Por un impulso de ambición, JYP Entertainment acepta a la primera trainee latina en su programa. Sin mucho que dejar en su país, Miranda Ling parte a Corea en busca de una vida mejor, mentalizada para triunfar en el medio artístico. En medio de su m...
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"Me pregunto a mí mismo una y otra vez, ¿seremos capaces de hacer que esto dure? Por supuesto que actúo como si nada estuviese mal, ¿y por qué no soy capaz de ello?"
[Can't See The End - Seventeen]
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"Para ambos, un hogar no es un lugar. Es una persona. Y finalmente, estamos en casa." – Stephanie Perkins
Seúl, Corea del Sur. | Sala de grabaciones de JYP Entertainment.
Hice algunas anotaciones en la hoja con la letra de la canción mientras sonaba la pista, una y otra vez.
–Entonces aquí tengo que subir dos tonos de cómo lo canto. – pregunté al profesor Lee. Estaba allí junto al productor, la empresa consiguió que Brave Brothers produjesen mi mini álbum comeback, quién estaba limpiando por última vez la pista.
No iban a permitir ningún tipo de error, y estábamos preparando todo con 7 meses de anticipación.
–Aquí, la segunda línea de la segunda estrofa, tienes que mantener ese tono, Miranda.
Canté la parte, concentrada en mantener el tono cómo me lo dijo.
–Bajaste al final, mantenlo allí. – me corrigió.
Rayé una línea con el bolígrafo en esas últimas palabras, y señalé con una flecha hacia arriba el tono, para luego escribir en español "mantenlo aquí".
–Tú alcanzas un C#5, vamos, hazlo pequeña. – insistió el profesor.
Pude hacerlo al 4to intento. Lo miré fijamente esperando alguna anotación o algún comentario.
–Miranda, hazlo dentro de la sala. – posteriormente miró al productor. –Enciende el micrófono, está lista para grabar.
Seúl, Corea del Sur. | Residencia de Seventeen.
"Espero que todo en tu grabación vaya excelente. Todo bien aquí, ya todos están dormidos."
Presioné enviar. Miré la hora, eran las 4 de la mañana.
–Coups, apaga el teléfono. – gruñó Chan, que dormía a mi lado. Esa noche quiso dormir conmigo, no me opuse.
–Lo siento, estoy esperando que respondan un mensaje. – lo miré de reojo.
Me di media vuelta, para que la luz de mi celular no le pegase directo en la cara. Sacudí los dedos cerca de la pantalla, esperando que contestase. Pero Milu sólo revisó el mensaje.
Suspiré, decidí bloquearlo. Y justo cuando iba a dejar el teléfono debajo de mi almohada, se encendió la pantalla con un mensaje.
Lo desbloqueé rápidamente, abriendo el mensaje. Pero era Gaon.
