Sexo & Amor

Capitulo 19/ Reencuentro

Llegué a Starbucks y pedí un café descafeinado sin azúcar y bien cargado mientras esperaba a Ángela, está sería mi despedida con ella aunque necesitaré su ayuda para visitar a Belén.

Cuando llega me cuenta cómo le ah ido así que le pregunto también por Belén y me cuenta que tuvo algunas peleas o mejor dicho discusiones con su esposo por los regalos que les hice ya que ella quería verme a la cara y yo no lo hice, el para calmarla le dijo que yo lo había dicho que era en forma de disculpa por haber desaparecido como lo hice, por lo que terminó aceptando pero aún así quiere verme a la cara. Después de un rato Ángela tomó un frapuchino y comenzo a preguntarme a mi.

- Oye chica me sorprende que estés viva, cuando me llamaste creí que era una alusinacion o algo así.

- Pues no, aquí estoy

- Que fue lo que pasó?

- Recuerdas el problema que tenía con mi familia por aquel asunto? - asintió con la cabeza mientras tomaba un sorbo de su bebida - bueno, al fin decidí enfrentarme a ellos.

- Algo debió suceder, porque traes muletas y una venda con sangre? - Rayos! Vi mi pierna y efectivamente la venda estaba con un enorme parche de sangre, creo que cuando me bajé del taxi se abrió un poco.

- Bueno, la madre del niño me disparó en una pierna y luego escapé con Fyrim, ahora estoy en su casa esperando el momento adecuado para irme a mi hogar.

- Bueno, escuché de que en realidad te había disparado en el pecho y habías muerto allí.

- Seguro fue una de sus ideas para hacer creer a todo el mundo que había muerto, mejor, todo aquella que para mí alguna vez fue conocido ya no lo será, cambiaré mi apariencia y mi nombre además de mi residencia, no volveré acá jamás siendo quien era. Esta es mi despedida Ángela e allí la razón por la cual te llamé - su cara de asombro no me sorprende sabía que iba a suceder - pero necesito ayuda para llegar a Belén hablaré con ella y después de eso será mi adiós.

La chica asiente y hablamos sobre el tema, nos ponemos de acuerdo y en pocos días la volveré a ver, arreglaré lo que hice.

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Tuve que cambiar la venda y poner nuevos puntos, gracias a Dios el Dr. Hakins, el padre de Fyrim estaba en casa.

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Últimamente han sucedido tantas cosas que no sé cómo sigo en pie, tengo que terminar con todo y buscar el momento perfecto para volver a casa.

- En que piensas? - las manos heladas de Fyrim me sobresaltan, las puso en mi cintura que estaba descubierta debido a que llevo un top negro, los short no son muy altos - te veo hace como 37 minutos con una copa de vino y una botella que a cada rato vacías, algo pasa - mordisquea mi oreja y sus manos van desendiendo por mi abdomen metiéndose entre mis shorts y mis bragas.

- Solo hacía un resumen de todo lo acontecido en estos últimos dos meses me parece que es tanto y a la vez tan poco, extraño a mis hijos, extraño a Joel, necesito a Connor y Nicolás me debe de estar odiando, de Jorge no sé qué ah pasado y los guardias me han informado que siguen buscándome, solo quiero mandar aquel vídeo donde acusa a todas esas zorras que quieren matarme para que me dejen en paz pero son mi familia y no puedo hacerles eso! - tomo todo lo qu queda en la copa y comienzo a sentir los efectos, aún sin darle mucha importancia vuelvo a llenarla, las caricias de Fyrim se detienen al escuchar lo que digo y solo está atento así que continuo - Sabes que? Se los mandaré a ellas como una advertencia, son dos meses y no me han dejado en paz! Dile a Henry, el jefe de la operación, que mandé el vídeo a ellas como una amenaza y que les da solamente 1 día para que dejen de buscarme.

- Nena, nena, espera estas hablando con rabia, controlate y piensa bien lo que estás diciendo, ahora - sus manos comienzan a hacer un viaje por mi intimidad buscando mi centro y masajeandolo - déjame, que yo te relajo, solo déjate llevar .

Me dió vuelta y estampó sus labios sobre los míos, apretó mis glúteos contra su cuerpo y puedo sentir como ese gran amigo le dice a mi amiga que si está lista, ella le responde que está bien húmeda y mis manos reaccionan ante tal respuesta. Desabrocho el pantalón que trae dejándolo caer, la camisa terminó de abrirla y se la quito, el baja el cierre de mi top y mis senos quedan en contacto con su tonificado torso, mis shorts salen de mi cuerpo rosando la herida ya sanada en mi pierna, mis manos van directo a sus boxers donde acaricio al amiguito, nuestras bocas se separan y me ve con diversión y picardía en sus ojos, me alza y me pone sobre la cama, se coloca sobre mi. No me doy cuenta del momento en que sus boxers y mis bragas ya no existen, solo siento el delicioso rose de su pene con mi vagina, toca mis senos y mordisquea mis pezones gimo al sentir como una de sus manos baja hasta mi vagina buscando mi clítoris y haciéndolo sentir un mar de éxtasis, mis manos apretan su trasero y luego suben rasguñando su espalda. Un dedo, dos dedos entran y gimo, cada vez es más rápido y siento que mi orgasmo llega pero el los saca y me hace gruñir, atrapo su pene con mis manos y me coloco con mi rostro hacia su pene y mi vagina en su cara haciendo un perfecto 69, primero pruebo con las manos haciendo movimientos de arriba a bajo, luego lo introduzco en mi boca y lo chupo y lo relamo, el gime. Su boca hace un excelente trabajo con mi vagina su lengua es viperina y logra lo que quiere mis fluidos en un santiamén.

Me gira y sin dejarme respirar se introduce en mi, haciéndome gemir fuerte, no es suave, no es cariñoso, es cuidadoso pero salvaje, logra que rápidamente llegue y poco después llega él. Sus labios atrapan lo míos nuevamente, el alcohol que había tomado amenaza con hacerme dormir, quedo en un profundo sueño deseando ser una vez más su mujer.