Oye, te quiero

Capítulos 7 y 8

-vale, genial, pero... ¿Dónde piensas dormir tu? -y me río.
-te juro que no haré nada, a no ser que me lo pidas...
-descuida que no te pediré nada.
-¿segura?
-que si...
-pues como quieras, yo tampoco haré nada entonces, así que dormiremos juntos, ¿vale? Es que sí duermo en el sueño me va a doler todo mañana.

Está claro que algo les pasa a los actores estos en la cabeza que yo no soy capaz de entender.

Además, ¿qué se cree? Digo, que yo aún soy virgen,... Y muchas de mis amigas aún lo son, excepto Laura y Paula, el resto lo somos. Aunque Patri, por ejemplo tienen un novio que...
¿De verdad pienso que tengo oportunidades con el? Soy idiota. Aunque sería una primera vez genial.

-¿en qué piensas?

Sale del baño donde ha estado poniéndose el pijama y lavándose los dientes, por cierto, le queda genial el pijama. Se sienta a mi lado.

-en nada.
-¿y entonces? Te ha cambiado la cara de repente.
-no es nada.

Nos quedamos mirándonos el uno al otro, pasan dos minutos así, hasta que el se levanta y se dirige al otro lado de la cama:

-me voy a dormir, ¿vale? Buenas noches.
-buenas noches.

En el baño me cambio y me lavó los dientes, y cuando estoy preparada ya para dormir salgo, pongo el móvil a cargar y me echo. Ni si quiera me fijo en sí el está o no dormido, y me duermo más rápido de lo que creía que haría. Mañana será un día largo.

Al día siguiente, a las dos de la tarde.

PIP.

Ambos estábamos dormidos, hasta entonces. Me incorporo y miro mi móvil. Me asombro al ver la hora y todo lo que hemos dormido.

-lo siento, me han enviado un mensaje.
-no pasa nada, ya es tarde.

Pero no le contesto. Porque no entiendo el mensaje. No entiendo porque me hacen esto a mi. Y tengo ganas de llorar. Pero no allí.

-lo siento. -y me meto en el baño, del que cierro la puerta con un portazo.

Llevó llorando en el baño ya 20 minutos, y hasta me han entrado ganas de vomitar. Además de lejos se oyen sus preguntas: "Silvia por favor dime que te pasa".

Después de un rato decido abrirle.

Y estamos allí, a la puerta del baño el uno frente al otro. Yo con la cara roja de haber estado llorando y el con cara de no tener ni idea de que es lo que tiene que hacer. Pero si que sabe perfectamente lo que tiene que hacer.

Me abraza. Y yo le abrazo a el también, y lo hago sin querer, pero vuelvo a llorar.

Cuando consigo tranquilizarme:

-dijiste que me lo habías contado todo sobre ti.

Me deshago de su abrazo.

-te conté lo que se le suele contar a un desconocido.

Y me siento en la cama y el sienta a mi lado:

-pero ahora ya no soy un desconocido.

No respondo, sólo le miro. "¿De verdad quiere saberlo? " me pregunto. Y como sí leyera mi mente.

-aunque no lo creas realmente me interesa.

Vale, me ha convencido.

-Es sobre un chico, se llama Lucas. El fue el primer novio al que de verdad quise... Y llevábamos saliendo hasta hace dos semanas.
Le deje antes de ir a Inglaterra porque estaba muy raro... Y entonces mucha gente comenzó a decirme que el me había puesto los cuernos, y yo no me lo creía pero...mira las fotos que me ha enviado hoy.

Cuando las ve se queda flipando. Me entran ganas de llorar otra vez. Me sentía engañada. No sólo por el, si no por una de mis mejores amigas. Los últimos cinco meses con el habían sido una mentira y lo peor de todo es que mi amiga Paula, ya no era virgen desde que había estado con el.

Le termine de explicar esto a Rob, entre más lagrimas.

-yo aún le quería.
-el no te merece.

Y le miro.
-ella tampoco te merecía a ti.

Los dos sonreímos. Que me pongan los cuernos a mi lo entiendo, pero ¿a el? El es muy guapo.

-lo mejor es que no pienses en eso, te lo digo yo.
-gracias. -le abrazo.

No le conozco desde hace mucho tiempo, pero el me da confianza.
No parece como los chicos de mi edad, parece más buena persona... Aunque mejor no fiarse de nada ni de nadie por ahora...

Capítulo 8- narra Rob.

Se ha dormido a su lado hace una hora y no quiere moverse para no despertarla. El también ha pasado por todo eso, y cuando te pasa no quieres hablar con nadie... Aunque en el fondo eso sea lo mejor, desahogarse.

No me creo que le haya enviado esas fotos. Además, me siento culpable porque probablemente ese chico de las haya enviado al ver la suya conmigo en las portadas de las revistas. Todo por culpa de ese beso sin sentido. Ni si quiera la conocía bien...
Pero ahora mismo siento como sí la conociese desde hace mucho tiempo.

Igualmente, es solamente eso, ella no me gusta... Y a ella tampoco le gusto. Lo más probable es que le siga gustando ese Lucas que en mi opinión no la merece mi a ella ni a ninguna.

Después de lo que yo he vivido, no me atrevería a ponerle los cuernos a ninguna chica. Aunque tampoco a habido ninguna después de ella.

Se llama Kristen. Es una actriz muy guapa y famosa y nos conocimos en el rodaje de las películas de crepúsculo y fue entonces cuando empezamos a salir. Creí que nos queríamos, y aunque ella siga enviándome mensajes no creo que eso fuera así. Si no no hubiera hecho lo que hizo...

Por eso paso de contestarle a todo lo que me envía, porque no la creo. Y desde entonces me cuesta creer a cualquiera...

La miro. Aún tiene la cara roja de llorar. Pero he conseguido tranquilizarla bastante. Y eso mola, lo mejor ahora es que de olvide de toda esa mierda...

<<y se vuelve a dormir. Y allí permanecen los dos juntos unas horas más. En una habitación de un hotel de Madrid. >>