Por Harry
Note la luz del día en mi rostro , cálida y perfecta. Ojala todos los días fuesen así de maravillosos...Abro los ojos poco a poco , tengo el cuerpo dolorido por la violación y me brotan las lágrimas de tan solo recordarlo. Nunca pensé que esto me pudiese ocurrir. Yo soy un chico normal, no soy rico y no suelo destacar; es más, me considero un friki ¿por qué yo?...
-¿Ya estas despierto?- me tenso al escuchar esa voz dulce e autoritaria a la vez. Estoy aún atado a esa mesa de madera y me miro detenidamente las manos. ¡Cielo! Están rojas y con marcas.De tan solo mirarlas me duelen.
-No te preocupes- dice acercándose a mí de repente y cogiéndome la manos para desatarme.-Lo cortare - Saca de un bolsillo una especie de navaja de doble filo. Me asusto y me separo lo que mínimo que puedo de él.-No te asustes príncipe , no te haré daño.
-Ya lo has hecho - susurro y me asombro de la voz ronca y bajita que tengo. Que pena doy, soy como un canijo que no sabe defenderse. Lloro al recordar todo lo sucedido.
Louis me mira confundido, pero enseguida vuelve a lo suyo. Cuando me desata me toco las manos y las miro más de cerca. Están horribles y moradas.
-Te traeré algo para que comas- murmura dirigiéndose a la cocina.
Ese es aquel chico que estaba con Eleanor en la cafetería. El mismo. Pero...parece más triste , más inhumano...
-Toma- vuelve con un cuenco lleno de una sopa que huele bastante bien. Me muerdo el labio inferior.¡Dios!, estoy muerto de hambre , pero no puedo obedecerlo así de fácil.
Retiro la cara a un lado y me envuelvo en mi mismo. Oigo un suspiro leve salir de su boca.
-Oye, tienes que comer.-lo miro confundido, ¿por qué es tan amable? - Si no comes te morirás.- me mira con dulzura, es tan extraño.
-Prefiero morir de hambre rápido antes de quedarme a tu lado- su tono dulce cambia de inmediato. Su mano pasa por mi rostro tan rápido que no me entero hasta que me encuentro cubriéndome el rostro con las manos y llorando del dolor y la vergüenza. Nunca nadie me había pegado hasta ayer mismo.
-¡Come!- grita. ¿Qué le pasa? Primero es dulce y después me pega.
"Harry le has ofendido" dice aquel niñato que está dentro de mi cabeza y que no se si soy yo. Es verdad.
-¡Deja de llorar!- vuelve a gritar y se pasa una mano por el pelo. Odio ese cabello revuelto, lo odio a él.
-¡No!- contesto-
-¿No?- su rostro refleja sorpresa. De momento se pone serio y se acerca a mi con el puño levantado.¡No, no, no!
-No me pegues, por favor- suelto en un sollozo y con los brazos intento taparme la cara y la cabeza. Cierro los ojos y las lágrimas caen por mis mejillas. Estoy preparado para que me pegue.
-No te voy a pegar- susurra y se sienta a mi lado. Poco a poco levanto la vista, aún con miedo. Esta con la cabeza entre las piernas. ¿Esta llorando?
-Nunca pensé que en esto iba a terminar.-traga saliva- Lo siento tanto , Harry- me mira y ¡en efecto!, esta llorando .
-Déjame ir , Louis.- susurro aún alejado lo suficiente de él.
-¿Cómo me has llamado?- sus rostro está pálido. ¿De qué esta asustado?
-L..louis- balbuceo.
-¿Cómo lo sabes?- gruñe.
-Yo...esto.. No lo sé- me asusto y vuelvo a llorar. ¿Qué me pasa ?¿Por qué estoy tan sensible?
-¡Dímelo!- grita y se levanta de inmediato.
Niego con la cabeza....No se si decirlo ¿y si me mata por eso?
Louis sale de la habitación en donde yo me encuentro con paso ligero. Miro a mi alrededor, tiene que haber algo que me ayude a defenderme. "Piensa, piensa". ¡Madre mía!. La puerta esta abierta, la puerta de la entrada esta entre abierta, no es de la ventana de donde entra la luz, estas están cerradas, ¡es de la puerta!.
Miro detrás de mi para comprobar que Louis no esta mirándome. Me levanto enseguida con un poco de dificultad. Me duele todo. Siento que voy a desfallecer...¡Ayúdame, Dios!
Corro en cuando noto que ya puedo moverme bien. Abro la puerta y el sol impacta contra mi cara. No veo nada. Corro pese al improvisto , corro todo lo que puedo. Hay un bosque cerca y dudo un momento en si adentrarme o quedarme parado.
"¡Vamos , Harry!" Le hago caso a mi cerebro y me adentro.
-¡Hey!- su grito me hace desvariar,estoy mareado. Me voy a caer.
-Harry, ven aquí. No estoy enfadado- su voz suena cada vez más cerca. - me escondo detrás de un árbol. No puedo correr más, no tengo fuerzas.-Harry, ven aquí.- su voz vuelve a ser dulce.
¡No, no, no! ¡Vete y déjame en paz!
-¡Harry!- grita de nuevo y empiezo a temblar del miedo. Esta enfadado y va hacerme daño.¿Qué hago?
-Estoy aquí- susurro y salgo de mi escondite.¡¿Qué haces , Harry!? No puedo creerme ni yo mismo lo que acabo de hacer.
Lloro y me arrastro por el suelo.
-Harry- susurra.
-No me hagas daño, lo siento- admito y es que ahora es lo único que me queda; sentirlo y suplicar por que no me mate.
-eh, te juro que no te haré daño- noto sus brazos rodearme.
¡Oh, Dios! Tanto necesito un abrazo que me da igual quién me lo de.
-Eres el hermano de mi profesora- admito y me pego más a él.
-Chiss....Calla- me abraza más fuerte.
Sin duda esto no lo esperaba , ni él ni yo. No le tengo aprecio, ni mucho menos, lo odio y lo odiare siempre. Estoy sensible y en momentos así todo da igual. No quiero morir porque soy aún muy joven y tengo una familia que me quiere. Algo me dice que esto va a salir bien y que regresare a casa.