Opciones.

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*Narra Rupert*

Ibamos a grabar la escena en la cual nos conocíamos en la calle, y la veía demasiado nerviosa a pesar de que lo único que teníamos que hacer era pasar por la calle y mirarnos. La verdad es que yo pensaba que estaba nerviosa por eso, pero en realidad era por otra cosa, y no sabía el porqué. La vi hablando por teléfono y al poco vino y me dijo que era para mí,  y lo cogí, eran sus amigas diciendo que esta noche iban a hacer una fiesta en casa y que fuera con mis amigos, que nos lo íbamos a pasar bien. Después de esto, deduje que ella no quería que hicieran la fiesta y menos que yo fuera, pero les dije que si a sus amigas sin que se enterara, y lo único que me esperaba es que ellas lograran convencerla a ella para que se quedara.

Me puse a pensar en la fiesta mientras terminaban de prepararlo todo, sabía que esta escena iba a ser un antes y un después y no me equivocaba, pero la verdad es que iba a salir en el capitulo de la próxima semana y tenía muchas ganas de ver como quedaba todo, de ver que pensaban los demás y del vuelco que iba a dar la historia por unos minutos en la calle, la verdad es que era todo demasiado perfecto.

Vi que se estaba quitando la manta que llevaba encima porque hacía frío y la verdad es que la habían dejado hermosa vestida y maquillada, me quedé embobado mirándola hasta que llegó el momento de grabar, a pesar de que pensaba que iba a hacer falta grabarlo varias veces, por mi culpa, no fue así, pero me quedé enamorado de la manera en que me miró, como pasaba exactamente en la ficción. Después de eso vino hacía mi y parecía preocupada.

Gin: Tengo que pedirte algo...

Rupert: ¿Qué?

Gin: Verás esta noche mis amigas van a hacer una fiesta en casa, y la verdad es que no me gusta nada y te quería pedir si podía quedarme hoy contigo, aunque tenga que dormir en el suelo, de verdad no me importa.

Rupert: Es que me han invitado a ir tus amigas, y tengo ganas de ir y desconectar de todo un rato, pero te prometo que nos vamos pronto a casa, de verdad. Vente un rato.

Gin: Es que se como acaban esas fiestas y de verdad, son todo lo contrario a mi.

Rupert: Por favor, te prometo que lo pasarás bien.

Gin: Lo dudo, pero es lo único que puedo hacer, no tengo más opciones, al menos en tu casa luego podré estar tranquila.

Rupert: Seguro que si, ya verás.

Gin: Con una condición, que vengas a comer conmigo.

Rupert: Hecho.

*Narra Gin*

Era lo que me quedaba, confiar en que saldríamos pronto de allí, que era como un infierno para mi, no soportaba aquellas fiestas, y menos cuando todos estaban bebidos y se ponían a hacer el idiota, me cansaba de todo, pero al menos no solían hacer muchas fiestas, excepto en verano. Terminamos de grabar y después nos fuimos a comer a casa. Cuando terminamos el se fue y llegaron las chicas para prepararlo todo para la fiesta. Mientras ellas estaban con todo el jaleo yo me fui a mi cuarto a escribir alguna canción para irme a cantarla después a mi cuarto cuando me empezara a aburrir en la fiesta, entonces la igual que las otras que había escrito últimamente, hablaba de lo mismo. Aún tenía miedo de salir con alguien, de que me volvieran a hacer daño otra vez, y yo sabía que debía seguir y olvidarme de todo pero aún no podía.

Se empezó a hacer tarde y decidí prepararme para la fiesta, la verdad es que no iba vestida como mis amigas, porque para el rato que solía quedarme demasiado tiempo allí, al poco rato me iba a mi cuarto y me ponía el pijama. Aunque no pudiera dormir me tumbaba en la cama a darle vueltas a todo, aunque ya normalmente le daba vueltas a todo y más desde septiembre.

Cuando terminé de prepararme sonó el timbre y fui a abrir la puerta, al parecer ya había llegado Rupert con sus amigos y me tocaba a mi quedarme sola con ellos ya que las chicas habían salido a comprar algo que se les había olvidado, pero lo que iba a pasar en unas horas iba ser algo que sería incapaz de olvidar por un tiempo.

If this was my last song.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora