El Chico Suicida [Yaoi/Gays]

Capítulo 6

"Mis sollozos no se escuchaban al otro lado de la puerta. La sangre y el dolor me acompañaba como si fueran mis únicas amigas, el dolor me ayuda a olvidar la tristeza mientras que la sangre me ayudaba a sacar el frío en mis brazos. Las lágrimas aparecieron para acariciar mi rostro con delicadeza y la oscuridad cubrió mis ojos..."

Desperté un poco desesperado sentándome de un salto, mi cabeza dolió al igual que mi estomago. Miré a mi alrededor y me acordé que no estaba en mi casa, Martín dormía en aquel sillón que estaba a algunos metros de la cama. Traté de levantarme con cuidado y sin hacer ruido, mis pies tocaron la alfombra y me digne a caminar con un poco de dificultad hasta la puerta y salir al pasillo. La casa tenía la misma estructura que la mía por lo que no me costaba saber donde estaba cada cosa, bajé las escaleras llegando hasta el salón y de ahí me senté en un gran sillón que miraba hacia la ventana donde se podía observar mi "casa" conectando directamente a mi salón bastante desordenado.
Me quedé pensando sobre casi toda mi vida, en cómo sería si mi mamá seguía viva, en cómo sería si mi padre estaría en la cárcel, en cómo sería si mi vida fuera normal, entre muchas cosas. También pensé en Martín y Diego, en especial en Diego ya que no entendía el porque esa actitud tan extraña a lo largo de todos estos años... en especial ayer, aquellas palabras que parecían tan sinceras.
Sentí como unas manos taparon delicadamente mis ojos, al principio me asuste pero aquella respiración tan cálida en mi cuello me relajó por unos instantes. Después una voz gruesa habló en mi oído izquierdo como un susurro.

-¿Qué haces acá? - las manos se movieron con dulzura hasta mis hombros.

-¿Y tu que haces despierto?- traté de susurrar.

Las manos se fueron y unos pasos mudos empezaron a dar la vuelta para el otro lado del sillón, sentí como finalmente alguien se sentaba a mi lado. Lo miré, aquellos ojos violetas tan brillantes y una gran sonrisa tan cálida como el verano. Desvíe mi mirada hacia la ventana para no ver aquellos feroces ojos.

- ¿Tenías ganas de ir al baño?- susurro de nuevo Diego.

-No...-.

Sentí como su mano recorría mi nuca y luego pasaba hasta despeinar algo de mi pelo. Sentí como aquel escalofrío iba por todo mi cuerpo y luego se iba por alguna otra parte.

-¿Una pesadilla?-.

Lo miré nuevamente, sus ojos brillaban aún más como dos luciérnagas enamoradas. Asentí algo tímido.

- Ven...- se levantó y estiró su mano hacia mi, yo la recibí y con mi poca fuerza volví a levantarme.

Seguí a Diego con timidez, subimos las escaleras y caminamos por el pasillo hasta llegar a la penúltima puerta, al entrar vi un cuarto un poco más pequeño que el de Martín, tenía una cama de dos plazas y un armario... era bastante vacía.
Se acostó en la cama y hizo un lugar para mi, por alguna razón del universo accedí. Estábamos los dos, un suicida y un matón, acostados en la misma cama mirándonos el uno a otro. Sus ojos me miraban con una dulzura que nunca había visto y me dedicaba una sonrisa bastante familiar.

-¿Porqué eres tan amable conmigo ahora?-.

- Si te incómoda sólo dímelo- se dio la vuelta dejando ver su espalda.

Yo tan solo me dormí después de unos minutos.

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Llegué a la escuela junto con Martín y Diego, por alguna razón Martín estaba bastante feliz y Diego estaba algo amable conmigo... desde anoche. Yo seguía normal, serio sin ninguna expresión, pero en el fondo me preocupaba por la forma de actuar de estos dos. Recordé nuevamente lo que pasó ayer, los golpes y los insultos, por suerte mis heridas sanaron pero no del todo y Martín me prometió que no me iba a dejar solo jamás.
Entramos a clases, estaba algo vacía ya que los chicos que me golpearon ayer los suspendieron, por lo que me sentía algo más cómodo. Me senté en mi puesto y saqué mi celular mientras el profesor no llegaba, vi que tenía varios mensajes de un número desconocido.

Contacto desconocido: Hey, marica, no te acerques más a Diego ni a Martín... ¿Sabes el daño que le haces a estas personas? Por tu culpa ellos van a terminar como tú, siendo basura. Ellos tienen muchas preocupaciones más importantes que tu propio trasero, así que pierdete imbécil o si no los golpes cada vez serán más fuertes... No queremos que también los mates como lo hiciste con tu familia.

Una tristeza invadió mi corazón, mis ojos se llenaban de lágrimas que querían salir pero simplemente yo no quería empezar a llorar. Las manos de Martín tomaron las mías, lo miré y su mirada mostraba su preocupación, acarició un poco mis manos y luego habló.

- ¿Qué pasó?-.

-n-nada...- mis lágrimas salieron un poco.

Martín trató de secar con dulsura aquellas traviesas gotas de tristeza, sentí como alguien me quitaba con búsquedas el celular. Diego había tomado mi celular y leyó el mensaje, luego marcó al número y llamó a aquel desconocido. Después de unos segundos le contestaron.

- Mira imbécil, le dejas otro mensaje más así a Javier y te juro que te encontraré y te golpeare hasta que mueras de dolor- finalmente Diego colgó.

-No tuviste que decirle eso...-dije un poco más preocupado.

- En la vida no hay que ser un maldito marica- dijo con furia.

-Esa boca, tío- Martín movió su cabeza de lado a lado.

Vi como Diego y Martín se dedicaban miradas de odio, y luego echando humos Diego se retiró. Y con mi celular...

Yeiii~~~ capítulo nuevo!! :D
Ojalá les haya gustado
Comenten que pareja les gusta más 7w7
¿Están en el shipp de JavierxMartin o JavierxDiego?
¿O tal vez del shipp MartínxDiego?
(0 comentarios xd)

Bueno... UN BESOTE GRANDE
O3O