My Angel Fallen (Jerrie)

SIETE

Jade

Estaba perpleja frente a la mujer que se encontraba en el callejón conmigo. Era Perrie. Mi Perrie. Era ella. Y me había visto.
No pensé en la alegría que sentía de estar con ella. De que me viera. Solo sentía miedo; por ella, por Austin.

-Decime algo, Jade.- Exigió.- ¿Qué haces acá? ¿Cómo viniste? ¿Por qué volviste? ¿Dónde estuviste todo este tiempo? ¿Por qué n...

-¡Perrie!- Grité alterada. Ella me miró asustada.- Linda, lo siento, no quería gritarte. Tengo un torbellino de cosas en la cabeza, no podemos hablar así, hay que hacerlo tranquilas. Por favor.

-Necesito respuestas Jade, las necesito.

-Lo sé y te las voy a dar. Ven, sentemonos en estas piedras.- Ofreci giándola a un rincón del callejón.- Te escucho, escucho tus preguntas.

-Estabas muerta- Aseguró- y ahora estás acá. ¿Cómo pasó?

-El cielo es muy hermoso, ¿sabes?- Hice una pausa esperando preguntas de su parte, como no las hubo seguí.- Es cierto eso de que hay vida allí y pude encontrarme con papá.

-¿Tu papá?

-Sí. ¿Y sabes a quién más vi? A Jonnie y a Debbie, papá me los presentó.- Su boca se abrió y lágrimas empezaron a salir de sus ojos.

-¿Ellos están bien?

-Mejor que nosotros acá, aunque no lo creas.

-¿Realmente se vive mejor que acá?

-Es que Pezz, aunque no lo creas, la vida allí es tan linda que nadie quiere volver de la muerte. Pero todos, tarde o temprano, queremos ir para allí.

-Y vos, ¿por qué estás acá?

-Lo mío es diferente; papá me contó una vez que, por más hermoso que allí sea, las personas tienen que tener mucha fuerza de voluntad para aguantar la distancia de quienes aman. A él le costó mucho, pero al final pudo lograrlo. Yo soy más débil, estar lejos tuyo era imposible, no lo conseguía. Pasé noches enteras sufriendo, no aguantaba saber de vos a la distancia. Entonces pasó, me tomó cinco largos años la decisión, pero necesitaba verte de nuevo; a vos, a Austin, a mamá, a todos. Y bajé.

-¿Para siempre?

-Aprovechemos el momento.- Dije con una sonrisa la cual fue correspondida.

Un silencio nos rodeó unos minutos. No era incómodo, más bien es como si nos hubiéramos cayado para dejar a lo otra escuchar nuestro corazón. Para que ambas podamos demostrar que, a pesar de haber pasado cinco años, nuestros corazones latían igual cuando estábamos juntas.

-Vas a casarte.- Dije luego de unos minutos.- Eso es bueno.

-No acepté la propuesta de Lauren aún.

-¿La amas?- No quería escuchar la respuesta realmente, pero me servía para asimilar todo. Para poder hacerme entender a mi misma que Perrie tenía que volver a ser feliz de una vez por todas. De que yo ya no estaba en su vida como antes. De que alguien más estaba en su corazón. De que alguien más amaba a Perrie, y ese alguien no era yo.

-Lauren es una gran chica, ¿sabes? La quiero mucho, pero hace muy poco estamos saliendo. Todavía no siento que la amo, y nunca voy a amarla como a vos.

-Ella está muy enamorada.

-Lo sé.- Hizo una pausa y respiró.- Yo tendría que ir volviendo, le dije a Lauren que iba por el celular, no quiero que se preocupe. Además extraño un poco a Austin.

-Puedo acompañarte- Me ofrecí-, nadie puede verme.

-¿Entonces sos como los fantasmas? ¿Atravesas paredes y esas cosas?- Preguntó con entusiasmo y no pude evitar reir ante su inocencia.

-No Pezz, no atravieso las cosas, solo que no pueden verme.

-Entonces podrías vivir en casa, total nadie va a verte. Así podemos estar más cerca.

-Mi familia si puede verme, Austin puede verme.- Agaché mi cabeza un tanto decepcionada de la situación.- Me hubiera encantado vivir juntas de nuevo.

-No importa, vamos a vernos todos los días. Lo prometo.- Perrie dejó un corto beso en mis labios y se paró, seguido de eso me tironeó del brazo para que la siga y juntas empezamos a caminar para su hogar.

-Hasta acá puedo ir.- Dije cuando llegamos a la esquina de la casa.

-Lo entiendo.- Miró para todos lados asegurándose que no haya gente y, cuando vio que estaba la calle deshabitada, rodeó mi cuello con sus brazos y besó mis labios nuevamente.- Extrañaba tus besos y el sabor de tus labios.- Confesó.

-Yo extrañaba todo de vos.- La pegué más a mi y volví a besarla.- Te amo Perrie.

-Te amo Jade.

Y dichas sus últimas palabras la vi perderse en la vereda hasta llegar a la puerta de su casa.
Giré y emprendí mi viaje de vuelta al lugar donde vivía. No sabía realmente cuáles eran mis sentimientos en este momento, digo, sabía que pronto me iría nuevamente, pero solo quería estar feliz de estar con Perrie nuevamente.
Y eso fue lo que hice, con una sonrisa en mi rostro, me aseguré que -a pesar de la distancia- seguía locamente enamorada de ella.

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Realmente estoy enamorada de este par...
¡Nuevo capítulo! Aunque creo que quedó un poco corto a comparación de los otros :( Y lamento haber demorado más en subirlo, pero estuve un poco complicada para escribir, editar y subir; digamos que no fue fácil...
Pero espero les guste tanto como los otros. Pronto se vendrán muchas más cosas.

P.d: ¡Feliz comienzo del 2017! Espero sea un gran año para todos.

P.d2: Es el primer capítulo del año y algo me dice que el 2017 será el año de esta historia. Ojalá así sea.

Gracias por el apoyo, les envío corazoncitos de amor virtuales♡♡♡

Xoxo...