Capítulo 5.

203 30 6
                                    


Ese día Myungsoo se veía muy triste, así había estado los últimos tres días, había tenido una discusión con Sungjong y según le había escuchado decir a Sungkyu el motivo... ni él lo sabía, pero después de hablarle varias veces por teléfono a Sungjong y no obtener respuesta alguna, pateo con mucha fuerza una camisa que había en suelo, esta apenas se movió, aventó su celular a la cama, este reboto y cayó al suelo desarmándose por completo, no pude evitar reír ante lo cómico de la situación.

Él lo recogió de inmediato y lo volvió a armar, lo encendió y se quedó mirando la foto que tenía como fondo de pantalla, obvio era una de él y Sungjong, solo desvié la mirada, Sungkyu no se encontraba y yo no tenía la más mínima idea de a donde había ido.

Myungsoo se acostó en la cama y yo me senté en la orilla cerca de sus pies, se puso una mano en los ojos y vi como dos enormes lágrimas salían de ellos.

Bufé y me levante muy enojado, me pare frente al espejo... seguía sin poder verme, seguía siendo una existencia sin sentido ni dirección, tome un frasco que había en el mueble y lo lance con fuerza contra el espejo, así al menos notaria que había "algo" ahí, al menos conocería mi existencia.

Myungsoo se levantó muy exaltado, tenía una cara de miedo puro, miro el espejo y se fue acercando lentamente, pero su celular comenzó a sonar en ese mismo instante, haciéndolo pegar un brinco, tanto a él como a mí, yo estaba parado a la mitad del pequeño pasillo, me iba a quitar para evitar chocar con él, así que cuando Myungsoo se dio la vuelta para ir por su celular, yo me iba a mover para sentarme en la cama de Sungkyu pero... Myungsoo se dio la vuelta sorpresivamente, y camino hacia donde yo me encontraba.

Todo paso tan rápido que no lo pude esquivar, pensé que Myungsoo me atravesaría pero en lugar de eso choco conmigo, chocamos tan fuerte que caí de sentón contra el suelo, Myungsoo se sobaba la frente, donde le había pegado con mi cabeza.

Levanto la mirada y de repente se quedó muy quieto, con los ojos muy abiertos, los cuales parecía que estaban a punto de salirse de sus orbitas, se puso blanco, su mirada reflejaba el mismo miedo que cuando rompí el espejo, comenzó a caminar hacia atrás dando un grito horrible, y entonces pude notar que me él me miraba.
—¡Ahhhhhhhh!, ¿Quién... qué eres tú?

—¿Puedes verme?

Me levante entre asombrado y feliz del suelo, poco a poco me fui acercando a donde se encontraba Myungsoo, pero el retrocedió de inmediato.

—Aléjate cosa... no sé qué seas pero ¡aléjate!

¿Cosa?, comenzaba a cabrearme, así que decidí vengarme.

—Soy el fantasma de tus navidades pasadas...

Lo dije con tono fantasmagórico, intentando contener la risa.

—Pero si estamos en otoño.

—Cierto... Entonces...

—¡Que te alejes he dicho... no te acerques más!

Se fue haciendo bolita contra la pared, yo seguía caminando hacia él, y de repente se desmayó.

Corrí hasta donde estaba, intente cargarlo pero no pude, pase uno de sus brazos alrededor de mi cuello y lo levante hasta que quedo la mitad de su cuerpo en la cama, lo demás lo rodé hasta que por fin estuvo acostado en esta.

Le puse una almohada en la cabeza y fui por una toalla y agua fría, la moje y se la puse en la frente, el comenzó a despertase, pero en cuanto me vio volvió a gritar y se levantó tan rápido que choco su frente con la mía tan fuerte, que el ruido retumbo en toda la habitación.

ParadiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora