Tiempos de oro (capítulo 2)

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Era de esperarse que el hermano de Erin y el mío nos descubrieran, incluso nos decían -¿Pueden darse un beso? Les tomaré una foto-. Y al no saber que eso era incómodo los dejamos, hasta la fecha tienen esas fotos. No sé qué pasaba por la cabeza de nuestros padres, pues era tanta la amistad que no nos decían nada.
Pero al cabo de unos cuantos años, fuimos separándonos cada vez más, y ese amor inocente que nos teníamos, ya no existía.

Al entrar a los 5 años al kinder conocí a la primer mujer que me gustó, esa niña era de una linda sonrisa, con un cabello pequeño y ondulado, negro y brillante, tenía oyuelos muy hermosos y una cara de ternurita, no lo he olvidado, tenía una sonrisa angelical que nunca dejaba de verse en su bello rostro. El nombre de esa niña es Estefanía. Desde aquel entonces sentí algo profundo en mi estómago que estaba presente cada que estaba con ella. Y al tener esa sensación, no podía dejar de estar con ella, no estoy seguro si ella sentía algo por mi, nunca probablemente lo sabré, pero si sé que nunca ha dejado de gustar.

Al poco tiempo nos hicimos grandes amigos, y su mamá y la mía comenzaron a llevarse bien. Como el kinder estaba cerca de la casa de Estefanía, a veces pasábamos mi mamá y yo a acompañarlas, y otras veces pasábamos por unas ricas aguas, y en ocasiones ibamos a desayunar unas ricas gorditas enfrente de mi escuela la tan especial para mi "Francisco Gabilondo Soler".

Algo que siempre me resultaba estresante, era que en cada bailable de la escuela en vez de tocarme bailar con Estefanía me tocaba bailar con una niña llamada Ilasha, y por más que quería bailar con Estefanía siempre me tocaba con Ilasha, y a Estefanía , curiosamente le tocaba con mi mejor amigo en ese entonces, llamado Fernando, un niño güerito y gordito pero muy amable. Me parecía muy frustrante que me correspondiera baliar con Ilasha, pero también algo difícil, pues siempre veía sus ojos algo morados, al igual que los de su hermano menor, quien por cierto era muy problemático. Muchas veces tenía problemas y en más de una ocasión estuvieron a punto de expulsarlo de la escuela, lo que claramente no sucedió, pues mi mamá tenía cierto peso e influencia con las maestras de mi kinder, pero su indisciplina se debía a problemas en su casa, su papá constantemente llegaba a pelear con su familia, y no era algo muy bonito, tuvieron muchos problemas, pero a final de cuentas esas eran cosas que en ese entonces y a esa edad ellos no comprendían bien, y mucho menos yo.

Poco a poco nos acercábamos a la graduación y yo sabía que mis bonitas experiencias con mis amigos del kinder se iban a terminar pronto, lloré algunas veces con mis maestras, quienes ya se habían encariñado conmigo, así como con mis amigos. En los últimos meses, Estefanía cumplió años, y le festejaron en Burguer King, fue una fiesta que estuve esperando durante mucho tiempo, ese día nos divertimos mucho, y me daba algo de nervios el estar con Estefanía y que nos vieran su hermana mayor y su mamá, pero éramos niños, no habría problema. Así también antes de eso, me festejaron en mi escuela mi cumpleaños, me llevaron un pastelito, me regalaron un balón de Fut, y mis maestras me regalaron una piñata y dos gorras, una de Bob el constructor y otra de los 4 fantásticos, en ese entonces amaba las gorras y las usaba mucho además de tener gustos algo diferentes para mi corta edad, pues amaba la música de Eminem y 50th Cent
Tengo hasta la fecha una foto con mis grandes amigas del Kinder, Estefanía, Ilasha, y una niña que quería conmigo llamada Sarahí, ese se convirtió en un super cumpleaños inolvidable para mi.

Y Todos Se VanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora