Capítulo 1

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ACTUALIDAD (16 de setiembre 2022):

Amanecía de nuevo en la Mansión Wayne y mientras los adolescentes de la casa todavía se encontraban durmiendo para recuperarse de la sesión de entrenamiento grupal de la noche anterior, Damian, el más joven de todos con 12 años, se había puesto a entrenar con la espada en su cuarto. Desde muy pequeño, su abuelo Ra's al Ghul y su madre Talia, lo habían entrenado en la Liga de las Sombras para ser un perfecto asesino, y a pesar de los esfuerzos de su padre, Damian Wayne todavía no había abandonado del todo la idea de que la mejor manera de solucionar un problema era matando a sus enemigos. Por otro lado, Alfred estaba en la cocina preparando el desayuno, mientras Bruce había madrugado como de costumbre para bajar a la Batcueva a actualizar los informes de las misiones de la semana.

La habitación de Damian se encontraba en la tercera planta del ala este, también llamada por Damian la planta de los ROBINS, y era contigua a la habitación de Tim, que a sus 17 años dormía como una marmota, y a la de Dick. Este último se había mudado a Blüdhaven hacía un tiempo y solo venía de visita algunos viernes para pasar el fin de semana en Gotham con sus hermanos adoptivos o para ayudar a Batman. La última habitación del pasillo también había pertenecido a un Robin, pero llevaba casi dos años llena de trastos a medio empaquetar. En la segunda planta y justo debajo de la de Damian, estaba la habitación de Layla. La habitación de Bruce se encontraba también en la segunda planta, pero en el ala oeste de la mansión, cerca de la de Alfred y alejada de las habitaciones de todos los jóvenes.

No eran ni las 7:00h de la mañana cuando de repente Damian golpeó accidentalmente uno de sus trofeos de esgrima contra la pared, provocando así que Titus empezara a ladrar y consiguiendo que Tim casi se cayera de la cama. Eso sirvió de pistoletazo de salida para que se empezara a armar barullo a lo largo y ancho de la Mansión Wayne.

-¡MALDITO MOCOSO! - Gritó Tim abriendo la puerta de Damian de una patada, lo cual solo alteró más a Titus que seguía ladrando - Todas las mañanas la misma historia, ¿tanto te cuesta quedarte dormido y quietecito en la cama hasta que suene la alarma? - Dijo Tim muy molesto, podría haber dormido 30min si no le hubieran despertado.

- ¿Quedarme dormido?... ¡¿Pero como quieres que duerma si roncas como un cerdo?! - Dijo Damian con un tono burlón. - No has parado en toda la noche, dudo que el resto de gente haya podido dormir. Además, con el grito que acabas de pegar ahora fijo que has despertado a Layla, y ya sabes lo que pasa cuando...

-¡No me puedo creer que estéis montando un escándalo otra vez! - Gritó Layla asomándose por la ventana de la habitación y provocando que a los dos chicos les entrara un escalofrío - ¡Hoy sí que os la vais a cargar! - Exclamó Layla antes de echar a correr escaleras arriba con la intención de apalear a sus hermanos. Ella valoraba mucho sus horas de sueño, de hecho lo único que adoraba más en este mundo que dormir, era su gata Isis.

- ¿Os? Perfecto, vuelven a meterme en el mismo saco que a ti. - Dijo Tim suspirando - ¿Se puede saber como piensas calmarla ahora? -

- Lo que pienso es que solo tengo que correr más rápido que tú para que se desahogue contigo primero - Dijo Damian antes de echar a correr para buscar refugio junto a Alfred en la cocina, y no es que Damian le tuviera miedo a su hermana, pero tenía prohibido usar sus tácticas de la Liga de Asesinos con cualquier miembro de la familia, y cuando Layla se enfadaba podía ser algo agresiva. Tim lo siguió con la esperanza de poder esquivar a Layla en las escaleras.

La persecución duró poco rato y acabó con los tres en la cocina: Tim y Damian acorralados en una esquina junto a la nevera y Layla frente a ellos con el rodillo de cocina en mano. Por suerte, en ese momento apareció Alfred para calmar la situación.

- ¡Buenos días a todos! Lamento interrumpir lo que parece ser un intercambio de amor fraternal matutino, pero el desayuno ya está listo... - Dijo Alfred con voz muy calmada y dirigiendo la mirada a Layla mientras estiraba la mano para que le diera el rodillo.-... así que les sugiero que hagan las paces y se retiren al comedor. No querrán llegar tarde al instituo, ¿no? -

Bat Blood: La hija de BatmanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora