaba allí. Los dos se saludaron con dos besos en las dos mejillas y un gran abrazo, Alex le comentó a Ana de que al pasar 1 hora y 30 minutos, el se tendría que ir al campo de fútbol, que unos amigos suyos le habían dicho de ir al campo a echar un partido de fútbol.
Ana en la quedada, no se atrevió a decirle a Alex, lo que le había dicho Abril, si le tendía que hacer caso o no, pero en eso Ana no pensó durante la quedada con el.
Al llegar la hora de que Alex tenía que ir al campo de fútbol, Alex le pregunto si quería ir con el, ya que le sabía mal dejarla hay sola, Ana sin contemplaciones, acepto ir. El camino hacía el campo, junto a una conversación que tenían los dos, se les hizo corto.
Al llegar al campo, en el habían 3 chicos, más Alex, serían 4. Alex le presentó a Ana sus amigos, Ana se acordó de la universidad, en la cual allí ya los había visto. Todos eran muy majos con ella, cada uno con caracteres diferentes pero de todas formas a ella lee seguían pareciendo todos muy majos. No como en la universidad, en la hora del patio y por los pasillos veía a gente de todos los tipos, gustos, colores...
Se estuvo con ellos asta las 22:00 de la noche, Alex se quiso quedar media hora más jugando, pero en cambio Ana ya debía de ir hacía su casa. Ya que Alex se había quedado en el campo, Ana tuvo que ir ella sola hacia su casa, por el camino vio a una sombra que le parecía que le estaba siguiendo desde que estaba con Alex, ya que a ella no le gustaba mucho ir sola por la calle, por miedo a que la rapten, la roben o algo más. Así que nada más notar esa presencia, Ana se fue corriendo hacia su casa.
Nada más llegar y entrar por la entrada de su casa, Ana saludo a sus padres, los cuáles ya estaban sentados en la mesa esperando a Ana para cenar, y todos se pusieron a cenar y a hablar, Ana nada más haber acabado de cenar se fue hacia su habitación y se encontró el libro el cual estaba escribiendo:
"Mente en blanco"
Como aún era pronto y no tenía mucho sueño Ana siguió escribiendo su libro, ya eran las 2:00 de la mañana cuando sé dio cuenta de la hora. Nada más que Ana viera la hora, se dispuso a arroparse en su cama y no tardo ni  15 minutos en dormirse.