Me crearon con la ley: Si no es PERFECTO no es bueno. Para mí, todo lo que haga todo lo que soy y todo lo que tengo tiene que ser perfecto. Así me enseño mi mamá. Una mujer como pocas que se valió por si sola para criarme a mí y a mis 2 hermanas.
Te...
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Me levanté temprano siendo consciente que el día de hoy iba a ser bastante largo. Me puse ropa cómoda y salí al encuentro de Lio. –Hola, lista? –Sí, dale vamos.- dije saludándolo y sentándome. Lio me conto todo el camino sobre la reacción de su madre al enterarse del nuevo contrato. Al parecer no le gustaba mucho la idea, pero no le quedo de otra que aceptar y felicitar a Lio. Llegamos y corrimos por la playa, al terminar el calentamiento entramos y esta vez solo hicimos braceo ya que en el campeonato teníamos que llegar rápido al fondo para coger las mejores olas. Terminamos y Lio me llevo a la universidad. –Oye, ayer Ana me llamo en la noche. –Ana? Para qué? –No sé, al parecer quería hablar conmigo pero sentí que quería sacarme información sobre ti. –Sobre mi? –Sí, ya te dije que es media loca.- dijo riéndose. –Y que le dijiste? –Nada que no sepa todo el mundo. Para escaparme a sus preguntas le hable sobre la competencia y va a ir a vernos. –A vernos o a verte?- le pregunte riéndome. –A verme. –Perfecto, ya tenemos porrista.- él se rió. –Le llevaré los pompones.- explote de la risa al imaginarme a la colorada con pompones en la playa. –Porque siempre nos burlamos de mis citas y nunca de las tuyas? –Porque es más divertido.- Ya habíamos llegado a la universidad. –Chau, te llamo más tarde para avisarte si te caigo a cenar. –Ok. Chau.- me despedí y me fui hacia mi primera clase del día. Terminó y me encontré con Karol y Rugge en el camino hacia la cafetería. –Como estuvieron las olas Valu?- me preguntó Ruggero después de saludarme. –Bien, al parecer habrá buen oleaje toda la semana. –Ok perfecto, que iré a verte el sábado y espero no defraudarme. –Amor, ni le digas esas cosas que su sed de victoria es más grande que la mía.- dijo Karol. –No creo que exista alguien más obsesionada que tú.- le dijo Rugge con mucho cariño. –No no no, en obsesión Karol se la lleva de encuentro. Pero cuando es alguna competencia o algo así gano yo. –Valen es la persona más picona que conozco.- entramos a la cafetería y ya estaban todos sentados en la mesa de siempre y en los asientos de siempre, al parecer Caro y yo ya éramos parte del grupo sin ser específicamente del grupo. Me serví una ensalada como siempre y cuando llegue a mí sitio Michael se paro y me dio un beso veloz en los labios sentándose y haciéndome espacio a su lado. Tenía una mirada más tranquila pero igualmente apagada, le faltaba ese brillo especial. –Solo comes ensalada?- me preguntó uno de los chicos. –Sí, estoy en entrenamiento. –Ah! Cierto que tú también eres surfista no? –Sí. –Entrenas siempre? –Sí, pero ahora que estoy a días de un campeonato es más estricto. –Que, tú también participas en el campeonato de Lionel?- me preguntó Chiara. –Sí, competimos juntos. Somos del mismo equipo. –Que es por equipos?- preguntó Agus. Me sentí atacada de preguntas, pero era sobre surf así que no me incomodaba. –No, siempre compito sola. Pero este es un campeonato especial que es a dúos. –Ah ok. –Pero igual, tú siempre comes ensalada.- dijo Karol riendo. Todos siguieron comiendo y se pronuncio un silencio en la mesa. Michael apunto con su tenedor una manzana que yo había elegido. –Te lo vas a comer?- me preguntó. –No, puedes tenerla amor.- le respondí con una gran sonrisa la cual me devolvió pero sin ese brillo en los ojos. La tomo con su tenedor y le dio un gran mordisco en su boca. Alcé la mirada y tenía a todos mirándonos excepto a Karol y Rugge que estaban en su mundo y a Caro y Agus que estaban conversando. –Bueno, ya vamos a clases.- dijo Agus parándose. –Vamos.- agregó Caro poniéndose de pie. Michael se paro y cogió la manzana con una mano y junto la otra con la mía. –Chau a todos.