para asegurarme de no ser denunciado, pedí permiso de antemano así que no se infarten. esta ves el desafió sera por: Pandicornia_04
Historia: Querido diario.
Mi nuevo diario.
De camino a casa me distraje viendo a los niños jugar... ¿cuando no?
al llegar a casa me eche a la cama y tire la mochila al suelo.
¡Sara!...-- mi madre grito desde la cocina
¿de verdad? acabo de llegar y ya me molestan. no veo el día en que tenga mi propia casa.
baje a la cocina a toda velocidad... espero que sea algo importante.
-te tengo un regalo-- dijo ocultando sus manos en la espalda
-gracias..., ¿creo?- me lleva una mano a la cabeza
que sera?, tienen tiempo que no me regalan nada
mi madre se acerco a mi y me entrego un pequeño libro rosa con mariposas pintadas encima
- muchas gracias... pero , ¿que es?
-un diario-
de verdad un diario... acaso tengo 9
-no creo nece....
-shuuuu- coloco un dedo en mi boca y me sonrió
después de la vergüenza que me hizo pasar mi madre, subí y me eche a dormir...
me levante dos horas después, algo aburrida eh de decir..., busque alguna actividad, pero nada me quitaba el aburrimiento.
mi mirada inspecciono la habitación de punta a punta... y adivinen... nada, no habia nada que hacer.
volví a tumbarme en la cama
au- exclame sobando mi espalda
voltee a ver que era la cosa infernal que me había lastimado
-estúpido diario-
tome aquel libro en mis manos y me decidí a romperlo..., lo levante y estaba a punto de rasgar la primera pagina, pero algo me detuvo
-ña, lo lastimare mejor con un lápiz..., así lo obligare a ser mi esclavo-
mi razonamiento salvo la vida de aquel libro estúpido y así, fue como comencé a torturar al diario con mi día a día.
¨Querido diario: a partir de hoy seras mi esclavo
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espero haber cumplido, me encantaría saber si es la misma escritura
de no ser así, no se detengan denle una puntuación de 0 al 10 .
espero tu juzgado Pandicornia_04
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EL copiador
DiversosSin la intención de desprestigiar a nadie, solo con el deseo de crecer, llegamos ha ser capaces de cometer actos mal vistos, cosas que de verdad desprendería un torrente de furia, si fuéramos aquella persona a la que se le inflige la ofensa. Lastimo...
