Secretos con Plumas

Capítulo 18

Narra Angela:

Charlie estaba bien, Josh la había ayudado a levantarse pero ahora estaba confundida. Josh por otra parte también pero algo confundido. ¿Quién no lo estaría? Hasta yo lo estoy, supuestamente esto no tenía que ocurrir. Aunque había que admitirlo, me sentía...bien. El dolor del tobillo había pasado a penas mis alas a parecieron. Me sentía libre, por un instante cerré mis ojos y sentí aquello que ahora formaba parte de mi, mis alas. NO podía dejarme llevar, estaba Charlie presente y mis alas tendrían que desaparecer. Sin entender como estas me obedecieron y se ocultaron en mi espalda, la mire directo a los ojos y desvié un poco mis ojos hacia Josh.

-Tenemos que hablar.

-Primero que nada futura señora madre de mis sobrinos, gracias por salvarme y segundo ¡CUANDO ME LO IBAS A DECIR JOVENCITA!- levante la mano en señal de querer hablar y ella asintió.

-¡Te lo iba a decir! Por algo te llame y por lo otro...vení sentémonos.- cuando pase por al lado de ella le susurre "después hablamos del lo otro", nos sentamos y antes de empezar a hablar vi a Josh parado.

-¿Josh?

-¿Mhh?

-Vení a sentarte.

-Ahh si.- camino y sentó en frente nuestro.

-Ahora si- Charlie giro la cabeza de tal manera hacia mi que pensé que se podría romper el cuello.- ¿Qué sos?

-Si, eso. Antes de decirte, te soy sincera, estoy impactada por que no te pusiste como loca. Y bueno eso es una historia larga ya que soy un ángel que literalmente esta endemoniada ya que hay un demonio dentro mio y que para el colmo se supone que estas dos alas de pollo ni tendrían que haber salido, y ahora estoy hablando y hablando por que no puedo parar, ok paro.- lleve una uña hacia mi boca pero Charlie me dio un golpe en la mano para que no hiciera eso.

-¡Hey! Estoy acá, a parte no estamos endemoniados somos demonios.

-¡Josh!- Charlie estaba con la boca y ojos abiertos, como si fuera un nene llegando a Disney.

-¿Qué?

-¿Cómo que qué? No te das cuenta que es mucha información para un sólo día.

-Bueno, che. Tampoco la amenace, solo le di una breve descripción de lo que soy y de lo que puede encontrarse en el mundo ahora.- me guiño un ojo y puse los ojos en blanco.

-¡Ahhh!- Charlie pegó un grito que de seguro me dejo sorda pero después de lo que escuche corrobore que no- ¿ Eso quiere decir que sos un ángel caído?¿Y conoces a Sam y a Dean? ¡Haaay! Ya los shipeo, un ángel y un demonio. Che, pero¿No está prohibido que ustedes...ya saben?

-¿Ángel caído? Emm¿Qué?-Charlie iba a hablar pero Josh siguió- Y no se quienes son ellos y con respecto a nosotros- me miro y me quede quieta esperando su respuesta.- supongo que no somos los primero ni los últimos, así como también en cualquier momento ella podría decir que si se puede y se hace, todo depende de ella.-¡Dios esa sonrisa!

-Angela¿Qué te pasa por la cabeza?¿Y como es eso de que si ella hace se puede?-Antes de que Josh hablara me adelante y lo deje con las palabras en la boca.

-Lo que me pasa por la cabeza es Leah,-levante una mano en señal de que me deje terminar- tiene nombre y me tiene en una balanza sin fin. Leah es otra historia que si querés te la puedo contar.- ella asintió y empecé con mi relato. Ya no importaba si Josh escuchaba aquello, necesitaba hablar.- Todo comenzó desde mis 9 años, casi por esa edad. Yo siempre sentía la presencia de alguien, unos ojos casi naranjas y alguien que dormía junto a mi. Siempre fueron esos sueños raros, esos que...-Charlie hablo un momento entendiendo la situación.