• Earth Skills •

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Cerró sus ojos, disfrutando de la calidez que le transmitía estar bajo el sol e inspirando el puro y limpio aire de los alrededores. Estaba tan cerca del cielo como podía, aunque en ciertas ocasiones debía taparse los ojos para poder ver con más claridad. Todo aquello parecía un simple cuento de hadas que solían contarle de niña, un sueño poco probable, solo que ahora era real.

-¿Y ahora qué? -se interrumpió ella misma al notar como varios murmullos llegaban a sus oídos, interrumpiendo bruscamente su tranquilidad.

Para su mala suerte, el canto de los pájaros no era suficientemente fuerte para opacar los chillidos de los adolescentes. Tal parece que estar en la cima de la nave, no significaba estar ajena a sus gritos y peleas que formaban en cuestión de segundos. Como era el actual caso. Observaba con seriedad la pelea que se estaba llevando a cabo entre Wells y, como no, Murphy. Y la peor parte, era que Murphy era el que más heridas tenía pero, a su vez, el único capaz de matar.

Un suspiro de cansancio emerge de los labios de la castaña a la vez que se ponía de pie, dispuesta a terminar con esa disputa. Sin embargo, ni bien comenzó a bajar algunos escalones que la llevarían al interior del tercer piso, aún con su cabeza afuera, vio como el grupo de exploradores había vuelto luego de varias horas afuera. Así, sin comida ni nada entre brazos, solo agitados como si hubieran corrido una maratón y algo paranoicos. Eso no hizo más que alimentar sus ganas de bajar y comenzar a cuestionar porqué no venían con la comida entra brazos que tanto prometieron.

En el tercer piso de la nave aún se mantenían sobre el suelo algunas mantas. Divisó algunas chaquetas desparramadas por el metálico suelo; enseguida recordó que luego de que la lluvia los empapara, se habían puesto de acuerdo en dormir dentro de la nave. Murphy, Bellamy, ella y dos chicos más ocuparon ese piso, puesto que en los otros dos apenas quedaba espacio.

Cogió la suya y, sacudiéndola un poco, se dispuso a ponérsela.

Sin más preámbulos, fue en busca de Bellamy para avisarle sobre la llegada de los restantes. Aunque parecía estar bastante ocupado disfrutando del espectáculo que le brindaban Murphy y Jaha.

Primero que nada, quiso parar tal pelea, pero apenas avanzó unos dos pasos cuando unos fuertes brazos rodearon la cintura de Jayde, impidiendo que pudiera irrumpir el entretenimiento. Ella no le hizo falta ni mirar de quien se trataba, era obvio que Bellamy no quería que metiera sus narices en ello. Después de todo, ni si quiera él tenía intenciones de pararlos y todos parecían pasársela bien. Así que, ¿Por qué quitar la única diversión que tenían en el momento?

-Suéltame Bellamy -exclamó ella, pero él simplemente negó por más que ella le diese la espalda, incapaz de verlo. Entonces fue que se volteó a mirarlo molesta, no esperándose quedar algo atontada por el atractivo del chico.

Jayde pudo notar como su compañero ya no llevaba su vestimenta de guardia, aunque sí llevaba una camisa azul un tanto sucia gracias al ambiente en el que convivían. Su cabello lo tenía plenamente revuelto, logrando que algunos rizos cayeran por su frente, haciéndole ver atractivo para cualquier chica. Hasta para ella, que lo miraba detenidamente hasta que por fin logró salir de su trance soltándose de su agarre.

-Los chicos ya volvieron -anunció. Confusión fue lo que recibió a cambio, dándole a entender de que no tenia idea de qué hablaba-. Tu hermana, la princesa, el caminante espacial, el par drogadicto -comenzó a apodar logrando que sus palabras cobraran sentido.

Justo en ese momento fue que la pequeña princesa del Arca entró en acción, regañando a Wells por tener bajo amenaza letal a Murphy.

-¡Wells!

"Diablos" pensó al no notar como la situación se había vuelto bastante intensa. Apenas se había descuidado unos segundos y ambos ya luchaban a muerte. Cualquiera podría haber muerto y ese hubiera sido Murphy, ya que Wells lo mantenía al filo del cuchillo. Literalmente. Tenía a Murphy agarrado por el cuello con un cuchillo contra su garganta, justo en la yugular. Y si no era por Clarke, no sabría qué más hubiera ocurrido.

The 100 [Bellamy Blake]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora