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Ashton caminaba tranquilamente por los pasillos de la escuela. Se sentía un poco abrumado por los exámenes que se avecinaban.
Tal vez era conocido por ser el alma de la fiesta, pero también le gustaba ser bueno en la escuela, le gustaba sacar buenas notas y ser aplicado. Y claro que tiene que serlo, tiene que mantener su beca.
Sus otros tres amigos se burlaban de el y solo hubo una sola persona en toda la escuela que pudo comprender su situación.

Mel caminaba junto a su amiga Elena, a lo lejos del pasillo ambas visualizaron a Ashton caminando hacia ellas y ambas se pusieron nerviosas.
Mel no sabía que Elena había estado con el, así como Elena no sabía que ella había estado con Ashton.

Así como ellas vieron a Ashton, el también las noto y sus manos comenzaron a sudar. Le gustaba que las chicas estuvieran a sus pies, pero solo una de ellas le habían hecho ver la vida desde otro punto de vista y es por eso que cuando rompió el corazón de esa chica se sintió como un completo idiota.

Su mirada de inmediato se dirigió hacia otro lugar y así evitar cualquier contacto con ambas chicas.

"¿Hoy que haremos, Mel?" Pregunta Elena a su amiga, tratando de cambiar el ambiente.

"No lo se. No tengo ganas de hacer algo hoy, la verdad" responde Mel con cansancio en su voz.

"Pero hoy es jueves de hacer algo juntas"

"Pues no, Elena. Hoy no tengo ganas"

Definitivamente el ver a Ashton si había causado cierta angustia e incomodidad en ella. No le gustaba recordar lo que había pasado entre ellos dos.
Decidió no decirle a su amiga ya que sabe como es, sabe que sería capaz de hacerle una escena a Ashton por haberse metido con ella.
En cambio Elena solo se sentía mal, sentía que era algo especial y claramente el lo arruino todo. Por su parte, quiso decirle a Mel todo lo que paso con Ashton, pero ¿que ganaría? No la haría sentir mejor o algo así.

Hoy sería un jueves muy aburrido para Elena ya que Mel no quiere hacer nada.
Las dos amigas se dirigieron a diferentes aulas; una a la de historia y la otra a matemáticas.

Elena llego al aula de matemáticas y por desgracia esa es la hora que compartía con Ashton.
No quería ni siquiera levantar la mirada por miedo de encontrarse con el. De verdad le hace demasiado daño tan siquiera el saber que esta cerca.

Fue a su asiento de siempre, y a un lado de el suyo se encontraba su amigo Connor. El chico de la sonrisa más linda de toda la escuela.
El era el único que sabía todo lo que pasaba con Ashton, ni siquiera su mejor amiga sabía, pero el si.
Por alguna razón ella encontraba inútil el decirle a Mel lo que había pasado, pero fue Connor quien la encontró llorando en el campo de fútbol aquella tarde.

"Zetune" dice Connor.

"Park" responde Elena.

Elena toma asiento y en seguido posa su mirada en su amigo.

"¿Que harás hoy, pequeña?" Pregunta su amigo y ella hace una mueca de disgusto.

"Sabes que no me gusta que me digas pequeña"

"Oh, es cierto. Lo olvide" Connor dice con una sonrisa burlona en su rostro.

"Claro que no lo olvidaste. Te gusta burlarte de mi"

"¡Claro que no, peque-"

La mirada asesina de Elena atraviesa por los azules ojos de Connor y en seguida sella sus carnosos labios para no decir nada más.

Ashton solía llamar a Elena de ese modo. 'Pequeña' era solo el apodo de Elena.
Ashton solía ponerle apodos a cada una de las chicas y así no confundirse de nombre. Que astuto.
Obviamente eso ninguna de ellas lo sabía. Así como Elena tenía el suyo, el de Mel era amor.

GIRLS TALK BOYSWhere stories live. Discover now