Narra Jorge
No me gusta irme y dejar a tini y Lux solas, pero la señora Night quería aclarar unas cosas con respecto al contrato, o tratado, como quieran llamarlo.
Y así fue… pero no terminé tan tarde, fui a cenar a un bar no muy lejos de casa.
Me sentía raro, observado…
¿Por qué me siento así?
Es la misma sensación extraña… como la de New York
Mierda… no me gusta
-Hola, quiero un menú ejecutivo.- Pedí a una de las meseras sin mirarla a la cara.
-Enseguida…- Se fue.
Unos minutos después alguien se paró frente a mi mesa, levante la vista pensando que sería la mesera, pero claramente me equivoque.
-jorge….- Habló.
-Emma.- Quedé en shock, estaba destruida, llena de botox, cabello corto y mal peinado.
-A pasado tiempo jorge….- Me sonrió coqueta. Mierda, me da asco el intento de mujer que tengo delante de mí, no me importa que suene machista, pero es verdad.
-No quiero verte, eres una mierda para mí, vete Emma.- Le dije enojado.
-Estas muy bueno jorge…. Como siempre.- Se sentó en la silla que sobraba
-Emma, vete.- Le pedí nuevamente.
-¿Y cómo está la bebe? ¿La dejaste tirada por ahí para irte de putas?- Me pregunto tranquila… demasiado tranquila para estar hablando de la hija que abandono.
-Es hermosa Emma, y yo no soy como tú, yo salí adelante, saque a mi hija adelante, tengo un empleo perfecto, y más que nada, tengo una familia, una perfecta familia, que se que va a estar conmigo cuando los necesite, que no se van a ir y me van a dejar tirados. Sabias que estaba solo, que eras lo único para mi, y aun así te fuiste, dejándome con la bebe, que ahora es la cosa que más amo en este estúpido planeta.- Dije ya enojado, esta mujer me saca de mis casillas.
-¿Una familia? ¿Trabajo perfecto? ¿Tienes una nueva putita?- Río.
-¡No la llames así! Es la mujer que me hace feliz, nada es lo que sentía por ti comparado a lo que siento por ella, es la dueña de mi todo junto a Lux.- Esta mujer es una mierda y lo seguirá siendo.- Tengo el mejor trabajo del mundo, el que siempre quise, y el que le da a mi familia todo lo que necesita y el que me da la posibilidad de ser alguien.- Le dije.- Y más que nada… el que me dejo afrontar los hechos, no como tú, que huiste lejos, nunca te preocupaste por Lux, no mandaste una mísera carta…- Suspire.- No entiendo cómo puede existir una persona como tú, me das asco, no te quiero cerca de mi familia ¿Entendido?- Me paré, me miraba secamente y sin sentimientos.
-Jorge, no es un adiós, quiero ver a mi hija.- Me dijo.
-¡No es tu hija! Es MI hija, y la de Martina también, tú no tienes ningún derecho legal sobre ella. Su patria potestad*1* es mía, y pronto, será de Martina, cuando ella se convierta en mi esposa, será Lux blanco Stoessel.- Le dije.
-¡Tampoco es hija de esa puta! Ella no la tuvo en su vientre, no se cuido los 9 meses como lo hice yo, no sufrió los dolores de parto como lo hice yo.- Dios, esta mujer…
-¡Tu note cuidaste Emma! Lux sufre repentinos ataques de asma porque durante su embarazo fumaste.- Reí por la estúpida charla que estamos teniendo.- Ahora si me permites, adiós.-
-Solo… hasta la próxima jorge.- Me dijo-
-Te acercas a mi familia y te hundo.- Golpeé la mesa y salí del bar.
Cuando llegue a casa tome un vaso de agua y fui a la habitación, nos quedamos hablando hasta que nos dormimos.
Cuando desperté me quedé mirando a Martina, hasta que despertó.
-Buenos días princesa.- Le sonreí
-Hola lindo.- Abrió sus ojos
-¿Te sientes mejor?- Le pregunté
-Sí, gracias.- Me dijo
Quedamos unos minutos en silencio
-¿Segura? ¿No quieres que te lleve al hospital?- Rio y me sonrió
-Si jorge segura, gracias.- Se sentó en la cama
-Bueno, entonces, iré a preparar el desayuno.- La besé corto y me fui en bóxers y camiseta a la cocina.
(…)
Estaba raro, como ido. Emma había vuelto, y ahora querrá meterse con mi familia, no puedo permitir eso. Estos han sido los mejores meses de mi vida, y no quiero cambiarlos por nada en el mundo, no dejare que nadie se meta en el medio. No había hablado mucho con tini, estaba en las suyas.
-Jorge me voy a lo de lodovica.- Me dijo.- En un rato regreso.
-¿Ah? De acuerdo, te amo.- Beso a Lux en la frente y luego me saludo a mí con un beso.
-Yo también, adiós.-
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