Mamá.

(3)

Recuerdo como una mano se posó en mi hombro y como una curiosa voz me preguntaba algo que yo no entendía.

Al momento de alzar mi mirada me encontré con aquellos chicos que les había visto abrazarse hace unos momentos.

— ¿Estas bien?–Me había preguntado el chico de gafas azules. Pero yo entendía sus palabras. Yo no hablaba su idioma. Mi respuesta fue verle con ojos bien abiertos sin moverme de mi lugar.

En aquel momento sentía el pánico invadirme y no dejarme reaccionar.

Era un niño al que habían pillado en medio del llanto, ¿Que más podían esperar?

Vi como aquel chico le preguntaba a su amigo mientras cosas que, repito, yo no sabía ya que no les entendía. Pude notar su nerviosismo y su amigo solo se limitan a poner su mano en la barbilla y hacer muecas graciosas. Supongo que estaba pensando.

La mujer que les acompañaba se acercó a mí y limpio con su pulgares mis lágrimas mientras me regalaba una sonrisa maternal.

Esa acción por un momento me hiso recordar a mi abuelo.

Vi como ella hacia señalaba su boca la cual abría y cerraba. Yo supuse que ella quería que hablara.

— M-me he perdido. –Musite torpemente. Ella en respuesta curvo sus labios. Por otro lado ambos chicos habían callado mientras me volteaban a ver con una mueca de sorpresa y ojos bien abiertos.

— Al parecer no habla japonés. –

— ¿Qué idioma crees que sea, Yuuri? –

— N-no lo sé, Pichit... –

Escuche como al parecer conversaban, la mujer acaricio mi cabeza y les dijo;

—Este pequeño habla ruso. –

Ambos soltaron un sonoro "¡Ahh!". Yo por mi parte me quede callado. Observe como el de tez morena desbloqueaba su celular y parecía teclear algo. Al poco tiempo me enseño su pantalla.

Se podía apreciar que el había usado el traductor para intentar comunicarse conmigo. El había escrito;

— "¿Puedes entenderlo?" –

Yo asentí con mi cabeza. Observe como ambos chicos se sonreían mutuamente y como la mujer aun acariciaba con ternura mi cabeza. Nuevamente me enseño la pantalla de su celular.

— "¿Porque llorabas?" –

Alcé mis manos pidiendo que me diese el celular. El entendió y me entregó el aparato. Torpemente yo tecle y lo traduje al japonés.

— "Estoy solo." –

Los tres mayores se observaron entre sí con miradas preocupadas.