Engaños. (Promesas; Trilogía).

ESPECIAL 1.0

"No me dejes en los recuerdos."

-Anda, Viktorin. Tu padre vendrá pronto. -Habló mi tío Phichit.

-Ya voy. -Contesté sin muchas ganas.

A pesar  de tener 12 años recién cumplidos, era demasiado perezoso. No me gustaba salir de mi cama, pero mi padre vendría a visitarme.

Verán: Él vive en Canadá con el tío JJ, pero por alguna extraña razón, yo vivía con mi tío Phichit y su novio. Papá viene a verme una vez al mes, pero en ésta ocasión, se quedará por una semana para celebrar mi cumpleaños. No era que no me gustara estar con él, pero siempre era algo raro. Me llamaba Yurio, pero yo no tenía idea del por qué.

Me levanté de la cama y fui hasta al baño, arreglando mi rubio cabello con mis manos. Mi cabello era hasta el cuello, con un fleco que cubría la mitad de su rostro. Mi tío Phichit era algo especial, pero por alguna razón no me decía nada al respecto. Cambié mis prendas a un pantalón negro ajustado y una chaqueta deportiva con el logotipo de Rusia. Mi padre me la regaló cuando era niño, yo ni siquiera sabía dónde estaba Rusia, pues en ése entonces mi mundo era Canadá y Tailandia. Bajé hasta la sala donde todo estaba perfecto para cuando mi padre llegara. Me senté en el sofá individual y subí mis pies a la mesa de centro, recibiendo un zape por parte de mi tutor.

-¿Cuántas veces debo decirte que no subas los pies a la mesa? -Me reprendió, haciendo que bajara éstos al instante.

-Der'mo...(Mierda.)-Murmuré sobando mi cabeza con una de mis manos.

-Y no digas groserías.

Llamaron a la puerta y mi mayor fue a abrir, entrando segundos después a la sala un hombre alto y cabello plateado semi-largo. Me levanté del sofá y él sonrió a verme, para luego acercarse y abrazarme.

-Hey, mini Yurio. -Dijo sonriendo mientras mantenía el abrazo. -Felicidades, campeón. No cualquiera llega a 12 años.

Solté una risita, mi padre siempre era así de empalagoso.

-Viktor. -Dijo mi tío Phichit, haciendo que mi padre y yo giráramos a verlo. -Ah... Viktor mayor. Anda, vayan a la pista y luego vuelven a comer.

Comos si las palabras de mi tío fueran mágicas, no dudamos en salir de la casa y caminar durante varios minutos hacia la pista a unas cuantas calles. Al llegar, entramos, pedimos patines y fuimos hacia las gradas alrededor de la pista de hielo, para luego sacarnos los zapatos y colocarnos los patines. Había poca gente, con suerte.

Entramos ambos a la pista y comenzamos a patinar alrededor, mientras hablábamos de cosas triviales. Él me contó sobre cómo había sido regañado por el tío JJ luego del Campeonato Europeo al no lograr hacer el último salto, pero éso no evitó que se quedara con la medalla de plata. Luego de casi media hora, salimos de la pista a descansar un poco.

-Oye, Viktor... -Murmuró mi mayor sacando sus patines. 

-¿Si? -Contesté haciendo lo mismo que él.

-Supongo, que ya eres mayor y debes enterarte. -¿Enterarme? ¿De qué? - Verás... Hace casi 14 años, yo tenía un novio, su nombre era Yuuri. -Tragó de manera pesada. ¿Acaso era el mismo Yuuri del que mi tío Phichit se la pasaba hablando? -Bueno... Él quedó... Tú sabes... -Dijo algo incómodo, haciendo con sus manos un círculo sobre su vientre.

-¿Un bebé? -Pregunté, a lo que él asintió.

-Y... Bueno, algo pasó que no pudo nacer. -Primera lección del hoy: Tengo un hermano mayor muerto. -Luego de éso... -Se quedó mirando un punto fijo en la nada, mientras sus ojos se ponían llorosos.- M-me fui con tu padre... Yurio. -A la jodida. Lección dos: El famoso Yurio era mi padre. Definitivamente él estaba incómodo.

-No es necesario que lo digas ahora. -Le dije sonriendo. Él negó.

-Bueno... Yuuri, él hizo algunas cosas y pues... Fa-falleció... -¿Algunas cosas? No soy tan estúpido, padre. ¿Acaso se suicidó? -Luego de eso... Tu-tu padre Yurio ta-también... -Deja de balbucear, carajo. ¿Me estabas jodiendo, Viktor Nikiforov mayor? Soltó un sollozo. - Yo... -murmuró, ahora cabizbajo.- No pude con éso... 

Era demasiada información de golpe. ¿Era broma o qué carajos pasaba por su cabeza? Sólo podía fruncir el ceño. Quería soltar maldiciones, pero demonios, él estaba llorando. No me gusta ver llorara a la gente, menos a mi padre.

-Yo sólo... fui un completo cobarde...  Der'mo... Mi primera opción fue dejarte con Phichit. No había venido en años hasta que cumpliste los tres años. Quise que vinieras conmigo pero Phichit se negó. Él estaba en todo su derecho. Luego prometí venir cada mes a verte... -Susurró todo entre sollozos, estaba hablando enserio, ¿Qué debería decirle?

Analicemos:

 -Mi padre tenía una pareja, iban a tener un hijo pero murió.

-Mi padre Viktor se fue con Yurio.

-Me cuidó durante mis primeros meses de vida.

-El primer novio de papá se suicidó.

-Yurio también murió.

Mi padre daba pena. Pensar que éso le pasó en ¿Dos años? Agh... Sol pensarlo da tristeza. Él estaba sollozando, apuesto a que estaba aguantando llorar.

-Oye... Papá... -Hablé por lo bajo. -No me importa éso. -Dejó de hacer ruido.

-¿Qué? -Murmuró sin levantar la vista.

-No me interesa. -Repetí.- ¿Crees que acaso me interesa tu pasado? -Cruda realidad. -No me importa. Ya están muertos.

Él, de manera rápida, se colocó los zapatos y salió técnicamente corriendo de ahí. Me coloqué los zapatos y traté de seguirlo, pero al salir del lugar, ya no estaba.

¿Dije algo malo?