- agregó antes de empezar a caminar. –Chicas, nos vamos juntas no?- preguntó Karol. –Si si.- le respondió Caro. –No, yo no.- Ana giro rápidamente a verme. –Te veo en la cena, Ka.- agregue y camine con Michael, Caro y Agus hacia nuestra siguiente clase. –Al final, que hiciste ayer?- me preguntó Michael. –Te cuento cuando nos vayamos, es un poco largo. –Ok. –Estas bien? –Sí, te cuento mejor cuando nos vayamos.- me dijo sonriendo. –Espero que al lugar a donde vayamos sea lejos si no nos faltará tiempo. –Nos alcanzará el tiempo. –Valen, puedo ir a tu competencia el sábado?- me preguntó Agus interrumpiéndonos. –Si claro.- dije ya entrando al salón. Me senté al lado de Michael y él se encorvo apoyando su cabeza contra la mesa, mirándome fijo a los ojos. –Tus ojos son verdes celeste no? –Sí.- dije a las justas ya que tenía sus ojos muy al tanto de los míos.- El profesor entró y empezó la clase. Él saco su cuaderno y se sentó bien para atender al profesor. La clase terminó y el profesor se retiró. –No vienes a entrenar hoy no?- le preguntó Agus a Michael poniéndose de pie. –No, dile lo de siempre. –Ok. –Y porque no vas a entrenar tú?- le preguntó Caro. –Tengo que hacer unas cosas.- le respondió con una sonrisa ya que al parecer no quería decir el real motivo. –Valen, porque le dijiste a Karol que no vienes con nosotras? –Acompañaré a Michael a hacer esas cosas que tiene que hacer.- dije riendo. –Ah ok.- se acercó para hablarme al oído. –Acuérdate que le dijiste a mamá que vendrían a cenar hoy. –Si si, nos vemos ahí.- le respondí. –Vamos para el estacionamiento no?- preguntó Michael. –Yo me voy al estadio. Chau.- dijo Agus y se despidió de todos. Caminamos con Caro hasta el estacionamiento y me despedí de ella. –No vengas tarde que mamá los estará esperando. –Si si. Chau.- dije caminando hacia la jeep. –Los estará esperando?- dijo Michael cuando nos sentábamos. –Mi mamá te está invitando a cenar.- dije sonriendo. –Y cuando pensabas decírmelo? –Ahora. –Pero pero, no he comprado nada y estoy vestido de manera muy informal.- dijo indignado empezando a arrancar. –Que, pensabas ponerte traje? No tienes que llevarle nada. –Pero pero. –Pero nada, ella te amará. –Como lo sabes? Si jamás has llevado a un chico antes. –Ya te ama, no te imaginas lo emocionada que está por conocerte. –Ok. Cuéntame lo que fuiste a hacer ayer. –Pasa que el papá de Lio tiene una empresa de publicidad, y hace unos días ha hecho un contrato con Billabong. –Billabong?- dijo asombrado. –Si, Billabong. Bueno, le ha pedido a Lio que se encargue de esta campaña y que le consiga a las personas que participaran en la publicidad y eso. Entonces Lio me dijo a mí y a otros chicos, y ayer fui a firmar el contrato y todo. –Woww! Trabajaras con Billabong? –Algo así. –Y que tienes que hacer? Modelar? –No no, son tomas en el agua. Solo tengo que hacer trucos y ellos me tomarán fotos. –Que bien mi amor! Te felicito, es una súper oportunidad. –Gracias y sí, estoy feliz.- vi como pasábamos por un lugar donde vendían flores y él se estacionó. –Que hacemos acá? –Tengo que comprar unas flores. Espérame acá.- me dio un beso, se bajo y camino hacia uno de los stands. –Hola Victoria!- saludo a una señora mayor que estaba haciendo pequeños arreglos. –Joven Michael! Pensé que ya no vendría.- dijo la mujer abrazándolo muy cariñosamente. –Ya empezaron las clases.- le dijo asomándose al mostrador. –Te preparó lo de siempre? –Si por favor.- la mujer empezó a armar un pequeño ramo. –Veo que has venido acompañado.- dijo mirándome con una gran sonrisa. –Qué bueno que ahora tengas compañía. –Espero tenerla siempre.- le respondió Michael mirándome con mucha ternura. –Que bien hijo, no es bueno andar solo por la vida. –Eso lo sé. –Bueno, acá está tu arreglo de siempre.- le dijo alcanzándole el ramo de flores. Él le alcanzó unos billetes. –Gracias Victoria, la veo en un mes.- dijo acercándose a ella y abrazándola. –Cuídate hijo, te estaré esperando. – le dijo la mujer.
