Explicaciones Justificadas

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Ya era Lunes, la primera hora tocaba matemática y la profesora se preparaba para revisar nuestros ejercicios que dejó para la casa, no tenía miedo en fallar, confiaba plenamente en Sofía y dudo que se haya equivocado.
Pero la profesora dijo que revisaría la tarea de otra forma, que volviéramos a hacer los ejercicios en la pizarra para que ella pudiera comprobar que nosotros lo hubiéramos hecho y no hubiésemos copiado de otro compañero.
Estoy acabado, pensé. Vi a Sofía como hacia los ejercicios pero no me digne en preguntarle, solo me quedé contemplándola de cerca. Mire a mi alrededor y maldita sea mi suerte que Dayana no habia venido, a ella los números se les da bien. Felizmente mi apellido está casi al final y tenía tiempo para idear un plan.
No miento cuando digo que estaba sudando, ya tenía una pequeña desconfianza de parte de mis padres y si la profesora se daba cuenta que yo no hice los ejercicios que dejó, terminaría por acabarme.
Me quedaba sin tiempo, cuando bruscamente alguien se sentó a mi lado y muy de cerca mío, supuse que era Jimena, pero no. Era Valeria, qué empezó a explicarme los ejercicios, no tenía ganas de escuchar todo así que me limité a copiar un par de ejercicios en mi mano para después salir a la pizarra. Felizmente antes de mi apellido está el de Fabián, que era un buen tipo, solo que algo lento para esta materia. El resto de mi grupo estaba tan preocupado como yo para buscar soluciones, y por eso decidí no darle más trabajo tratando de que me ayuden. Cuando llegó mi turno, hice los ejercicios en la pizarra y la profesora notó que eran diferentes a los que aparecían en el cuaderno. Le tuve que decir que apliqué otro método para poder llegar al resultado. De momento, me creyó, pero no creo que se quede conforme.
Me regresé a mi sitio y le dí las gracias a Valeria por haberme ayudado.
Ella dijo que no fue nada y que con gusto me podría enseñar después de clase. Pero cambié de tema rápidamente, para poder llegar a lo que ella me prometió: Todo sobre Jimena debidamente explicado y buscar una justificación.
Mientras me contaba todo, pude sentir la mirada de Jimena mientras estaba en la pizarra esperando a que yo le ayudase.

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