Capitulo 10 (Gran Final)

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Mi casa estaba ardiendo en llamas y yo también, solo espero que mi madre esté bien por favor.

-Maldita Julieta te detesto.

-Maldiciéndome no vas a arreglar nada Emilse.

-Lose y eso me frustra.

La voz venía de mi recamara, subí las escaleras rápidamente y pude ver a Julieta ahí.

-Al fin te encuentro, acabare contigo.

-Mi querida Emilse, ves tu casa ardiendo en llamas y ¿Aún así piensas acabar conmigo? Que egoísta eres.

-Mira Julieta desde que tu llegaste a mi vida he sufrido mucho, eres una maldita y he decidido que acabare contigo.

-Me das risa, si usas tu poderes quemaras mas tu casa.

Julieta estaba en el las escaleras de mi casa y abajo solo había llamas.

-Mira Julieta solo recuerda una cosa "El hielo nunca podra ganarle al fuego"

Y la avente, pude escuchar sus gritos y como se quemaba viva, ya no pude soportar el humo del fuego y me desmaye.

Cuando desperté estaba afuera de lo que era mi casa y Cristopher me estaba sosteniendo, podía ver como los bomberos haciendo su trabajo.
Llego a la ambulancia y me subieron, aun no sabia muy bien lo que pasaba pero un momento, ¿Dónde estaba mi madre? ¿Por qué solo me subieron a mi a la ambulancia?

Al llegar al hospital me durmieron. Al despertar pude ver a Cristopher a un lado de mi.

-Al fin despertaste ¿te sientes mejor?

-Cristopher ¿Dónde esta mi madre?

-Tu madre...

-Cristopher dime por favor que esta bien.

-Lamento decirte eso Emilse pero...tu madre no se salvo, tenía demasiadas quemaduras y el humo acabo con sus pulmones lo lamento tanto.

¿Que? por Dios ¿mi madre había muerto? No podía dejar de llorar, mi madre era todo para mi. Esta había sido la peor noticia que me pudieron haber dado.

-Tranquila aquí estoy.

-¿Y Julieta?

-Ha ella también la encontraron muerta.

No me daba felicidad ni mucho menos, mi madre murió por culpa de esa maldita.
Salí del hospital estuve 1 día ahí aunque mis pulmones estaban mal ya no podía estar ahí, tenía que estar con mi madre.
Cristopher me llevo a la capilla donde la estaban velando, al llegar no pare de llorar, solo quería estar sola.
Alguien todo mi hombro y era mi padre.

-Hija, se que esto es muy doloroso pero, tienes que ser fuerte.

Abrace a mi padre y seguía llorando.
Cuando enterraron a mi madre ya no sabia que hacer.
Estaba totalmente sola.

-Hija, creo que tendras que entender que ya no puedes estar aquí porque estarás sola, tendrás que irte de nuevo a Florida y conocer a mi esposa.

-si esta bien, antes vamos a lo que quedo de la casa de mis abuelos, quiero ver que salvo.

Al llegar mi ropa no se había quemado ni algunas cosas ya que el fuego no llego hasta mi habitación, empaque todo.

-Hija ya es hora de irnos el vuelo ya casi sale.

-Padre antes tengo que despedirme de alguien.

Fui a la casa de Cristopher y le toque la puerta, el salió con su cara demacrada.

-Hola Cristopher.

El no me respondió solo me abrazó y me dio un fuerte beso en la frente.

-Te extrañare Emilse, se que es lo mejor para ti aunque nada sera lo mismo sin ti. Y aquí te estare esperando, cuando regreses estaré aquí, y estaremos juntos.

El comenzó a llorar y yo también.
No me soltaba hasta que mi padre solo él claxon se si carro.

-Esta bien te tienes que ir, Adiós mi niña hermosa.

-Hasta pronto...

Qué irónico, lo que mas quería antes era haberme marchado a Florida y ahora es lo que menos quiero.

Al llegar allá estaban todos mis amigos, entre a mi antigua preparatoria.
Lesly que era la nueva esposa de mi padre me callo muy bien.

Pasaron los años ya me había acostumbrado a vivir acá.
Tenía mi propio departamento y había estudiado para psicóloga, como se lo había prometido a mi madre un día.
Nada era lo mismo sin ella, y sin Cristopher, cada día que pasaba no dejaba de pensar en el y en su sonrisa, ya tenía 8 años que no sabia nada de el, dejo de marcar, dejo de mandar mensajes, dejo de mandar cartas parecía que se lo había tragado la tierra.

Un día decidí viajar a Alaska, habían cambiado muchas cosas. Llegue a la casa de Cristopher, alado de su casa se encontraba la que antes era de mis abuelos, ahora estaba reconstruida y alguien mas vivía ahí.

Toque en la casa de Cristopher y me abrió su madre.

-Hola señora, ¿Esta Cristopher?

-Cristopher ya no vive aquí.

-Entiendo.

-Vive en la casa de alado.

Cristopher habia comprado la casa de mis abuelos.
Me acerqué a la casa y estuve 5 minutos parada enfrente de la puerta hasta que al fin decidí tocar.
Alguien movio la perilla, al abrir la puerta no creí que era el.
Si era el era Cristopher.

-Mi niña, mi niña hermosa sabia que ibas a regresar.

-Si Cristopher regrese.

En ese me abrazo y nos besamos.
Al fin estaba en casa.

Nos casamos y decidimos vivir en la casa de mis abuelos. Trabaje como psicología en la prepa donde estudiaba, Cristopher era maestro de es misma preparatoria, tuvimos 1 hermosa niña a la que llamamos como mi madre Renatta.
Y al fin era feliz junto con mi hermosa familia y ya no solo se quede en un simple sueño, si no todo de hizo realidad.

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⏰ Última actualización: Dec 20, 2016 ⏰

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