LA PERRA

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Primer día de trabajo y tengo que levantarme a las 5 de la mañana. El empleo es de 6 en punto de la mañana , hasta el medio dia. Solo seis horas. Tengo que ir vestida con pantalon negro, blusa blanca y tacos, porque aun no tengo el uniforme del hotel.

Voy a trabajar en el restaurante del hotel , recibiendo a los huespedes y encargándome de que todo este bien y que no haya ninguna queja.

Me alisté lo mas rápido posible porque debía coger el bus a las cinco y media. Cuando salí aun estaba oscuro y hacia mucho frio. Me pregunté, cuanto tiempo duraría esto. Era el primer día y ya queria que fuera el último! 

El bus pasó a las cinco y treinta y cinco y me embarqué. En 20 minutos llegué y caminé una cuadra hasta llegar al hotel.

Un chico de lentes me abrió la puerta, cargaba el uniforme de botones del hotel y me saludó.

-Eres la chica nueva del restaurante verdad?- me dijo con una sonrisa.

-Si , hoy es mi primer día- no supe mas que decir y me fuí en direccion al restaurante

Cuando entré, no habia nadie. Habian dos pisos, divididos por unas escaleras de madera y se escuchaba claramente personas en la cocina haciendo el desayuno.

Subí las escaleras y habia alguien ahí, una chica muy bien maquillada y con el mismo uniforme de la otra que me habia entrevistado. Estaba un poco regordeta y podía sentir esa vibra de creerse superior a los demás.

-Hola, soy Claudia, la nueva hostess del restaurante- dije con claridad y un poco de timidez.

- Hola, Buenos dias- dijo sin mirarme, arreglando unos platos del buffete que habia ahí .

Me quedé parada ahí hasta saber que podía hacer y después de arreglar esos platos me dijo con seriedad.

-Tienes siempre que ver que todo este Perfecto en el restaurante. No puedes dejar que la comida este regada en la mesa o que algun plato esté sucio. Tu eres la encargada de que el desayuno salga bien-

Me Miró y me dijo a continuación

-Anda al baño a maquillarte porque lo que tienes puesto no es adecuado-

La odié en ese mismo instante.Me sentí fuera de lugar y comenzaba a pensar que ya odiaba ese trabajo. Nunca me había puesto maquillaje y aquella mañana, apenas me había puesto un poco de base y un poco de lapiz de labio rosa. Nada de delineador o algo para mis ojos.

Corrí al bano y por suerte habia traido la base y el lapiz de labio en mi bolsa.

Salí y ya eran las 6.30. El desayuno estaba por comenzar.Y aunque quería matar a esa perra gorda, también quería aprender que es lo que tenía que hacer.

-Por dos días me quedaré contigo para que sepas que hacer en el desayuno. Yo antes era la encargada de esto, pero me ascendieron- dijo con suficiencia.

"Perra, hija de puta" dije para mis adentros "me interesa que te hayan ascendido?"

El primer huesped subió por las escaleras y Ella lo saludó con un tono de voz suave y amigable, no como lo hizo conmigo. "Hija de puta" seguía diciendo para mis adentros. 

Le preguntó el nombre al huesped en inglés, puesto que no parecia entender español , y enseguida ella marcó un tick en una lista de nombres que ella cargaba.

Seguían llegando los huespedes para el desayuno y la observaba. Cuanto se esforzaba por ser tan amena con los huespedes. Poco mas y les lamia el culo. Claramente yo no era así, y no sabia muy bien despues de verla como iba a sobrellevar ese trabajo pendejo. 

Ella se paseaba por las mesas, preguntando si todo estaba bien en sus platos, y yo pensé, "si yo fuera uno de los huespedes, le escupiría la cara"

Terminó la mañana, y llegó el medio dia. Hora de irme a casa. 




DESEO INCONTROLABLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora