Decisión

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Estas vacaciones serán las más estresantes de las que he pasado, aun no sé cómo decirle a mi padre lo de estudiar en México, aun no soy mayor de edad en ninguno de los países y él aún puede hacer conmigo lo que se le dé su gana, llegue a Guadalajara hace dos días y la verdad es que he evitado a toda costa estar mucho tiempo en el rancho, estamos en temporada de cosecha y es un poco pesado, además tenemos un pedido grande de mermeladas.

Hace dos años que iniciamos este proyecto y va muy bien, aun es pequeño pero va en crecimiento, durante el verano firmamos un contrato con una cadena de almacenes bastante conocida aproveche que estaba checando lo de la exportación de la fresa y comencé a dar a conocer la mermelada, aunque el tío se llevó el trabajo pesado ya que él era quien iba a las juntas o llevaba muestras y la verdad es que las mermeladas se venden bastante bien en las tiendas donde se distribuye, son productos orgánicos libres de gluten y con sabor que compite con marcas de renombre.

Por fin me decidí a hablar con mi padre me aliste y fui a la planta hablar con él, cuando llegue ni él ni Roberto esperaban verme, supongo que porque nunca me había parado por ese lugar

-Bueno días papá ¿Podemos hablar? – dije mirándolo

-Que no ves que estamos ocupados –Roberto no sabe cómo mantener su boca cerrada

-No vine hablar contigo, vengo hablar con el dueño del lugar – su cara literalmente se fue al suelo

-No peleen ve a la oficina, en un momento voy - me miro y volvió a lo que estaba haciendo

Me fui a la oficina y cuando entre me encontré con el cuadro que nos hicieron antes de que mi abuelo muriera todos parecíamos una familia feliz, me senté en el escritorio y las fotografías en el eran de mi madre Roberto y Andrés y una muy pequeñita mía, supongo que mi madre la puso.

-¿De qué quieres hablar? Espero que sea rápido porque no tengo mucho tiempo – se sentó en su rechinante silla

-Quiero estudiar aquí – lo mire pero no tenía expresión que me diera señal de que pensaba o si al menos estaba pensado

-¿Aquí? Guadalajara no tiene buenas universidades – como siempre miraba papeles, en lugar de mirarme

-No en Guadalajara en la ciudad de México – todo me temblaba, juro que en cualquier momento voy a salir corriendo -La UNAM es una institución reconocida mundialmente es una de las cien mejores casas de estudio del mundo – si eso no lo convencía estaba en serios problemas

-No – nunca ganaría con este hombre

-Por favor papá, ya he vivido once años fuera de mi país, lejos de mi familia quiero poder venir un fin de semana cualquiera y ver a mi madre a mi abuela... a ti – me miro, por fin tenía su atención era la primera vez -Por favor, quiero que mi madre pueda tomar un avión de dos horas y ver a su hija y no uno de casi diez – aunque nunca fue a verme a Londres, espero que eso al menos me de unos puntos a favor -Si el problemas es que tú me veas, no vendría más que en navidad y verano, el resto me quedaría con la abuela o un hotel, ni siquiera te enteraras que vine

-¿Qué se supone que estudiaras? – se recargo en la silla y me miro, la mirada de mi padre es penetrante y da mucho miedo, pero creó que comenzaba a interesarle un poco

-Derecho – dije segura

-Y ¿El examen de admisión? – abrió una pequeña caja y saco un puro, no sabía que mi padre fumaba puros

-Ya lo hice – dejo su tarea de prender su puro y de nuevo me prestó atención –Fue antes de venir a Guadalajara, sé que les mentí pero si tú me decías que sí, no quería perder un año

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