Mas allá de un contrato [KuroMahi]

Snow Lily y El regreso de Sakuya

Días después, el pelinegro más bajito por fin había despertado, no recordaba que estaba haciendo o cuanto había dormido. Seguramente el tiempo normal que él dormía, suspiro un poco mientras veía alrededor en su habitación.

—¿Lily? — susurró haciendo que el rubio más alto apareciese y le sonriera

—¿Sucede algo Misono? — se acercó a él tomando su mano para llevarlo con él.

—No... solo...— negó de nuevo caminando sin soltar la mano del rubio viendo a todos lados, tomo su desayuno con toda tranquilidad. Todo estaba normal, excepto por la sensación en su pecho que no lo dejaba en paz.

—Misono, te llaman— interrumpió Lily y apunto a la puerta. Las gemelas le esperaban con algunos libros y sus juguetes. Este sonrió y asintió acercándose a ellas.

<< "Lo siento Misono...">> pensaba el rubio mientras apretaba sus papeles detrás de su espalda. No le dejaría irse, no dejaría que todo se acabase así nada más...

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—Estoy preocupado por Misono...— comentaba el castaño al rubio de las aguas termales que esperaba en la mesa pacientemente la cena mientras, ambos servamp's de nuevo hablaban en el balcón.

—¿Crees que deberíamos ir por él? — respondió Tetsu quien veía ahora su plato de comida servido frente a él.

—Le llamare de nuevo...— el castaño tomo su teléfono llamando de nuevo al más bajito.

—¿Mahiru? — respondió del otro lado de la línea.

—¡¿Estas bien?! ¡Hace más de tres días que no sabemos de ti! — se escuchaba preocupado, más de lo normal

—¿Tres días...? Pero si acabo de verte ayer...—

—Misono eso fue...— la llamada se cortó

—¡¿Qué haces Lily?! — protestó el pelinegro que veía al rubio con su teléfono, este le sonrió antes de que cayese dormido de nueva cuenta.

—Perdón...— murmuró y lo tomo entre sus brazos besando su frente y sus labios.

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—¡Vamos! — el castaño jalo al rubio y a ambos servamp's, ya no dejaría así nada más las cosas.

(Por la noche)

—Esta es...— suspiro el castaño al ver la casa cerrada

—¿Y como entraremos? — el rubio se acercó más al castaño provocando un suave gruñido en el peli celeste.

—Tenemos que averiguar eso...— murmuró viendo la puerta color negro << "Parece un castillo" >>

—Mahiru— el rubio le mostro su ataúd. Iban a entrar, aunque fuera por las malas...

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—¡Wahhh! — se escuchaba el horrible grito del castaño que ahora estaba por los aires aferrado al ataúd negro del rubio. Tras un encuentro nada agradable con alguien que parecía seguir a Tsubaki... paso lo peor...

—¡Misono! — grito el castaño sin poder acercarse más. Este había sido absorbido por el servamp que ahora se encontraba en pésimas condiciones....

<< "¿Dónde...? ¿Por qué...?" >> los pensamientos del pelinegro resonaban en su mente mientras más se hundía...

—Todos... merecemos ser amados...— esas palabras resonaban más y más a medida que bajaba. Al llegar a un pequeño cuarto y encontrarse con lo que parecía ser una niña, el peli negro no pensaba dudar más y esas mismas palabras que resonaron durante su caída fueron las mismas que ella menciono