Thousand miles

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Hey :D! Esto simplemente fue escrito por diversión, acuñada al tiempo y sumada a la inspiración; sin negar mi opulenta obsesión por no dejar morir al fandom de esta OTP ,  por que estos dos, en algún mundo, tiempo o dimensión estén juntos. (Fan harta del hiatus eterno CLAMP ¬¬*)

Advertencias: Ninguna salvo si no te gusta el BL no leas. OOCness(? Especie de AU dentro de las dimensiones de TRC y el sadame en X. 

One-shot independiente. El titulo es el nombre de una canción de Vanessa Carlton y no tiene que ver con el fic...o ¿sí? 

Sin más los dejo con esta lectura ridícula pero que disfrute MUCHO al escribir :D

~~oOo~~

-Vas Monou.

Gruñí desviando la vista a la pista de baile por enésima vez. Barriéndola por encima de las gafas. Nada.

-¡Ay, por favor! -Sorata rodó lo ojos hacia el techo, recargando los codos en la barra-.¿Podrías dejar de cotizarte por una sola noche?

-Déjame en paz- . Le espeté dando otra trago a la bebida espirituosa. No quería que se diera cuenta de que estaba... indispuesto, por decirlo así-. Además, creo que tengo todo el derecho a cotizarme-. Arremetí acabándome el trago de un golpe y soltándole una sonrisita de lado. Sorata sólo hizo un puchero y ordenó un par más de tragos. 

Sólo llevábamos media hora en el antro y Sorata ya había divisado a 5 posibles candidatas para lo que nos gusta llamar de manera decente "noche desenfrenada" -Sí, exactamente lo que se están imaginando: sexo, sexo y MÁS sexo- sin embargo mi cuerpo, el cual recientemente se había tornado adulto dentro de los estándares de las tierras niponas no estaba en la misma sintonía que el de mi hiperactivo amigo Kansai.  

No voy a mentirles. Había todo un abanico de preciosidades en ese lugar. Chicas de todos los tamaños, proporciones y colores. Sin embargo este cuerpecito de 1.90 no se sentía atraído por ninguna. Ya había percibido las miradas de algunas que se deslizaban con cadencia en la pista, otras lo hacían al acercarse a la barra y pedir una bebida pero... nada. Nada de nada. 

-¡Uf! -Por el rabillo del ojo vi a Sorata posar el dorso de la mano sobre la frente y se escurría por el banquillo hasta despatarrase en el piso. Giré el asiento para darle la espalda mientras le señalaba una botella de escoces al bartender y le cuestionaba por el origen de la bebida con una enorme sonrisa. 

-Yo, aquí, muriéndome y tú...-Me recriminó con un puchero y unas lagrimillas de cocodrilo danzaban en sus ojos marrones-. La venganza es dulce-. Sentenció recobrando su actitud de dignidad-. Gracias a tu desplante de total indiferencia para con mi hermoso ser -ahogué una risita- no te guiaré al refugio del recién llegado aquelarre de bellezas. Con permiso. -Sin más el idiota se dio media vuelta, la barbilla alzada, la espada recta; con pasos livianos de escurrió entre los bailarines hacia el lado opuesto del establecimiento.  Suspiré pasándome una mano por el cabello.

Tomé la botella de cerveza que Sorata había olvidado antes de ir en su persecución. No tardé en hallarlo. Estaba sentado en una mesa del segundo piso que se hallaba pegada a la barandilla, dónde se podía apreciar la pista, los sofás que había a cada lado y la barra sin esfuerzo. El chico recargaba los antebrazos sobre un eje y la barbilla sobre el cruce de sus brazos, tenía la mirada clavada sobre un grupo de muchachas que bailaban muy juntas en una de las esquinas menos pobladas del entarimado. 

-¡Oi! - respingó-. Eres un idiota. Estás viendo y no ves-.Refunfuñó volviendo la vista al frente.

-Tranquilo, Lince. No pienso entorpecer la jugada.

Ichiban tsutekina koto! {FuuKam}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora