Capítulo 1

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  No puedo creer que ya llegó el día , el día que cambiará mi vida por completo, el día que le dará a mi vida un giro de ciento ochenta grados. Nunca pensé que llegaría este momento, este momento en el que estoy devastada por dejar atrás todo lo que viví; pensé que era un sueño, un sueño que se convirtió en realidad sin yo quererlo.

  Pues sí, aquí estoy, en el aeropuerto internacional de la capital de Venezuela, Caracas. Ni siquiera soy de Caracas, soy de una ciudad llamada Maturín, sí, soy de ahí, y no puedo creer que diga esto, porque siempre odié vivir ahí, pero cómo voy a extrañar esa ciudad.

  Hace unos cuantos meses, mi madre tomó la decisión con mi padre de que ya no podíamos seguir viviendo aquí, y por eso estamos esperando que una señora avise que ya podemos subir al avión.

  Hace unos meses mi madre compró los boletos para ella, para mi hermano y para mi; hay que volar miles y miles de kilómetros para llegar a un país en el que quería vivir de pequeña. Me mudaré a Estados Unidos, pero ahora no quiero. Pero bueno, lo hago por complacer a mis padres, que hacen esto por un mejor futuro para mi hermano y para mi, supongo, o eso es lo que dicen.

  Ahora se preguntaran, claro; cómo es que solo nos vamos mi madre, mi hermano y yo ¿y mi padre, qué? pues eso es otra cosa, mis padres están separados desde que yo era pequeña, pero nunca dejaron de hablarse ni nada de eso, son muy buenos amigos, claro que la razón soy yo, pero me gusta que se lleven bien.

  Mi padre, Robert, desde hace un tiempo vive en España, me gusta que viva ahí, es un país muy bonito; pero aún no lo he podido visitar, él a mi sí , pero yo a él no. Algún día iré, o eso creo. Mi padre vive con su novia, Clara, nos llevamos bien, la conozco desde hace ya mucho y ella hace que mi padre sea feliz y eso es lo importante; ella trabaja como asistente de mi padre en una gran empresa.

  Mi madre, Liz, en cambio, estudió Administración, y eso le gusta mucho, trabajó en muchos bancos, los más importantes de Venezuela; incluso su último puesto de trabajo fue ser gerente de uno muy importante. Ella no tiene pareja, ha salido con algún que otro hombre, pero por los momentos no está en ninguna relación, supongo que algún día conocerá a alguien que la haga feliz. Por los momentos cuida de mi hermano y de mi.

  Mi hermano se llama Evan, es un gran chico, tiene 25 años. Él y yo nos llevamos muy bien, claro nos peleamos como cualquier humano que tenga hermanos, pero del resto nos queremos. Él estudia Ingeniería en Sistemas y Programación, le encanta eso y se quiere dedicar a eso. Tiene una novia, se llama Hazel, ella y yo nos llevamos muy bien, tenemos una relación de hermanas, por así decirlo; me encanta estar con ella. Pero no creo que su relación dure mucho porque todos sabemos que no funcionan las relaciones a distancia.

  Hace ya unas semanas que mi novio, (bueno ahora mi ex novio) Liam, terminó conmigo, por esa misma razón. Él dice que las relaciones a distancia no funcionan, y tiene razón, no digo que no esté de acuerdo con su opinión, pues yo la comparto y pienso que las cosas son así; pero no solo me terminó por eso, también porque está saliendo con otra chica que se llama Eva. Claro que, me estaba engañando. La odio, ella era la mejor amiga de Liam, y él siempre me dijo que no debía de tener celos por ella, que él me amaba a mi, pero era inevitable. Siempre supe que ella quería estar con él, y qué mejor momento que éste para aprovechar y robármelo.

  Y pues... Ya hablé de ellos, pero ¿y yo, qué? Bueno, me llamo Natalie, pero me gusta más Nat, tengo diecisiete años, soy de tez morena, tengo los ojos de un color así como miel, mi pelo es castaño y alisado, tengo pecas (que las suelo cubrir con maquillaje algunas veces porque no me gustan mucho) y soy de estatura media.

  Era una de las mejores no solo de mi clase sino también de todo mi instituto, estuve en el cuadro de honor por varios años. Mis mejores amigos se llaman Lilian, Allyson, Ethan y Scott. Tenía dos gatos, Zeus y Atenea, pero por desgracia se los tuve que dejar a una tía porque no los puedo llevar conmigo. Tengo muchos otros amigos, y conozco a muchísimas personas... Sin embargo, uno de los miedos que más me persigue es que en mi nueva vida no conozca a nadie, ya que soy tímida, introvertida en muchos casos y no soy de demostrar mis sentimientos; pero espero armarme de valor y lograr hacer amigos.

¿Y Por Ti Decidí Quedarme? ♥EN EDICIÓN♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora