Hacía mucho tiempo que ella no entraba de forma tan furtiva en su propia casa. Ni siquiera cuando traía escondido entre sus pertenencias esos doujinshis de yaoi hard que tanto la hypeaban. Caminando de puntitas por la sala, trató de no encontrarse con su madre, aunque ésta ya se había percatado de su presencia y el afectivo saludo que provino desde la cocina sobresaltó a la chica por breves instantes, relajándose tan pronto notó que no había volteado a verle. Subió rápidamente las escaleras y creyó pronto estar a salvo en la privacidad de su habitación, hasta que Takurou apareció como invocado en medio del pasadizo. Su hermano siempre tenía esa mala costumbre de pillarla en los momentos más embarazosos y/o inoportunos de su existencia. Pero, ¡POR KAMI! ¡¿Por qué justamente ahora?!
- Hey, Kae. Saliste muy deprisa hoy...y vuelves con una actitud muy sospechosa... Mi experiencia me dicta que eso no puede ser bueno. - juzgó con una certeza que por instantes le heló la sangre a su hermana menor, hasta que el calor volvió a reverberar en sus mejillas carmesí.
Aferrándose más al paquete que traía consigo, consideró que este era el momento que tanto había estado esperando: debía activar el modo chantaje, algo que solo reservaba para casos extremos.
Levantando un dedo acusador, aunque visiblemente tímido por el temblor de su mano, comenzó a tartamudear palabras incongruentes, luchando contra su nerviosismo para hilar un argumento que desarmara por completo el ataque de su hermano mayor. Ella en efecto sabía qué decir, pero no cómo.
- No-No...¡NO ES JUSTO! -
- ¿Eh? -
Fue lo primero que él pudo entender y aun así no sabía a qué se estaba refiriendo su loca hermana. La vio enrojecer al punto de creer que se desmayaría en cualquier instante.
Mas ella prosiguió, su dedo acusador aun apuntándole con vehemencia.
- Hermano, siempre me has juzgado duramente por los gustos que tengo, ¿te parece raro que me guste el romance entre dos hombres, ¿no? Pues ahora es mi turno de juzgarte ¡¿Qué tan degenerado debo de considerar a mi hermano si tiene una colección de "romance entre mujeres" escondido en su ropero, debajo de su cama y en su computadora?! -
La expresión de incredulidad de su hermano era invaluable para Kae. Intentó preguntar cómo lo sabía, pero ahora era su turno de balbucear.
¡¿cómo era posible que Kae haya invadido de esa forma su privacidad?! Esa era definitivamente su venganza por todos esos años de haber invadido y perturbado su pequeño mundo feliz.
- ¡E-ESO ES DIFERENTE! - contestó defensivamente tan pronto recuperó el aliento perdido.
- ¿POR QUÉ DEBERÍA SER DIFERENTE? -
- Eso es cosa normal para los hombres. -
- Ahh, entonces ¿Si hay dos mujeres besándose es "normal" pero si hay dos hombres besándose es "raro"? -
- ¡Tendrías que ser hombre para entenderlo! -
- ¡Y tú tendrías que ser mujer para entenderme! -
- ¡Incluso entre las mujeres tus gustos son desviados! -
- ¡Pero tus gustos son muy comunes porque en el fondo eres un machista! -
- No me culpes a mí, Kae. La sociedad lo dice: eres fujoshi y una deshonra. Y yo soy un machista y a mucha honra. :v
Aquellas horribles palabras eran de alguna forma ciertas. No podría argumentar en contra de esa afirmación que cargaba tanto prejuicio. La sociedad era así de cruel con los de su tipo: otaku y fujoshi. Antes de darse por vencida, recordó que no necesitaba tener la razón en esta discusión: el objetivo era presionar con chantaje hasta llegar a un acuerdo.
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100% SEME~!
FanfictionEn su primer aniversario como novios, Kae quiere regalarle a Asuma la posibilidad de ser más "activa" en su relación, superando sus cohibiciones del amor en 3D. Historia algo floja al inicio, lime al medio y lemon al final. Watashi Ga Motete Dousun...