Flowers in the Desert | Gaara

02 "New Team"

Jin

- ¡Ven aqui mocosa del demonio!- Gritaba Kankuro, quien me correteaba.

- ¡Fue un accidente! - Grite aunque en realidad lo habia hecho con todas las intenciones.

- ¡No te escaparás de esta! - Por suerte encontre una puerta abierta y me encerre en la habitación.

Era un baño, suspire aliviada.

Retrocedamos un poco, yo como gran amiga despues de terminar las clases en la Academia me encamine a la casa de Gaara.

Una chica rubia, un poco mayor que yo, me abrio la puerta, se presento como Temari. Es de caracter muy fuerte, pero es muy agradable.

- Soy Jin. -Me presente.- ¿Está Gaara?

- ¿Tu eres la chica que siempre esta con Gaara? - Me pregunto curiosa.

- ¡Soy su amiga! - Exclame orgullosa de decirlo, espero y Gaara no me escuche por que luego se vuelve loco.- En todo caso ¿Y Gaara?

- ¿No lo sabes? - Pregunto la rubia.

¿Acaso me veo como una persona poco inteligente?

- ¿Saber que?

- El Kazekage le dio una misión de dos días a Gaara. Se fue hoy por la madrugada, no creo que llegue hasta mañana.

- ¡¿En serio!? ¡Gaara no me dijo nada! - Me cruce de brazos. - ¡Es injusto! ¡Ni siquiera va a la Academia y ya tiene una misión!

Eso es discriminación a extranjeros.

- Fue algo repentino, también para nosotros.

- Mmm ya que estoy aquí... ¿Está Kankuro?

- Si. - Contesto no muy segura Temari.- Acompañame.

La seguí por los pasillos, hasta que se detuvo en una puerta y la tocó.

- Creo que está dormido, ¿Quieres venir mas tarde o...?

- No, yo lo despierto. - Dije con una sonrisa traviesa.

Espero y no se de cuenta de mis intensiones, la rubia asintio y se fue.

Entre a la habitación, estaba hecha un desastre, pero yo no soy la indicada para decirlo ya que la mia podría estar igual o peor.

La cara de Kankuro sin maquillaje era ordinaria, creo que no lo reconociera si caminara asi por las calles de Suna.

Visualice el maquillaje morado, sonreí.

Con un pincel inicie a pintarle una cara feliz en su rostro, me sorprenio que no se habia movido, parece que duerme como tronco.

Despues un hermoso y realista bigote, en la frente le escribí la palabra Baka iba por pintarle los ojos, pero inicio a moverse.

Tengo que irme pronto de aqui, en silencio y con todas mis habilidades camine a la puerta, pero tropece con una camisa ocasionando que me cayera y se escuchara un gran ruido.

- ¡¿Que fue eso!?- Al parecer el tronco se desperto. - ¿Que haces aquí?

- Acaso no te puedo visitar. - Intenté no reír por la cara de Kankuro, claro intente.

En su momento de desconcierto, salí de la habitación, para despues escuchar un grito.

- ¡Ya veras, engendro del mal! - Me reí maliciosa y salí corriendo para que no me atrape.

Y así fue como llegue aquí, escuche sus pasos acercarse y luego detnerse en esta puerta, pero luego los pasos se fueron alejando.

Suspire aliviada, voltee hacia un lado si continuaba ahí, al voltear al lado contrario.