Historia 1:Fran y Arancha. Parte 1
Fran llama a la puerta de la casa de Arancha con las manos sudorosas y algo temblorosas. Han quedado para intentar por primera vez, hacer el amor. Llevan cinco meses de relación y ya toca. Los padres de Arancha se han ido a pasar el fin de semana a una casa rural y Fran ha puesto como escusa que se va todo el día a echar un partido de fútbol con los amigos.
Arancha abre la puerta. Es una belleza para el poca cosa de Fran,pero así es él amor. Arancha va vestida de gala. Lleva maquillaje, perfume y se ha alisado su pelo de color moreno. Los ojos, color miel, hace reflejar la luz que desprende el portal al abrir la puerta de su casa. Fran está embobado en las curvas de arancha. Va con falda blanca, medias y tacones. Los labios pintados de rojo y una blusa blanca, al igual que la falda, que deja trasparentar la fina prenda que lleva por dentro. Un sujetador apretado que realza sus femeninos pechos que son la mar de asequibles. Ella, que ve con cara de tonto a Fran, tira de la camisa azul marino que lleva puesta, le acaricia el cabello y le despeina rápidamente su pelo rubio . Ella le mete las manos en los bolsillos de la parte de atrás de los vaqueros de él. El calzado, a Fran, le molesta, son unos náuticos que está estrenando,pero no importa, el espectáculo que está viviendo eclipsa la molestia. Comienzan a besarse con ganas, pues llevan tres días sin verse y eso para dos chicos de dieciséis años es todo una eternidad y este momento lo llevan esperando por mucho tiempo. El aliento de él se estampa contra el cuello de ella, que enseguida se acalora y comienza a caminar entre besos y lametones mutuos como dos patos mareados. De pronto, Fran echa a la bella Arancha contra la pared. Le aparta el pelo y empieza a besar, lamer y succionar el cuello de ella. Ella, que es muy intensa, estira las piernas y sube y baja apoyada en la pared del cosquilleo que este le está produciendo. Poco a poco se van arrastando hacia la puerta de la cocina. Él, que cada gesto que realiza le hace aumentar el fuego que lleva interno, arranca la blusa que lleva puesta y deja al descubierto el sujetador color gris y de buena tela que oculta los buenos y grandes pechos de Arancha. Él, estampa la cara en sus suculentas tetas y ella puede sentir la respiración del joven.
El cosquilleo es profundo y le recorre toda la espalda, y como anda acorralada por su lujurioso amor, se apoya en el pomo de la puerta y esta se abre de repente. Las piernas de ambos se precipitan a caer pero topan por suerte con el filo de la mesa que en la estancia se muestra
-¡Estupendo! - piensa él.
Aparta algunas cosas que había por encima el mueble, como la sal, las servilletas o el agua. Lleva las manos a la cintura de ella, y hace fuerza con sus brazos y la posa encima de la mesa.
No hablan, para esto a lo que están jugando sobran las palabras. Son muy jóvenes y para lo que pretenden hacer, ambos, son vírgenes e inexpertos.
Al pronto, Fran, le sube la falda a Arancha y le baja las medias a la vez que con su boca le va besando sus piernas mientras le va quitando las mismas medias. Ella se siente cada vez más profunda. Cada vez, quiere que cuanto antes, ambos se fundan en uno,que cuanto antes pueda sentir a su novio dentro de ella.Una vez bajada la prenda, Fran, estrella su mano hacia la braga de ella y empieza a frotar la superficie con notable picardía. Arancha se termina de quitar los tacones. Está en sujetador, en bragas y descalza y él, continúa entero. Rápidamente se percata de ello y le comienza a desabrochar los botones de la camisa y de manera simultánea, le va besando el torso que por cada botón que se aparta se va quedando cada vez más desnudo. Fran termina de quitarse del todo la camisa y con fuerte ansia se quita el vaquero y se queda en calzoncillos. Arancha se queda expectante y Fran, ahora semi desnudo se dispone a quitarle el sujetador a Arancha. Deja relucir sus más que deliciosos pechos. Él, los amasa, respira y siente hasta cansarse y después se dirige con contundencia hacia la braga de ella. Arancha le detiene y explica
-Para Fran, los preservativos los tengo en mi cuarto, vamos para allá y ya lo hacemos.
Él asiente con deseo.
Arancha le coge la mano y recorren juntos el pasillo hasta llegar a la habitación de la morena.
