Tercer mes

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—Bien… todo esta en orden— Naruto bajó de la báscula sin ayuda y se puso sus zapatos— Pesas un poquito mas de lo que deberías pesar en tu estado pero esta bien. Normal el primerizos.

—¿Pesa mas? ¿Cuantos kilos subió? — Sasuke no pudo evitar preguntar cuando le dijeron eso, estaba nervioso y tenia que alimentarse de información.

—Espera Sasuke …— Itachi le regaño mientras anotaba varias cosas en su libreta—¿Será posible?

—¿Que? ¿Que pasa-dattebayo?

Si había algo que no le gustaba Naruto era la intriga. Lo dejaban sin uñas y con un movimiento involuntario en su pierna derecha.

—Bien, haremos el ultrasonido. Quiero corroborar algo.

Naruto asintió y jalo a Sasuke mientras que éste seguía pensando que podía ser.

Maldito Itachi y su manía de dejar preocupación por donde pasaba.

Mas tarde, Naruto y Sasuke se miraban serios, cada uno al extremo de su comedor. El rubio se mordía las uñas mientras que Sasuke le miraba con curiosidad.

—Dos. Tendremos dos bebés Naruto.

Pero el Uzumaki aun estaba espantado. A decir verdad ya no quería tener un parto natural, pero sabía que si retrocedía Sasuke le iba a hacer burla.

Y el no se dejaría.

Pero, volviendo al punto; Naruto estaba preocupado. Dos. ¡Dos!

—Y mellizos, ¿Eh Naruto? Bien tino mi esposo.

—Yo… creo que iré a recostarme-ttebayo.

Y el rubio se fue con la cara pálida y las piernas temblorosas.

No podía estar pasándole esto. Su vientre crecería el doble de lo que ya estaba predicho.

Padre santo.

Tendremos que comprar otra cuna. El doble de accesorios y ropa.

—Pero no sabemos que son— Naruto murmuró algo decaído mientras le daba un mordisco a una zanahoria.

¡Zanahoria! Dios, todo le estaba afectando.

—Si pero, unas cuantas no harán daño— Sasuke empezó a apuntar en su libreta las cuentas y todo lo que gastarían.

Naruto le dio un ultimo mordisco a esa zanahoria y masticó de manera cansada.

—Oye, ¿Que tienes? Pareces triste— el moreno le apretó una pierna mientras le dedicaba una sonrisa.

—Nada… es solo que…— suspiró tristemente— Es que tengo miedo— susurró mientras sus ojos se cristalizaban.

Sasuke le miró sin expresar nada, pero por dentro sabía que su esposo estaba llevando todo de manera loca.

—Mira cielo, se que no será fácil. Se que serán dos bebés, doble bendición — le susurró mientras que le acariciaba una mejilla— Y quiero que sepas que esto no seria posible sino fuera por ti.

Naruto sonrió cabizbajo y se limpió las lágrimas con las mangas de su playera.

—Es la primera vez que me dices eso.

—Y que se te quede grabado que no lo volveré a repetir.

—¿Y cuando nazcan?—Sasuke alzo una ceja— ¿No lo dirás?

¡Doncel Por Error!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora