Lluvia emocional

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Las nubes se ponían cómodas en el cielo y empezó a llover, algo raro para la época (ya era mediados de junio).

Ya faltaba menos de 15 pasos para llegar a mi casa, y aun asi me sentia un poco nervioso; más que todo por el repentino estado de ánimo que ocurrio ese dia. Pasé de estar deprimido a estar preocupado por Sofía. Cuando llegamos, abrí la puerta y le dije que primero pasara ella, me respondió con una sonrisa. Fuimos a mi sala, felizmente estaba limpia y ordenada, y le pedí que tomara asiento. Mientras yo iba a buscar algo que comer, felizmente encontré unos caramelos indios que mi primo me había regalado en recompensa de ser cómplice en una travesura suya. Cuando iba a salir, eché una ojeada a Sofía; no la había visto así, era muy bonita y su sonrisa a pesar de la lluvia no habia desparecido. Quizá tenía enamorado y también mucha experiencia en el amor, quizá podría ayudarme.

Le ofrecí los caramelos y agarró uno. Me sonrió y dijo que picaban; ¿Picar? Probe uno parecido al que había agarrado ella y en efecto, tenían un picor agradable. Me sorprendí y lancé una risa.

Sofia: Gracias a la lluvia, al menos te haz olvidado de lo que ha pasado hoy.

Yo: Como puedes saber lo que me ha pasado hoy?

Sofia: Un rostro afligido es más que suficiente para encontrar respuestas. Dayana me dijo que no eres el mismo de antes desde que tu mejor amiga está en una relación.

Yo: Hago todo lo posible para que no se note. No puedo dejar que me vean así, no soy alguien que se puede dar el lujo de estados de ánimos repentinos.

Sofia: Al ver como te expresas puedo ver que eres cabeza de grupo. Y la perspectiva que tienen tus amigos de ti es más que escencial.

Yo: Exacto, si yo cayera; quien se haría cargo del salón? Me he ganado el respeto y el derecho de liderar al salón gracias a mis actos. Sí, aún soy inmaduro, y no está bien q lo diga yo; pero soy el tipo más "cuerdo" que conosco. Pero.. lo que está pasando con Jimena está haciendome ver débil y con muchas dudas. Puedo perder ambas cosas, mi amistad valiosa con Jimena y la oportunidad de que nuestro salón sea el mejor, de mi mano.

Sofia: La amistad y el amor no pueden convivir en un mismo campo, algo parecido lo que te está pasando a ti.

Yo: Estoy perdiendo una parte de mi, y no quiero. Ella es mi mejor amiga, pero despues de lo que paso hoy; no se que pensar. Siento que algo se derrumba de a pocos dentro de mí. A veces espero con ansias los viernes para no ver a Jimena ignorandome de esa manera, pero es peor. Me entra la nostalgia porque era costumbre salir ella y yo los fines de semana. Dayana me escribe para salir, pero a veces le miento por temor a encontrar a Jimena y Josué , y q me vuelva a ignorar. Le debo mucho a Dayana y ella no tiene ningún tipo de responsabilidad conmigo, pero aún así lo hace.

Le tuve que contar a Sofia todo lo que me estaba pasando, para ser sincero ; parecía que tenía más de la experiencia que había supuesto. Me escuchó con tal atencion , que no pude evitar sentir tranquilidad. Cuando termine de hablar, ya eran cerca de las 6:00 de la tarde y Sofia vivía lejos.
No queria que se fuera, y menos sola; tome un taxi con ella y la acompañe a su casa. Cuando se despidio de mi, me susurro en el oido: "No siempre el camino correcto, es el más alumbrado".
Me entregó mi casaca del colegio junto con una sonrisa y un perfume que nunca antes había olido.

Tome un microbús para llegar a mi casa. Hacia mucho frío, y parecía que fuera a llover de nuevo. Me puse mi casaca, que aún estaba albergando el calor de Sofía. Cuando por fin llegué mi madre me esperaba preocupada y a la vez molesta, quería saber qué hacía a estar horas de la noche, aún con el uniforme y sin haber almorzado. Le tuve que mentir diciéndole que tenia una exposición mañana y que me había olvidado por completo de avanzarlo. Me gritó pero al menos ya estaba más tranquila. Mi madre no estaba en casa cuando invité a Sofía a pasar, eso me daba algo de soporte en aquella mentira piadosa.

Decidí bañarme e irme a la cama, no tenía hambre; al parecer ese picor del caramelo era muy efectivo. El aroma de Sofía aún me seguía y me sorprende que madre no se haya dado cuenta.

Esa noche no pude dormir, no lograba entender lo que me habia dicho. Pero algo si pude entender, que de alguna manera la compañia de Sofia alegraban hasta los dias mas nublados de mi vida hasta entonces.

Y.... empecé a sentir algo por ella.
Pero.... podía?

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