Las compras de último minuto

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23 de diciembre.

Echando el tiempo un poco atrás. Felix y Terrence salieron a buscar el regalo para Angy, el amor de Terrence.

-¿Y que le gusta a ella? -preguntó Felix.

-Muchas cosas, más la música y el arte -dijo Terrence.

-Entonces busquemos algo relacionado a eso, primero vamos a Art-hur ,el mejor lugar de arte de todo el centro.

-Esta bién.

Felix lo llevó a Art-hur, en donde vieron pinceles de todos los tamaños, todos los colores del mundo y grandes obras a cada esquina. Felix vio a Terrence que no le parecía llamar nada la atención de aquella tienda. Entonces le preguntó a su amigo, Ray Arthur, si podía tomar algunas cosas para dibujar. Felix era muy buen dibujante, ya que él había tomado clases de dibujo y desde pequeño le gustaba el arte. Entonces escribió el nombre de Angy, lo adorno con flores y estaba coloreado con violeta.

-¿Que tal? -le preguntó Felix a Terrence. Él se lo enseño y Terrence vio aquel dibujo. No pareció sorprenderlo.

-Ella no se llama Angy.

-Pero...

-Ella se llama Angelys,

-¿Angelys es tu angel? -dijo Felix riéndose.

-No te rías, te pegaré.

-Que agresivo. Ven, vamos a otro lugar, pero me llevaré la obra.

-Esta bién.

Felix fue a donde su amigo y le dijo Terrence no deseaba nada. Ray no le cobró por en dibujo, ya que Felix era su amigo y además él le había dicho que estaba buscando un regalo para la novia de Terrence, aunque no era así o por lo menos no del todo falso y cierto.

Felix llevó a Terrence a una tienda espacial, ya que hay habían guitarras con las que se podían tocar. Al entrar, Felix y Terrence se tropezaron con cuatro jóvenes que salían de aquella tienda con equipos de astronomía.

-Terrence, bienvenido al G-Planet, la única tienda con guitarras y astronomía en Nogwartons -dijo Felix.

Felix fue a donde su amigo Hugo Jobs, un vendedor y socio de aquel lugar. Felix le explicó la situación. Hugo le dijo a Felix que lo llevaría al área de guitarras sorprendentes. Felix llamó a Terrence para que se acercara. Hugo los llevó al área con las guitarras mas hermosas de todas.

-¿Sabes tocar? -le preguntó Felix a Terrence.

-No -respondió él.

-Debe aprender. Por suerte estas con Felix -dijo Hugo.

-¿Por qué lo dice? -preguntó Terrence.

-Niño, tienes a Felix dedos mágicos frente a tí y preguntas por qué -continuó Hugo -Él me enseñó a tocar rock.

-Que puedo decir, era bueno en eso -dijo Felix.

-Enséñale, Felix -dijo Hugo, tomando una guitarra y conectandola a un amplificador.

Felix tomó la guitarra y sacó una uña de guitarra de su cartera de bolsillo. Puso los dedos en aquellas guitarra. La melodía rockera que salió de aquella guitarra dejó a Terrence con la boca abierta.

-Tienes que enseñarme -dijo Terrence.

Mientras Felix le enseñaba a Terrence las notas musicales en la guitarra, Barry, Nathan, Gasper y Elliot caminaban por todo el centro comercial buscando equipos para astronomía. Ya ellos habían comprado algunas cosas en G-Planet y ahora se dirigían a el apartamento de Elliot, el cual escribía sin parar, pero aún ninguna buena historia.

-Creo que hoy podremos ver el cometa-dijo Nathan.

-Si es que el policía no nos encuentra antes -dijo Barry.

-Pero lo dudo -dijo Gasper.

-No deberían regresar al parque -dijo Elliot.

-No lo haremos -dijo Barry.

-Tenemos un plan y un lugar -dijo Nathan.

-Imposible que nos atrapen o vean -dijo Gasper.

Felix ya le había enseñado a Terrence una pequeña canción, pero aún no tenían un regalo para Angy.

-Entonces, ¿le harás una canción? -le preguntó Felix a Terrence.

-Estas loco, no sé tocar, además, tampoco se cantar.

-¿Que sabes hacer?

-Usar la computadora.

-Todos saben hacer eso.

-No en ese sentido. Soy... Soy un programador.

-¿Eres un nerd?

-Más o menos.

-¿Sabes tocar algo además del teclado de la computadora?

-La batería y un poco el piano.

-Creo que es tarde. Deberíamos regresar.

-¿Mañana nos vemos?

Felix vio a Terrence. Terrence parecía decirlo en serio, aunque Felix estaba extrañado por la pregunta.

-Elisabeth solo me dijo que estuviera contigo hoy -dijo Felix.

-Entiendo.

-Pero, no dijo nada de no poder hablarte más.

Terrence sonrió y ambos fueron a donde Elisabeth.

Mientras tanto, siendo las diez de la noche; Elliot, Gasper, Barry y Nathan estaban en el tejado del centro comercial.

-¿Algo? -preguntaba Barry en voz alta y aburrido.

-Nada -dijo Nathan de igual forma.

Los cuatro chicos estaban completamente aburridos y casi dormidos. Elliot aún seguía escribiendo, pero cada cosa que escribía era desechado.

-Chicos, necesito irme -dijo Elliot, tratando de huir.

-¿Por qué? -preguntó Gasper.

-Deje el pavo en el horno.

-Dile a tu vecino que lo apague -dijo Barry.

-No tengo su número.

-Yo lo tengo -dijo Nathan.

-¿Por qué?

-Tu vecino es genial -dijo Barry.

-Sí, Felix es genial -dijo Gasper.

-¡Ya! Es mentira, solo quería irme -dijo Elliot.

-Que horrible persona -dijo Barry.

-Saben, yo si dejé el pavo en el horno -dijo Nathan -vamos Elliot, saquemos ese pavo antes que se queme -agregó.

-Es cierto, Nathan, yo si dije que lo hicieras -dijo Gasper.

-No puede ser, no quieren quedarse -dijo Barry molesto -pero bueno, tendré que ir con ustedes.

Los cuatro guardaron silencio por unos minutos y después comenzaron a recoger todo para irse.

Un milagro para navidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora