"¿Lauren Jáuregui?" Oh cielos, la directora estaba aquí, seguro me había metido en problemas. Solo tenía una buena noticia, podía seducir a la directora Cabello, cuanto quisiera verla mojada.
No toco más que dirigirme hacia ella. Me encantaba ver sus faldas tan pegadas, su trasero lucia tan bien, tan apretado.
"¿Estoy en problemas?" Pregunte, al menos tenía que empezar por algo.
"Claro que no señorita, solo ocupo que me ayudes a algo" guiño mientras movía sus caderas a propósito, quería empujarla hacia las paredes ahora mismo y hacerla mía.
Llegamos, esto me ponía de nervios, yo estaba derretida.
"Bueno, como veo que tienes excelentes calificaciones pero tu conducta no, puedes no recibir el certificado, estoy dispuesta a ayudarte Lauren, pero esto no es tan fácil como tú lo crees" acomodo sus papeles. Yo solo asentía con nerviosismo, era tan provocativa.
"Tendrás que hacerme una mamada, tener sexo conmigo al menos una hora, después de esto dejare de molestarte y mirarte con lujuria, cariño" ¡Qué! ¿Estaba escuchando bien? La directora Cabello quería hacerme suya, lamentablemente era virgen, con ningún novio obtuve relaciones, pero debo admitir que videos si he visto.
"¿Está usted loca?" No podía aceptar y menos aquí, podrían descubrirnos, podrían quitarle su título de maestría, esta mujer no pensaba en las consecuencias.
"Tengo una hora libre, una gran oficina, además soy la directora y puedo hacer jodidamente lo que desee aquí dentro" agarraba sus senos, estaba tan caliente como yo.
Me levante y la tome delicadamente, estaba cargándola, mi pecho estaba empujando hacia ella, oh Camz no traía sostén, podía sentir sus pequeños senos erectos bajo su blusa. Envolví mis brazos al rededor de su cuello y me besó con avidez. Explore su boca con mi lengua caliente cuando le devolví el beso. Dios estaba tan excitada.
Mientras la besaba, Camila desabotonaba mi blusa liberando mis senos, se detuvo a mirar hacia abajo mientras me acariciaba, frotando mis senos y los apretaba los nipples. Ella bajó la cabeza y cuando tomo un nipple, grité. Ella chupaba con avidez mi seno izquierdo mientras jugueteaba con el derecho. Tire mi cabeza hacia atrás, para disfrutar la sensación. Mientras se enderezaba, sus pequeñas manos calientes viajaron hacia mis piernas. Luego su mano se dirigió hacia enfrente en mi cálida humedad. Yo jadeaba y gemía mientras su mano se deslizaba adelante y atrás.
"Oh si estás muy mojada, mierda" murmuró la morena.