Querido diario
Los chicos de universidad son demasiado fáciles de engatusar.
Solo basta una mirada tierna y saber que soy menor de edad para enrollarlos en mi dedo índice.
Se nota que las acartonadas de sus compañeras no les dan lo que necesitan y abren sus piernas con dos palabras bonitas.
En cambio, como disfrutan que yo les dé un pico en la puerta y luego la cierre en su cara, es como si les excitara más mi inocencia e incurable pena.
Apuesto a que nunca experimentaron ni experimentaran nunca orgasmos como los que tienen conmigo amarrado a sus camas.
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La HartBreiquer | Divalejo |
Fanfic"Regla numero para ser una rompe corazones: No enamorarse." Erase la historia de cómo la coleccionista de corazones rotos rompió la primera regla.
