¿Alma o corazón? (Sebastian y tu)

cap 36

—pues, como tu sientes algún extraño tipo de afectó hacia esa humana, te propongo que La herencia que dejo nuestro padre quede para mi y con semejante poder, yo pueda transformarte en humano para que pases el corto tiempo de vida que tiene un humano con ella y bla bla bla— dijo moviendo la mano quitándole importancia 

—en....humano..?

—si, en un humano.......sebastian, tu en serio quieres tanto a esa humana como para estar dispuesto a perder la inmortalidad? — dijo alzando una ceja.

Y llega ese momento, en él que tienes que dejar de pensar en ti mismo, en él que te cuestionas si estarías dispuesto a perder todo, solo por la persona a quien quieres.

____ me ha enseñado mucho en estos últimos meses de haberla conocido. Me ha enseñado, que no todos los humanos son tan hipócritas como creí, que existen personas que te ayudan sin necesidad de recibir algo a cambio. Pero sobre todo ____ me enseño y me demostró ese sentimiento al que yo jamás creí que experimentaría, al que yo creía irreal y ficticio, ese sentimiento llamado amor.

—esta bien, Dimitrius, acepto, pero transformarme en humano

—vaya sebastian, ahora si que te volviste loco, pero bueno, es por ahí que dicen que él amor es ciego.

De un momento a otro la niebla que los envolvía desapareció, y cuando ya pude ver todo con mas claridad, me volteé y vi que ____ me estaba mirando estupefacta, se llevo la mano a la cara tapándose la boca y pude ver varias lágrimas deslizarse por sus mejillas. Me acerque lo mas rápido que pude y atrape su rostro entre mis manos, para limpiarle las lágrimas 

—___ que sucede?, por que lloras?

— tu.....de verdad me amas tanto como para haber renunciado a tu inmortalidad...?, sebastian, eres un humano— dijo con voz temblorosa.

Lo primero que hice al escuchar eso fue mirarme la mano y quitarme él guante, y efectivamente, la marcas del contrato había desaparecido y ya no tenía las unas negras.

—claro que si— Sonreí 

—entremos — me correspondió la sonrisa

Pov _____

Entramos a la mansión y pude ver mucho mejor a sebastian, él había cambiado drásticamente, seguía siendo igual de atractivo (eso si), pero sus ojos, el color de sus ojos ya no era carmesí, ahora era un hermoso azul intenso. Cuando llegamos a la sala, Lucia, Zed y Anibal, estaba sentados en el sofá, Lucia cuando me vio frunció el ceño, seguramente yo tenía los ojos irritados e inyectados de sangre, Zed fijo su vista en sebastian al ver que sus ojos eran azules y ya no traía sus guantes, y en lo que respecta a Anibal.....Pues nada, él en ese momento tenía cara de poker.

Un año después

—me veo bien?

—claro que si, ____ estás preciosa.

Me mire al espejo y una mezcla de emociones apareció en mi pecho, sentía miedo, nervios, pero a la ves, felicidad y emoción.

Lucía se acercó y comenzó a masajear mis hombros

—___, tienes que relajarte

—no puedo, estoy muy nerviosa— dije jugando con mis dedos— y si no viene, y si se arrepintió y si ya no quiere hacer esto??!! 

—____!!!— me dio un zape en la cabeza

—ayyy, Lucía!!— dije sobandome la cabeza— vaya amiga la mía, yo aquí temblando de miedo y tu vienes y me golpeas!

—como buena amiga que soy tengo que hacer que te calmes y conociendote, no existe ninguna otra manera de hacerte entrar en razón — dijo cruzando los brazos