✨Capitulo Treinta & Cuatro✨

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A través de ardor en los ojos, veo a los médicos transportar su cuerpo a una camilla, y la realidad de la situación me golpea como un disparo de cañón. Salto a mis pies y corro como una loca a través de una multitud de personas, cuando los médicos empiezan llevárselo. Me arrojo a través de ellos y llegando su mano ensangrentada, aprieto dos dedos ensangrentados.

—Justin.

Brazos fuertes me alejan, y una voz familiar habla cerca de mí oído.

—Déjalos examinarlo, __(tn). —declara Riley en voz raposa, arrastrándome de vuelta mientras lucho para ser puesta en libertad.

Giro alrededor a golpearlo para que me libere, cuando me doy cuenta que sus ojos están rojos, mientras trata de mantenerme sujeta en mi lucha, y de repente, me rompo. Profundos sollozos compulsivos brotan a través de mi cuerpo mientras retuerzo su camisa, y en lugar de pegarle, sólo me aferro. Necesito algo para aferrarme, y mi grande y fuerte árbol está roto en una camilla, molido a golpes.

—Lo siento. —lloro, cada centímetro de mí sacudiéndose y temblando mientras las lágrimas son arrancadas de mí al igual que cuando tenía seis años— . Oh, Dios, lo siento, lo siento tanto.

Él llora también, entonces se separa y se seca sus mejillas.

—Lo sé, __(tn), no sé qué coño... Es que... No sé qué diablos pasó aquí. ¡Jesús!

El entrenador viene hacia nosotros, con el rostro sombrío y los ojos también llenos de lágrimas y decepción.

—Ellos sospechan de una conmoción cerebral. Sus pupilas no responden correctamente.

Una nueva humedad ardiente estalló en mis ojos, y el nudo en la garganta se aprieta cuando Riley sigue al entrenador. Nora. Oh, a la mierda, ¡todavía tengo que esperar a Nora! Agarro Riley de nuevo, más lágrimas que amenazaban con desatar cuando me doy cuenta que no voy a poder ir con él.

—Riley, ¡mi hermana! Le dije que me encuentre aquí.

Él asiente con la cabeza en la comprensión.

—Te mandaré un mensaje con el nombre del hospital.

Asiento con la cabeza miserablemente, lo veo salir, enjugándome las lágrimas y ni siquiera sé qué hacer con el torbellino de emociones que hay dentro de mí.

Quiero desesperadamente ir con Justin, pero no le puedo pedir a Riley cambiar de lugar conmigo. Nora no lo conoce, podría cambiar de opinión si lo ve en mi lugar. Juro que es la cosa más difícil que he hecho en mi vida, verlo ser llevado, todo ensangrentado, sin correr detrás de él.

Me apoyo en la puerta del baño de las mujeres, y espero, y espero, inquieta por la preocupación y obsesionada por lo que acabo de ver.

Mi mente sigue girando y siento que pronto voy a despertar y darme cuenta de que esto era sólo un mal sueño, y Justin no acaba de cometer el acto más doloroso y casi suicida arriba del ring.

Pero lo hizo.

Él lo hizo.

Mi Justin.

El hombre que ríe conmigo, que corre conmigo, y me dice que soy una pequeña petardo.

El hombre más fuerte que he conocido, y el que ha sido más suave para mí.

El que está un poco mal, un poco loco, un poco demasiado difícil de manejar para mí.

Cuando tres horas pasan, me he quedado sin lágrimas, y mi esperanza se ha ido también. Nora no ha llegando. Justin fue eliminado por una conmoción cerebral, y me han dicho que lo han entubado.

ERES MÍA ¡La Obsesión Del Boxeador! (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora