Esta historia inicia con un encuentro accidental. Chiyo la experta de venenos en Sunagakure, después de tantos años de no abandonar la Aldea de la Arena, decidió tomar unas vacaciones, fue su hermano Ebizo quien finalmente la convenció, sin embargo la anciana a regañadientes acepto.Se tomó un pequeño tiempo en la Aldea Oculta entre la hierba. La anciana se encontraba completamente renovada y hasta parecía feliz, pero de regreso a Suna se encontró con un inconveniente.
— ¡Regrésame lo que me robaste mocosa!— Si, toda felicidad se esfumo.
— ¡Yo no le he robado nada, vieja mentirosa! —Una pequeña azabache peleaba contra la anciana.
La pequeña anónima de nombre Jin, había distraído a la Abuela Chiyo, para lograr robarle una joya.
La azabache frustrada le devolvió lo que tanto pedía, sin duda hoy no era su día, generalmente nadie se percataba de sus robos.
— Como sea...— Jin se cruzó de brazos.—No lo necesito.—Dijo mientras se daba la vuelta para alejarse del lugar.
—Espera. —Le detuvo la Abuela Chiyo.
—¿Quiere que también le devuelva el dinero? —Pregunto decepcionada.
La abuela Chiyo se quedó estupefacta por un momento, aquella pequeña le había robado dinero sin que se diera cuenta. ¿Era alguna Kunoichi o algo así? Pero la niña no tenía ninguna banda Ninja.
—¿Cuál es tu nombre?—La anciana le pregunto.
—¿Por qué le importa saberlo?
—Me has robado sin que me percatara de ello.
—Pero si me ha descubierto al final.—La chica lo susurro.
—Has tenido el valor de robarme a mí, mereces algo de reconocimiento.—Asintió la de Suna.
—Jin. —Susurro la susodicha. —Jin Tachibana.
Utilizó el apellido de su madre desde que había aprendido que no debía usar el de su padre.
—¿Sabes que tu nombre significa gentileza? ¿De qué aldea eres mocosa?
—¿Por qué tanto interés en mí?
—Me recuerdas a cierta persona. —Chiyo sonrió al recordar a su nieto.
—No tengo una Aldea, desde que tengo sentido de conciencia que vago por el mundo Ninja aprendiendo diferentes técnicas. Ahora si me permite, intentare robarle a alguien más.—Se encogió de hombros.
A Chiyo le sorprendió su honestidad, y más aún cuando la pequeña solo se veía de unos 9 años, pero volvió a sonreír al tener una idea. —Oye mocosa, ¿No quieres acompañarme a Suna?
Claro que la idea era disparatada para Chiyo, pensó en las posibilidades que esa niña tenía, sabía que no mentía.
🌸🌸🌸
—Que quede claro que yo no he aceptado, solo la acompañare a Suna porque nunca he ido.—Se excusó Jin.
—Si, claro.—Chiyo se rio ante la actitud de la niña.—¿Entonces la habitación de arriba o la de abajo?
—¡Ya le dije que no me quedare!
—¿Por qué eres tan terca? Sé que te gustara.
—Nunca he estado en un desierto, yo soy más de... climas más frescos. —Jin hizo una mueca.
— ¿Ah sí?
Jin suspiro de frustración, nunca nadie le había ofrecido su ayuda, y no es como si la necesitara, pero ahora se cruza con esta señora y hasta le ofrece un hogar en donde quedarse a pesar de que le había robado.
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Flowers in the Desert | Gaara
FanfictionLa vida de Gaara da un repentino cambio cuando conoce a una hermosa flor, mejor conocida como Jin Tachibana, quien pone patas arriba la vida del pelirrojo. Pero esta flor es única, por que es una flor en el desierto. ✨ Hello! Para aquellas que ya me...