Nuestra casa

Convivencia

Hasta ahora me falta pintar las paredes y conseguir muebles, unos pocos, pues no pienso invitar a nadie, de mas a Brenda, pero dudo que venga.Pensando en que color pintar y que muebles comprar, recuerdo el sillón y la mesa del ático, ¿Si lo traigo abajo? Subiré a pensar en que hacer o no hacer, lo mismos pensamientos que tuve la primera vez que subí rondaban en mi,pero ahora se que no hay nada de eso estoy más tranquiloo.La lámpara de mesa sigue prendida, porque aun que es de día, no entra luz de afuera, gracias a que los muros estan tapados por cajas, no niego que tengo curiosidad por saber que hay en ellas, pero tanta es la curiosidad como el miedo de saber que puede estar dentro de cada una de ellas y sin contar eso, el trabajo de sacar todo y acomodarlo.Una flojera que me llena con tan solo de pensarlo.

Camino hasta el sillón y me siento en el mismo lugar del otro día, heche mi cabeza para atrás en son de dormir, pues era muy cómodo y yo durmiendo en el suelo tan sólo con una almohada formada de una maleta y mucha ropa.¿Porque no duermo aquí arriba por lo mientras? Miedo y paranoia, que invaden mi cuerpo con solo recordar esos momentos, que por más que trato de olvidar, se me olvida olvidarlos.

Después de un rato de pensar y pensar y pensar, caigo dormido, pero no pasa mucho tiempo para sentir algo ya conocido, otra vez un abrazo frío es el responsable de despertarme, busco a la responsable de esto, que desde el otro día no a querido aparecer, ¿Será que se enojo? O simplemente se fue, sería muy buena noticia su partir, yo estaría tranquilo y descansaría mejor, pero todavía la siento, siento su mirada, su presencia y la sentí hace un momento.Sigue aquí, no se irá de aquí, hasta que consiga algo o eso he de suponer, porque no tengo experiencia alguna en estos casos, siempre creí que se trataba de mentiras, malas actuaciones y un mal diálogo, pero ya no me parece igual, todo o algunas cosas las veo de manera diferente.

Escucho que tocan la puerta, creo que es Emma, esa chica no entiende que no me agrada, pero bajo a abrir.

- ¿Otra vez tu?- dije extrañado

- Si, hola- me entrego unas bolsas- pense que tendrías hambre y como no conoces mucho, te traje algo rico- sonríe- espero te guste

- Ok, bien gracias, si tengo hambre- tome las bolsas y empuje la puerta-adiós

-Espera- detuvo la puerta-¿puedo comer contigo? Es mucha comida

- Ah, pasa, todavía no tengo muebles, comerémos en el piso

Entra y cerro la puerta tras ella,se queda viendo los grafittis de las paredes, se sienta recargada en un grafitti rojo y morado que da directo a la pared blanca, se le quedo viendo tratando de saber que decía, dio un pequeño ademán con la mano y empezó a comer, dejando el tema de lado.

- ¿Sabes que dice?- me preguntó con comida en boca

- Si- le cerré la boca- no hables así, es asqueroso

- Bueno- tragó la comida- ¿Me dirás que dice o tendre que googlearlo?

- Dice "no habitar", es inglés básico

- Pues no importa que nivel de inglés sea, nunca lo he estudiado

- ¿Como? - interrumpí- ¿Nunca has estudiado uno de los idiomas más importantes?- dije en son de burla-

- No, nunca y no por no poder, simplemente no he querido aprenderlo

-Menos mal, me temía que no lo enseñarán en las escuelas de aquí

- ¿Te inscribirás a alguna?- me dijo curiosa

- No, deje de estudiar hace unos años, ahora solo trabajo y para mantener este lugar necesito un buen pago

- Divagas mucho ¿No lo crees?

No dije nada más, hasta que termino su comida y prácticamente la corrí, no me desagrado la comida, me desagrada ella.Terminó lo poco de comida que todavía tenía.Al terminar leo un libro para un ensayo que estoy escribiendo, se lo debo a un profeso. - Creo que Emma tiene razón, divago mucho, soy así desde que hablo, pues digo algo y recuerdo algo más- me digo a mi en voz alta

- No me parece- dice a mi espalda- solo creo que no te concentras

- ¿Escuchaste todo?- pregunto sin confianza

- Si, pues no tengo mejores cosas que oír- dice y siento mucho frío en mi cintura- ¿te da frío cuando te toco?

- Si, mucho- respondo con calosfrios y un grito en boca, estoy loco, ya no enloqueciendo ya estoy loco, hablo con alguien inexistente, dejo de sentir frío y escucho una risa subir las escaleras, desido seguirla.Término en el ático, la lámpara no se a apagado, creía que causaría un corto o algo así.

- Decidiste seguirme- dijo muy sorprendida

- Si, pues no tengo mejores cosas que seguir- hago un gestó que uso de sonrisa- y ¿Porque en el ático?

- Pues quiero que me veas bien, no como el otro día- se cierra la puerta a mis espaldas- solo no temas

- No temeré, pero el otro día te vi bien ¿No?

- No, bien no, te di una idea de mi, pero no me  deje ver bien

- Y otra vez pregunto ¿Porque en el ático?

-Es oscuro, limpio y cómodo ¿No lo crees?- se rió un poco- Aparté, dormía aquí y eso me trae muy buenos recuerdos

- ¿Tu dormías aquí?- interrumpí bruscamente- Osea ¿antes era un cuarto?

- Si, pero-soltó una risa- ya es tarde, se pasa rápido el tiempo ¿No lo crees?

- Si me mostraras algo haslo ahora- dije, con tono duro.

Se apago la luz y cuando se iluminó el cuarto otra vez.

La vi, ahí estaba, sentada en el sillón.