LOS OPUESTOS SE ATRAEN

CAPITULO 7

-¿Y Fionna lo sabe?-

-No, no puedo decirle que soy un dahaka- Pronunciaba Finn tristemente mientras cerraba sus ojos para poder dormir.

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-Hombre, eso es horrible- 

-Lo sé-

-¿Puedo preguntar desde cuando eres un dahaka?-

-Desde los 11 años, ya pasaron 4 años desde eso-

-¿Desde tan joven? Debió de haber sido demasiado doloroso- Pronunciaba Jake con un tono triste

-Sí, lo fue, pero ya estoy comenzando a acostumbrarme de a poco, no del todo, pero es un comienzo, además, en esos 4 años pude practicar y ahora tengo el control de todas las habilidades que puede obtener un dahaka-

-Entiendo, lamento haber hecho que recuerdes eso-

-Está bien, hace mucho que no hablo con nadie sobre esto, y tampoco puedo andar diciéndoselo a todo el mundo, pero te lo conté a ti porque sé que puedo confiar en que no se lo dirás a nadie, y mucho menos a Fionna- Decía Finn mientras volteaba su cabeza con una sonrisa en su rostro hacia donde estaba Jake 

-Claro viejo, te prometo que no se lo contare a nadie, puedes confiar en mí-

-Gracias. Sera mejor que descansemos ya que el viaje fue muy largo y ya estoy cansado-

-Está bien- Asentía Jake acomodándose en un borde de la cama de Finn para poder dormir.

Ya había amanecido hace unas horas, el pasillo estaba repleto por la mayoría de los integrantes de la asociación, cruzándose de un lado hacia el otro, Fionna aún seguía durmiendo en su habitación junto con su nueva gata, que ella la consideraría más como una amiga, en lugar de una mascota. En la habitación de la muchacha rubia tocaban la puerta en señal de llamarla, y como aún no se levantaba, un muchacho comenzó a llamarla por su nombre.

-Fi, ya es hora de que te despiertes, son las 13:00 Pm, Supongo que ya habrás descansado lo suficiente luego del largo viaje- Intentaba levantarla Aaron desde fuera de la habitación, tocando su puerta.

Como no obtenía respuesta por parte de su mejor amiga, decidió entrar en su habitación, ya que siempre lo hacía para poder despertarla cuando ella no quería hacerlo. Al entrar vio como una gata blanca con manchas color café se encontraba en su cama, durmiendo al igual que Fionna. Se quedó un poco atónito ya que nunca había visto a esa gata en la asociación.

-¡Fionna! ¡Despierta!-

-¡¿Qué?!- Se había despertado Fionna asustada, por el grito de su amigo que interrumpía el silencio y tranquilidad de su cuarto.

-¿Qué hace este gato aquí?- Decía señalando a Cake

-No es un gato, es una gata, y se llama cake- Decía mientras alzaba a la gata en sus brazos mostrándosela a Aaron.

-Sigues sin responder mi pregunta-

-La encontré ayer en la misión que nos había encomendado Sheik, junto con un perro, que es su hermano-

-¿Me vas a decir que trajiste al perro también?-

-No-

-Mejor-

-Lo trajo Finn-

*Suspira* -¿Tienen idea de lo que les va a decir Sheik cuando se entere de esto?-