El adolescente rubito le dice- vamos, túmbate en la cama...
Ella se lo niega y le responde con malicia carnal :
-No, túmbate tú y disfruta
Él lo acepta con gusto. Se tumba en las tiernas sábanas que huelen a colonia.
Arancha mete la mano al fondo del cajón de su armario y saca el dichoso preservativo. Lo deja en la mesita de noche y comienza con los preliminares.
Se echa encima de él y le empieza a besar el cuello mientras posa las manos en su pecho y las arrastra hasta la cadera, acariciándole.
Él siente un profundo susurro interior que le invita a continuar en ese estado de relajación y lujuria juvenil. Arancha es toda suya, toda para él y todo el gozo que puede sentir, lo está sintiendo y ella es la que se lo está dando. Dándole sumo placer. Ella continúa besándole, ahora el torso. Lo lame, lo siente, le quiere hacer gozar. Continúa bajando sus labios y su lengua alrededor de su barriga hasta llegar a su calzón. Le clava sus femeninas uñas en todas sus caderas, cerca del pene. Poco a poco, mientras le araña, le va quitando la prenda hasta dejar ver el pene erecto de él. Miembro que está deseoso de ponerse en marcha y de mostrar todo su poderío. Ella, algo tímida, lo agarra con sutileza y después de algunos instantes, se lo lleva a la boca y lo lame y succiona. Él, entonces, siente un profundo e intenso placer. Tras unos minutos, Arancha deja de lamer el pene de Fran y este, viendo que ya ha terminado su labor, le corresponde y la agarra de la cadera y la echa ahora, él a ella, contra la cama y se le pone encima. Le agarra las dos tetas con fuerza mientras arrastra la lengua hasta su braga. Una vez ahí, la termina de desnudar. Ella lo ve nervioso y observa que no sabe muy bien que hacer, así que coge del mueblecito el condon y se lo ofrece
-¿Sabes como va?
-Si... Más o menos...
-Anda trae, que yo me he visto videos y esto tiene su cosa. Tú siéntate.
Como si de una bolsita de ketchup se tratara, abre el preservativo y se lo coloca con calma y de forma adecuada a Fran. Arancha se vuelve a tumbar y se abre de manera susceptible para el joven rubio que en seguida se dispone a penetrarla. Ambos están ansiosos. Él está temblando, ama profundamente a Arancha y es todo un gusto quitarse su virginidad con ella. Ella ríe de la situación a la vez que se muerde la comisura de los labios. Él, antes de intentar entrar en la vagina que se le oferta, se detiene a observar a ese bellezon que se le expone toda para él. Curvas de escándalo, pechos de talla máxima con unos pezones en punta. Unas piernas de tremenda potencia y en medio, todo el premio. La puerta de entrada al paraíso de la carne. Los ojos color caramelo de arancha, delatan con la mirada el ansia que siente por hacer el amor. Él, va al lío. Intenta meter su pene, más que erecto, y topa con una puerta cerrada con candado. Lo intenta y lo intenta hasta que descubre de que no hay forma. Arancha finalmente le advierte :
-Fran...No entra...
-Pero como no va a entrar hombre...
-Pues no entra Fran, si quieres, lo intentamos otro día...
-Pero... Y hoy... ¿Qué hacemos?
-¿Quieres que nos hagamos unas pajas juntos?
-Mejor...la postura del 69 ¿no?
-Bueno...
Ambos se posicionan. A él, se le dispone todo el sexo de ella, que intenta complacer moviendo de forma locuela la lengua y ella le succiona nuevamente el pene, todo erguido y fortachón mientras, al igual que él mezcla el lamer con introducir los dedos practicando la masturbación, ella le agita con fuerza y de arriba a abajo. Pocos minutos después, Fran, acaba antes que Arancha. Él le avisa del jugo profundo que le llega del fondo de sus entrañas apagando su fuego interno. Ella le aparta el semen. Se visten, se besan y se abrazan y al caer la tarde él se va, algo decepcionado de no haber podido fornicar como quería, pero bueno, otra vez será...
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Relatos Carnales E Historias Sensuales
Novela JuvenilJorge y Elena, Fran y Arancha, Alicia y Lucas... Todos ellos adolescentes, todos ellos enamorados y todos ellos tienen entre sí, un relato de amor, lujuria y sexo juvenil. ¿Quieres descubrir las historias de todos estos personajes que reparten cari...