Ronin se había levantado para ir a clases, aunque se suponía que ella vivía en Abnegación, se sentía una extraña porque sabía que nada era real, o no podía serlo, había leído ese libro tantas veces. ¿Cómo podía ser que ahora estaba dentro de ese mundo ficticio? Con el que muchas veces había imaginado estar y ser parte de el, ahora lo era y le parecía tan extraño, conocía lo que estaba por pasar, a lo que tendría que enfrentarse. Lo que más le aterraba era el resultado que las pruebas de aptitud que tenía que hacer podían dar, si solo salía un único resultado todo estaría bien pero si le salían varios, entonces si que tendría un serio problema, tantas veces imaginándose como una divergente y ahora eso la aterraba. Siendo ese el caso estaría en la misma situación que Beatrice Prior, la protagonista de su libro favorito. Ronin no quería hacer la prueba pero no podía negarse tenía 16 debía hacerla y al día siguiente debía elegir la facción a la que quería pertenecer. Como no estaba apegada a los que se suponía eran sus padres no tenía que preocuparse por dejarles, en su caso el lema, La Facción antes que la sangre no le afectaba para nada, así que no escogería Abnegación.
La sociedad se regía por la separación de las personas en cinco facciones, Erudición para los inteligentes que visten de azul, Abnegación para los altruistas que visten de gris, Verdad para los honestos que visten de blanco y a veces con alguna prenda negra pero principalmente blanco, Cordialidad para los pacíficos que visten de amarillo y Osadía para los valientes que visten de negro, siendo ellos los protectores de la ciudad y la valla que rodea Chicago.
Ronin esperaba en el comedor con el resto de su facción a que la llamaran para hacer la prueba de aptitud, todos los chicos de 16 años deben, al igual que sucedía con Beatrice Prior y su hermano Caleb, ambos también pertenecían a Abnegación.
Las pruebas eran después de comer, los encargados de hacer las pruebas los llamaban de diez en diez, una para cada sala de examen, según las normas no podía examinarte alguien de tu misma facción, normalmente las personas examinadoras eran voluntarios de abnegación pero también de Erudición y Osadía para que así no pueda tocarles uno de su misma facción, así como no podía prepararse de ninguna forma la prueba.
Poco a poco fueron pasando grupos de diez hasta llegar a Ronin, al otro lado de las puertas le esperaba una fila de diez salas. Las cuales solo se usan para las pruebas de actitud, a diferencia del resto de aulas del instituto, están separadas por espejos en vez de cristal.
Nada más entrar Ronin se encuentra con una mujer de Osadía, ni siquiera necesitaba que le dijera su nombre, sabía perfectamente quien era, se trataba de Tori, la misma que le había hecho la prueba a Tris y sabía de los Divergentes por experiencia propia porque su hermano era un divergente. En esos momentos antes de hacer la prueba no solo pensaba en el resultado que obtendría sino en Zac, él estaba en Osadía pero había nacido allí o se había traslado, cual había sido su resultado.
Tori cerró la puerta y se presenta, no podía decirle que ya lo sabía o empezaría preguntarle, simplemente camina y fija la vista en la pared de espejos. La habitación estaba forrada de espejos dejando ver su reflejo desde todos los ángulos permitiéndole contemplar su aspecto, la ropa gris de Abnegación y su figura. En el centro del cuarto hay un sillón con el respaldo abatido como el de los dentistas con una máquina al lado. Si no supiera lo que iba a ocurrir habría pensado que allí pasaban horribles.
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Dentro de Divergente® (Zac Efron y Nina Dobrev)
FanfictionPortada hecha por @karlaLightwood ¿Qué pasaría si un día te despertases y todo fuera diferente? ¿Y si estuvieras en un mundo ficticio? ¿Qué sucedería entonces? Un extraño e inexplicable suceso lo cambia todo, pérdida en un mundo que no existe, al me...