Capitulo 19

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Yo fui la primera en despertar. Camila estaba en la misma posición de siempre, casi encima de mí.

Tenía que ser muy cuidadosa al levantarme, para no despertarla. Me dirigí hacia el baño, me eche agua a la cara y me quite el maquillaje. Me cambie de ropa también, ya que no me había quitado la ropa que use para la fiesta, para dormir.

Lo más probable es que Camila se levante con resaca, pensé. Así que le puse una aspirina y un vaso con agua en la mesita de noche. Cuando le despertó salió corriendo hacia el baño. Ella cerró la puerta detrás de ella, pero aun así podía escucharla vomitar.

Pensé por un momento que era lo que iba a hacer y decidí entrar al baño.

Abriendo la puerta lentamente le dije:" ¿Camila, estas bien?"

"Estoy bien", me respondió, "Vete, no quiero que me veas vomitar."

"Eso a mí no me importa", me reí, "¿Necesitas algo? ¿Una aspirina?"

"Si, por favor, me salvaría la vida en este momento."

Busque la aspirina con el vaso de agua. Se los entregue, me senté junto a ella en el suelo de baño y ella se tomó la pastilla y el agua.

Yo ya no podía soportar los pensamientos de lo que pasó la noche anterior.

"¿Te acuerdas de lo que paso anoche?"

Ella lo pensó por un momento.

"La verdad no, lo último que recuerdo fue que estábamos hablando con Dinah y los otros, después de eso todo es negro."

No se acuerda del beso, por un lado me sentía decepcionada, pero por el otro estaba agradecida, porque las cosas no cambiarían entre nosotras y seguiríamos siendo amigas, sin que las cosas se pusieran muy incomodas.

"¿Porque? ¿Algo paso? ¿Hice algo estúpido, verdad? Por favor dime que yo no-"

"No, no te preocupes, no pasó nada. Solo estabas muy borracha y te traje aquí, porque pensé que no sería buena idea que tus padres te vieran así", le dije.

"Gracias a Dios", dijo aliviada, "Gracias, te abrazaría, pero sería asqueroso después de vomitar."

Me reí," Está bien, solo cepíllate los dientes."

Se levantó lentamente, se lavó los dientes con el cepillo que había dejado aquí hace algún tiempo.

Cuando termino, me dijo: "¿Me podrías dar algo para cambiarme?"

"Sí, claro", le dije y le traje unos pantalones deportivos y una sudadera.

A ella no le importo que yo estuviera parada allí, solo se empezó a quitar la ropa, como siempre yo estaba más roja que un tomate y me fui al cuarto.

Me senté en mi cama, arre costándome en la cabecera mientras ella entraba con mi ropa puesta.

Pensé en lo bien que se le veía mi ropa puesta, mientras ella se sentaba junto a mí.

"¿Qué quieres hacer hoy?", le pregunte.

Ella gruño y luego se rio.

"Solo me quiero quedar aquí acostada y no hacer absolutamente nada el resto del día. Me siento horrible."

"¿Quieres acurrucarte?", le pregunte.

"¿Esta Lauren Jauregui, preguntándome si me quiero acurrucar con ella?", jadeo sorprendida. Rodé los ojos, pero también me sorprendí a mí misma, preguntando eso.

Tape (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora