"Correré por el amor" - Yuri On Ice | [Vikturio] [Yuuri y Yurio] |

2.- «¿Y si digo que me gustas?»

      Alguien tocaba la puerta de la casa de un rubio, este enojado bajó las escaleras y abrió con cara de pocos amigos y ahí estába Yuuri, sonriente como siempre, sosteniendo en sus manos una bolsa grande como de costumbre.

     —Yuri, es tarde ¿Por qué no estas vestido ya?— Preguntó con una notable  preocupación mientras tocaba su frente para verificar si tenía fiebre o algo por el estilo.

     Quitó la mano de su frente con un deje de fastidio y se dio la vuelta —Entra —comenzó a subir las escaleras de regreso mientras su mejor amigo le seguía unos pasos atras —Solo me pondré algun pantalón y una playera cualquiera

     —Esta bién, ¿Y tu mochila?— Sonrió mientras ayudaba tendiendo la cama.

      Se quitó la playera y se puso otra —Creo que está tirada por ahí—

      Yuuri era un mar de pensamientos extraños y a la vez tan revueltos.

      No sabía qué le ocurría exactamente, desde que Yuri le dijó que le gustaba Viktor se sentía raro. El día anterior siquiera había ido a visitarlo por la tarde para ayudarlo con el trabajo de casa o las matemáticas que no Yuri no entiende, no quería estar con él. Sentía que soy una mala persona.

      Le dolía el pecho un poco ahora, era algo muy difícil de entender, tal vez solo tenía miedo a perder a su  mejor amigo, es decir, si Nikiforov aceptaba los sentimientos de Yuri pasaría más tiempo con él que con sigo, tal vez no le gustaría que Yuuri fuera a visitarlo o se quedara a dormir con él de vez en cuando, si eso sucedía se sentiría triste, porque Yuri era la persona con quien pasaba más tiempo.

     Pero bueno, no quería ser egoísta, quería a Yuri feliz y si eso significaba tener que dejar de hablar con él como siempre, lo haría.

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     Ambos chicos caminaban por una pequeña calle rumbo a la preparatoria.

     —¿Qué decidiste hacer con lo de tus sentimientos?— Inquirió el más alto de ambos.

      Le miró a los ojos mientras hacía una extraña mueca en su boca —Se lo diré, aúnque será difícil —Claro, declararle a alguién tus sentimientos núnca es fácil.

      Asintió con la cabeza —Ya veo, ¿Se lo dirás hoy? —Se sentía feo, tal vez ese hoy sería el último día que podría pasar con él.

      Caminó con un poco más de rápidez unos cuantos pasos y después volteó a mirar a su amigo —Se lo diré hoy durante la clase de Educación Física— Sonrió como pocas veces y se movió el cabello del rostro.
Estába dicho, para Yuuri sería natural que Viktor aceptara a su amigo, es decir ¿Quién no amaría el rostro angelical de ese rubio? Viktor erá bisexual o gay, más de una vez lo había visto besarse o manosearse con hombres, no lo rechazaría, incluso  podría apostarlo.

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       —Bien, van a ír a ponerse su ropa deportiva y después los veré en las gradas de las canchas de fútbol, ¡Rápido!— Dijó un hombre jóven de cabello café obscuro haciendo así que toda la clase saliera casí corriendo.

       —¿A dónde vas Yuri? ¿No te pondras tu ropa deportiva? —preguntó al ver que el chico salía corriendo hacia otro lugar.

       —¡Lo haré ahora! —vociferó ya a lo lejos. Yuuri entendió perfectamente a lo que se refería, la hora había llegado.

       Se quedó unos largos segundos fuera de sí y al final solo dejó salir un —Suerte —En murmullo.

       —Hey Yuuri vámos pronto, si no el maestro nos dará un regaño —tocó su hombro su amigo Phichit, que se llevaba bien con todo mundo.

       —¿Qué? Ah sí —sonrió como respuesta.

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       —¿Puedo hablar contigo? —Yuri jaló un poco de la chaqueta blanca y roja que llevaba Viktor, que al parecer platicaba con sus amigos y un par de chicas.

       —Jaja, ¿El cerdito mayor quiere hablar con Viktor? —Mencionó uno de ellos mientras reía junto a un par más.

       —¿Hum? Supongo que sí —Le miró de pies a cabeza frunciendo el seño. —Vayamos por allá —Señaló un árbol que no quedaba muy lejos.

        —De acuerdo —Contestó un poco nervioso mientras le seguía a un par de metros.

       Cuando ambos estuvieron trás el árbol Viktor rompió el silencio.

        —Bueno chico, ¿Qué tenías que decirme? —apoyó su peso en la pierna derecha y le miró esperando su respuesta.

       Bajó la mirada y cerró los ojos mientras un fuerte color carmesí se adueñaba de sus mejillas —Yo, quería decir que... —Vaya se sentía avergonzado, era difícil hablar en estos momentos.

        El de cabellos grises se recargó en el gran árbol —¿Qué cosa? —Inquirió sacando su celular.

           El chico apretó sus puños con fuerza y entonces hablo —¿Y si te digo que me gustas? —Dijó rápidamente pero no tanto como para que no le entendiera.

        —¿Ah? —Fue lo que contestó y trás unos cuantos segundo de silencio comenzó a reír. —Cielos, ¿Tu quieres que salga contigo? —siguió riendo.

       No tuvo una respuesta, Yuri solo seguía con su rostro bajo.

       —¿Te has visto en el espejo eh cerdillo? —Tomó el estómago del chico y lo comenzó a apretar con algo de fuerza —Yo no saldría con alguien que se la pasa comiendo todo lo que encuentra por ahí. Tienes buen rostro pero eres un, ¿Cómo decirlo?... Tienes mucho de sobra —Lo soltó y se escucho el obturador de una camara, posiblemente le habia tomado una foto para reirse de el más tarde, guardó su celular en la bolsa de su chaqueta y se dio media vuelta.

        —¿Si yo bajara de peso aceptarías mis sentimientos? —Pronunció ántes de que se fuera. Su voz estaba quebrada y su rostro cubierto por lágrimas.

        Le miró por sobre del hombro y le vió llorando —Tal vez lo haría — y se fué caminando como si lo que ántes le había dicho a su compañero no tuviera significado alguno.

        El chico de cabellos color oro comenzó a correr aúnque su Viktor le hubiera dado esperanzas le había dolido, la forma en que le trató «Así es el amor Yuri, duele» se dijó para sus adentros mientras subía las escaleras con rapidez y se tocaba con la mano el corazón.

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        —Vaya, ¿Dónde estará Yuri?— Dijó Mila mientras hablaba junto a Sara, Yuuri y Phichit.

        —No lo sé —contestó Katsuki mientras veía a Viktor platicar con sus amigos, al parecer las cosas no habían salido bien para el pequeño Yuratchka.

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