dedícame una ultima cancion

los días no pasan

ahí estaba yo parada detrás del escenario, las rodillas me temblaban a mas no poder.Solo cuando baje la mirada repare en que no tenia mi ropa usual, sino un hermoso vestido dorado,resbalaba y caía en mi piel,amoldándose a mi cuerpo de la misma forma que el champagne lo hace sobre una copa.Incluso sentía la similitud con esa bebida por el color. Parecía contener roció de oro que destellaban con la poca luz de los reflectores que llegaba a darme directamente a mi,nadie parecía notarme.Asome la cabeza logrando ver a toda la multitud victoreando,gritando y bailando a pesar de no haber música.Camine al frente para salir de mi escondite y que lograran verme, solo al escuchar el repiqueteo de los tacones pude divisarlos,del mismo color del vestido,sin embargo no sentía dolor o molestia alguna,me sorprendí de mi habilidad al momento de caminar con la misma facilidad que con mis zapatillas usuales,la verdad,no soy de usar este tipo de vestimenta ,sin embargo, sentía que estaba diseñado solamente para mi.Al encontrarme en el centro,repare en el micrófono en mi mano,dios,en esos momentos me encontraba tan distraída.Hice lo que mas amaba que era cantar ,una canción la cual no creo haber escuchado jamas,no sabia la letra ,sin embargo al abrir la boca ,simplemente la melodía salia de mi.La multitud después de un instante callo,veía a todos contener la respiración,temí hacer el ridículo e inmediatamente me calle,empece a revisarme el cuerpo con la vista temerosa de haber roto el vestido sin darme cuenta.La base de la canción seguía sonando de fondo.

Y entonces lo vi,canto en el momento adecuado,haciendo parecer que era un dueto,reparando mi error de callarme en pleno espectáculo. Vestía un hermoso traje entallado negro a juego con su corbata y camisa.Tenia el pelo levemente despeinado en un toque informal,era obvio que era la apariencia que deseaba dar,seguramente ese también era un peinado decidido por sus estilistas.No me miraba,cantaba hacia la multitud,dirigiéndose al centro en donde yo me encontraba,estaba embobada por la vista. Siguió caminando,levanto su vista clavando esos increíbles ojos azules en mi,podía jurar que habían penetrado mi alma hasta lo mas recóndito de mi ser,sentí que hacia esto hacia años,estaba cada vez mas cerca de mi,no se como pero supe que era mi turno de cantar y si no lo era simplemente no pude contener mas,nuestras voces encajaban perfectamente,en una melodía armoniosa,una canción lenta ,la clase de canción que dedicarías a alguien.No estaba nadie mas allí excepto nosotros dos,deje de escuchar todo a excepción de nosotros.La música sonaba sola,la multitud desapareció,quería tanto a ese momento durando por siempre,eramos simplemente nosotros dos,en mi lugar favorito;un escenario.Al terminar abrí mi boca para hablar pero nada salia de mi ¿que estaba sucediendo?Alex no me miraba mas,volvía a ser invisible,la multitud reapareció ensordecedora,los gritos estridentes se agolpaban dejándome aturdida,vi como daba media vuelta, yéndose por donde entro.Mis pies se ralentizaban, pero no pensaba darme por vencida,logre llegar,apenas me dirigí detrás de bambalinas, una oscuridad me envolvió depositando a mi persona en otro lugar.Era un parque abandonado con varios juegos averiados,esto empezaba a asustarme,¿donde me encontraba?era un día gris ,la felicidad de ese lugar parecía absorbida dejando simples migajas de dolor.Ya no tenia el vestuario anterior,unos jeans negros,remera blanca y zapatilla igual de blancas haciendo juego era mi nueva vestimenta. Sentí alguien seguirme,di una vuelta,estaba todo despejado en el sendero del parque por el cual caminaba,seguí mi camino.Esta vez escucha una risa que me paralizo hasta los huesos,definitivamente alguien se encontraba allí conmigo,esta vez estaba segura,di una vuelta para comprobar. Veía a la gente acercándose a mi,podrían haberse hecho pasar por personas normales dejando de lado el hecho de que no tenían rostro,debía admitirlo la imagen me aterrorizo. Comenze a desviarme del camino mientras corría con todas mis fuerzas,pise un charco,bien adiós a mis converse blancas supongo.

No otra vez por favor,mis pies volvían a ralentizarse imposibilitando el paso,la desesperación me envolvió,sentía las lagrimas a punto de salir,al menos todavía estaba la distancia suficiente para salvarme,eso creí,unos flashes cegaron mi vista,escuchaba los clics frenéticos,las risas se acercaban,logrando tumbarme.En posición fetal en el suelo,todos estaban alrededor mio mirándome,me faltaba el aire, podía sentir todo el calor corporal que sus cuerpos emanaban,eso si eran humanos.No me tocaban pero de alguna extraña manera sentía su contacto físico.SUFICIENTE.