Un nuevo clan de vampiros se crea en Nevada, pero estos no son normales a la hora de elegir y consumir sus presas. Ponen mucha atención en completar su colección humana con lo mejor de lo mejor.
Ciara, una de sus victimas elegidas para la colección...
- Lo se, Teo, se que Ethan es tu amigo, pero estoy preocupada por Ciara -Esmeralda sentó a Paola en una de las sillas de la cocina y fue hacia la nevera para coger algo de comer para la pequeña.
- ¿Y por qué te preocupa tanto? -quiso saber el castaño, entonces apoyado en el marco de la puerta.
La morena le miró con obviedad antes de darse la vuelta para meter en el microondas un vaso de leche para la pequeña.
- ¿Qué? -continuó el castaño elevando esporádicamente los hombros- Ethan la va a cuidar, eso lo tengo muy claro.
- ¿Cómo la va a cuidar si no sabe ni cuidar de si mismo? -le reprochó ella sintiendo las manos de Teo acariciar sus brazos. Le quiso dar un beso en el cuello pero Esmeralda se dio la vuelta incomoda por la seriedad del tema que estaban tratando - hace unos días le dije a Ciara que iba a estar bien con él porque tú me lo dices todo el tiempo y confío en ti, pero cada vez lo dudo más. ¿Crees de verdad que alguien tan perverso puede acabar siendo bueno? ¿Querer a alguien? ¿No hacerle daño?
- Ya hemos hablado muchas veces de esto - Teo bajó los brazos y fue a la nevera a coger los ingredientes para hacerle un sándwich a Paola - Además no sé cómo no te acuerdas de lo que te hizo Bethania... Ella sí que es perversa y no Ethan. Por lo menos él no es así por diversión.
- Gracias por recordarme lo mal que lo pasé... - le recriminó Esmeralda sacando el vaso de leche del microondas. No se acordaba de todo lo que le había hecho la vampiresa porque sufrió tanto que su cerebro olvidó algunas cosas, pero si que recordaba que había sido horroroso.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Comprobó que la leche no estaba tan caliente como para quemar la boca de la niña, le llevo el vaso hasta la mesa donde estaba esperándoles y se sentó a su lado posando una tierna caricia en su cabello.
Teo también se acercó donde estaban ellas con el sándwich ya hecho en un plato. Lo puso delante de Paola y la rodeó para colocarse al lado de la morena.
- Lo siento - se agachó para estar a la altura de Esmeralda y le cogió la mano que un instante antes recogía el pelo de la niña detrás de su oreja - no quería...
- Da igual - Esme apartó la mano y se volvió en la silla de frente a la mesa - cambiando de tema, tenemos que ver cómo ayudamos a María - el vampiro se levantó resignado por la reacción de su humana y se sentó en la silla que había al otro lado de la niña mientras está comía entre los dos - Lo bueno es que va a estar en el hospital y allí le van a cuidar como se merece, pero luego necesitará un espacio donde estar bien con su bebé, además de poder llevar una vida medianamente normal... Benjamín se suponía que salía hoy del hospital, pero Ethan se ha ido antes de firmar los papeles... - le recordó.
- Espera un momento cielo - Teo miró el reloj cortándole la conversación a Esmeralda, y se levantó para ir a bajar las persianas de la casa. Todos los días antes de que saliese el sol los vampiros tenían que estar al cobijo del mismo en un lugar cerrado donde no les alcanzase ni un rayo, sino desaparecerían abrasados, convirtiéndose así en ceniza.
