Hoy, en mi opinión, es uno de los días de verano más caluroso del mundo. El sol es sofocante, como sacado de un desierto. Lo único que lo alivia es un buen baño o algo refrescante.
Granizados. Amo los granizados. Los tomo a todas horas. Antes mi madre se quejaba, pero hace tiempo desistió. Empecé a hacerlos caseros, para mí misma, para tenerlos siempre. Me salían deliciosos.
Oh, sí. Fue una buena elección crearlos con sangre. Aunque ahora mi madre me tiene miedo por utilizar la de papá como prueba.
