Vendida A La Mafia

CAPITULO 3

- Levántate y sal, y no hagas ninguna estupidez, en el primer movimiento en falso te mato a ti y a todos los que están aquí.

solamente asentí tragándome ese nudo que se empezaba a formar en mi garganta  por un monto se me vino a la mente mi celular, siempre lo tenia en silencio. hice como si tropezara y en un movimiento guarde mi celular, camine afuera del del autobús, al salir del autobús uno de los uniformados abrió la puerta del auto que estaba en frente, -sube - dijo el hombre que me apuntaba con un arma en la cabeza, antes de subir me golpeo en la cabeza haciéndome caer en un sueño profundo.

(...)

desperté, con un terrible dolor de cabeza al abrir los ojos me encontré en una habitación que mas bien parece, sótano total mente oscuro, con un ¨baño¨ y una ventana que esta en la parte de arriba del lavamanos, y un colchón viejo en el que estaba acostada, trate de pararme pero me fue imposible ya que tenia las manos y los pies atados. 

lleve mi boca al pedazo de cinta, al querer romperla pero se escucho a alguien querer abrir la puerta por lo que por instinto trate de parecer dormida, escuche la puerta abrirse, junto a pisadas fuertes y firmes, trate de tranquilizar mi respiración. 

- se que estas despierta, el golpe no te deja inconsciente tanto tiempo- dijo una voz profunda y ronca. - trate de contener algunas lagrimas pero me fue imposible- levántate - ordeno mas no hice caso y me quede quieta - te levantas o te levanto. - con una de mis manos limpie mis ojos que no paraban de llorar.

 voltee mi cabeza y lo vi, un hombre de unos veinticinco años tez morena cabello castaño al igual que sus ojos color cafe intenso que me miraban con tanta frialdad que erizo mi piel. le hizo una señal a uno de los hombres para que salieran, dejándonos solos. me hizo una señal para que me parara, trague saliva, y al tratar de pararme lo logre, con un gran esfuerzo.

- ¿que es lo que hago aquí?-  dije con un nudo en la garganta. me dio una mirada reprobatoria 

- tu celular dámelo - ordeno levantando una mano hacia mi.

-n-nose de que hablas- trague saliva 

- claro que lo sabes, dámelo.- dijo demandante con un toque de furia en su voz 

- no te voy a dar absolutamente nada, por que no lo tengo. tal vez se me callo en el auto bus. - 

- nada mas te lo voy a repetir una sola vez, dámelo. al contrario lo voy a tomar de donde lo tengas escondido. 

- si ¨sabes¨donde esta tómalo. - dije con la voz mas fría. 

en un solo movimiento, su mano estaba entre mis pechos, erizando mi piel con su toque frió, solo basto unos segundos para que tuviera mi celular en sus manos. 

- haz caso a lo que te digo.- dijo para después salir por esa puerta. 

- ¡imbécil! - grite del coraje que me había provocado que tomara mi celular. después de que se marchara el, entro una señora de avanzada edad, con una sonrisa cálida.

- vamos señorita, ya esta listo su cuarto. - trague saliva - después de que vea su cuarto tiene que medirse unos vestidos para el baile de esta noche.

-¿mi cuarto...? ¿cual baile? -

- claro su cuarto, no creerá que el señor, la iba a dejar dormir aquí ¿verdad? y, claro el baile de bienvenida para usted, el baile en el que el señor, la presentara.

-¿presentarme? - reí nerviosamente 

- claro, como la princesa del demonio.

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¿el tercer capitulo? sera... lo disfrutaron?

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